26/07/2025 04:24
26/07/2025 04:20
26/07/2025 04:20
26/07/2025 04:16
26/07/2025 04:16
26/07/2025 04:01
26/07/2025 04:01
26/07/2025 04:00
26/07/2025 04:00
26/07/2025 04:00
Parana » El Once Digital
Fecha: 25/07/2025 07:30
Muerte de René Bertrand. El actor falleció el pasado 26 de junio tras enfrentar una agresiva enfermedad oncológica. El actor, recordado por su trayectoria en el teatro y la televisión, había sido diagnosticado con cáncer apenas cinco meses antes de su muerte. A pocos días de cumplirse un mes de su fallecimiento, su esposa Belén Giménez, madre de sus dos hijos, Sofía y Franco, decidió romper el silencio y compartir en una entrevista con Intrusos (América TV) los desgarradores momentos que vivieron en familia durante la enfermedad de René. “Fue terrible lo que pasó. René tenía todas las ganas de superarlo, tenía mucha fuerza. Fue todo muy rápido, llegó a hacer solamente dos quimios. Cuando terminó los rayos pidió sacarse una foto con los radiólogos. Lo que él más quería era a sus hijos y a mí, lo sé. No se lo contó a nadie, solamente lo vivíamos nosotros”, relató entre lágrimas Belén, visiblemente conmovida por la reciente pérdida. Una batalla rápida y devastadora La actriz y esposa del intérprete explicó que, a pesar del espíritu positivo de René, la enfermedad avanzó con una rapidez inesperada y los tratamientos resultaron muy agresivos. “Se hizo muchos estudios y no le salía nada. Eran 14 remedios en total en una heladerita y una bolsa, yo pensé que era para todo el tratamiento y no, era para un solo día. Estuvo conectado desde las 9.30 de la mañana hasta las 5 de la tarde”, recordó sobre las agotadoras sesiones de quimioterapia. Uno de los momentos más dolorosos que compartió fue cuando, sin quererlo, ella y sus hijos le transmitieron un fuerte cuadro gripal. “Después empezó a pasar todo malo. Nosotros lo contagiamos con los nenes de influenza y tenía 39.9 de fiebre. Entonces, como él estaba inmunodeprimido, se fue a la casa de su mamá y nos separamos ahí. Pero todo el tiempo hacíamos videollamada. Él se sentía bien ahí y hasta hacíamos bromas. Uno de los últimos días pudo comer, porque no estaba comiendo bien. Estaba muy flaquito, creo que pesaba 70 kilos, una cosa así”, expresó con profundo dolor. A pesar de los contratiempos, la familia se mantuvo unida hasta el final, aferrada a la esperanza y al amor. Las videollamadas y las pequeñas señales de mejora fueron refugio en medio del dolor que traía el día a día. El diagnóstico que lo cambió todo Belén recordó con precisión el momento en que recibieron la devastadora noticia. “Nos enteramos en Villa Carlos Paz porque estábamos haciendo temporada allá, por eso fue que nos volvimos antes. Ya los primeros días del mes de febrero estábamos acá, en Capital Federal”, comentó sobre la decisión de regresar a Buenos Aires para que René pudiera comenzar con su tratamiento de forma inmediata. Los primeros síntomas no parecían alarmantes, lo que generó cierta confusión en el diagnóstico inicial. “Le dolía mucho el omóplato. Pensábamos que era porque Franchu es muy gordito y quizá había hecho una mala fuerza y se desgarró. Cada vez era peor y le empezó a salir como un huevito. Se hizo muchos estudios hasta que uno de ellos se los pasa a los médicos de Buenos Aires y le dijeron que se vuelva. Llegamos y le hacen una biopsia”, recordó Belén, describiendo la incertidumbre que vivieron en aquellos días. La situación se agravó con las consecuencias de la quimioterapia. “Se hace la quimio y después él tomaba muchas pastillas para que le deje de doler. Esas pastillas le hicieron una úlcera que explotó y el día jueves lo operaron de urgencia. El cirujano nos dijo que había salido todo perfecto, pero los terapistas me decían que era muy fuerte lo que tenía porque no tenía forma de defenderse. Y me dijeron que tenía solo un 20% de posibilidades de que zafe”, relató con la voz quebrada
Ver noticia original