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» Diario Cordoba
Fecha: 17/07/2025 13:44
La evolución de la demografía agraria, connotada principalmente por el despoblamiento y la caída de la natalidad, aunque de consuno aliada con otros factores políticos y socioeconómicos participantes, aparece como derivada y causa relevante de la crisis de la agricultura tradicional. Consecuente con el desierto poblacional que se acusa notablemente con la pirámide invertida del censo geopónico, amplificándose en la edad sénior, y entre ancianos. Una crisis, en general, iniciada sobre la mitad del siglo XX como consecuencia de la reindustrialización de la economía, provocadora de una notable emigración del campo a la ciudad, tanto de trabajadores como de propietarios y aparceros agrícolas y ganaderos, y más entre los jóvenes, sin que este fenómeno hiciera decaer el apego al abandonado predio, pequeño o mediano, que atesorara en su espíritu el emigrado, aunque a la larga un banal sacrificial empeño, como años después a no mucho tardar se constataría. No obstante, la instrumentalización de la Política Agraria Común (PAC), de la entonces CEE, garantizando y asegurando una parte de las rentas agrarias de determinadas producciones, amortiguaría parte de los efectos de la señalada crítica coyuntura. Tales acontecimientos devendrían en episodios generalizados no solamente en la agricultura española, sino en todo el área europea circunscrita a la común política agraria, si bien con diferenciación de unas zonas con otras. Una crisis que impacta sobremanera en la estructura demográfica de la población más joven, especialmente en su desempleo, no obstante algunos de los alicientes económicos sobre desarrollo rural impulsados por la PAC con ayudas para su primera instalación empresarial, cofinanciada por las comunidades autónomas y el Estado, aunque sin conseguir contrarrestar la elevada tasa de envejecimiento agrario. Añadiéndoseles a la indicada caída de la natalidad, como marchamo del siglo XXI, las dificultades de aprovisionamientos, el sobreprecio de los inputs y costes de cultivo y por ende el encarecimiento de las producciones rurales. *Doctor ingeniero agrónomo y licenciado en Derecho
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