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Parana » Informe Digital
Fecha: 17/07/2025 08:07
Mañana dará inicio la Exposición Rural de Palermo, pero el acto que más expectativa genera será el sábado 26, cuando el presidente Javier Milei se presente en el palco de la tribuna para llevar a cabo la inauguración oficial. El Presidente ya ha confirmado su asistencia. A su vez, una interrogante planea sobre el predio de la Sociedad Rural Argentina (SRA): ¿asistirá también Victoria Villarruel? La vicepresidenta ha recibido una invitación formal y en su círculo aseguran que “el ánimo es estar”, aunque aún no se ha tomado una decisión definitiva. La tensión entre Milei y Villarruel ha alcanzado su punto más álgido: el Presidente la tildó de “traidora”, a lo que Villarruel respondió sin rodeos en las redes sociales. Ahora, la Rural —un espacio amigable para ambos— podría convertirse en el próximo escenario de esta disputa. “Aún no hay decisión tomada. Las dos personas que tienen que definirlo no lo han hecho”, comentan desde el entorno de Villarruel, refiriéndose a dos asesores cercanos a la vicepresidenta. Se está considerando la posibilidad de asistir al acto y también de recorrer la muestra: “Analizaremos cómo lo hacemos”, indican. Aunque el escenario está abierto, el ambiente no es neutral. “La Rural es un espacio y una tribuna amigable para ambos”, reconocen, aunque admiten la necesidad de medir cada gesto: “Independientemente de si hay un saludo formal, sería una buena señal para calmar ciertos temas que preocupan a ambos lados de la sociedad”. Desde su círculo aseguran que Villarruel no teme un posible desaire por parte del Presidente. Ya experimentó una situación similar durante el Tedeum del pasado mayo, cuando Milei evitó saludarla a su llegada a la Catedral Metropolitana. “Desde lo político, no le afectará que haya tensión. Es una mujer de carácter. No se deja llevar tanto por las emociones”, afirman desde su entorno. En La Rural han confirmado que Villarruel fue invitada al acto inaugural y, de decidir asistir, será recibida por Pino. Sin embargo, persisten las dudas sobre su ubicación —una decisión que depende de la Presidencia de la Nación— y el nivel de visibilidad que tendrá su presencia, dado que estarán presentes las figuras más relevantes del Gobierno. El año pasado, en una visita previa al acto inaugural, se le otorgó un lugar destacado: almorzó en el restaurante Central y entregó un premio en la pista central. Este año, dado el crítico estado de su relación con Milei, no se descarta que desde la Rural se intente adoptar un perfil más bajo. Según pudo averiguar LA NACION, aunque en la Rural lo niegan, se están considerando estrategias para evitar situaciones de alta visibilidad, como el almuerzo institucional o la participación en premiaciones en la pista central. Simultáneamente, es evidente el buen vínculo entre Milei y el presidente de la Rural, relación que se ha fortalecido desde el inicio del Gobierno. Hace unos días, como marca la tradición, el presidente de la SRA le entregó en mano la invitación oficial. Ayer, Milei se reunió durante dos horas con la Mesa de Enlace y se mostró cómodo en las instalaciones de la Rural. La relación entre ambos es cercana y cada vez que se encuentran, el saludo es cálido y evidente la sintonía. Pino cuida este vínculo con el Presidente. En este contexto, la presencia —o ausencia— de Villarruel adquiere un peso político significativo. Su círculo sostiene que ella desea asistir: “Por protocolo, debería estar en el acto inaugural. Es una exposición en la que, institucionalmente, tiene que estar”. Sin embargo, aclaran que aún no hay nada definido. “Esto puede resolverse un día antes, incluso en la noche. Se mueven señales, comienzan las operaciones… hay muchas variables que pueden influir”. El año pasado, Villarruel fue recibida con ovaciones. “Vamos Vicky”, “Viva la patria”, le gritaron productores y visitantes mientras caminaba por la pista central. Almorzó con Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), saludó a veteranos de Malvinas, se tomó fotos con caballos y participó en las juras de Hereford y Angus. “Siempre me siento en casa”, comentó esa tarde, al referirse al campo como “un socio estratégico” y “parte del ADN de la Argentina”. Fue un día colmado de muestras de afecto, libros, fotos y abrazos. Ya había tensiones con el Presidente en ese momento —debido a un tuit de Villarruel en defensa de la Selección contra Francia—, pero todo se manejó con un delicado equilibrio. El saludo entre Milei y la vicepresidenta en el palco fue breve, casi mecánico, pero existió. Este año, sin embargo, la tensión es considerablemente mayor. La relación entre Milei y Villarruel ha atravesado la semana más complicada desde que comparten fórmula. El jueves pasado, el Senado aprobó una serie de proyectos —como el aumento a jubilados, la moratoria previsional y la emergencia en discapacidad— sin el respaldo del oficialismo. A pesar de que la vicepresidenta no votó, habilitó la sesión y presidió parte del debate. La reacción del Presidente fue inmediata y enérgica. Desde un acto en la Bolsa de Comercio, la llamó “traidora” y prometió vetar todas las leyes aprobadas. “Si insisten, lo judicializaremos. Pero el impacto sería mínimo y transitorio”, afirmó. Reivindicó su programa económico y aseguró que no cederá en la ortodoxia fiscal: “Vamos a hacer a la Argentina grande nuevamente”. Milei saluda a Villarruel el año pasado en la Rural Villarruel no se quedó callada. Desde su cuenta de Instagram respondió sin filtros, utilizando su estilo directo y sin intermediarios: “Cuando el Presidente decida hablar y comportarse como un adulto, podré conocer cuáles son sus políticas, dado que no me habla”. Justificó su rol en la sesión y contrarrestó: “Si hay equilibrio fiscal, asistir a los más desprotegidos no debería ser tan terrible.”
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