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  • Ricardo Guillermo Leconte “Del brazo y por la calle”

    » El litoral Corrientes

    Fecha: 13/07/2025 10:28

    n Casado con Teresita Mendiondo el 14 de julio de 1960 y tuvieron 9 hijos: Ricardo fallecido al nacer, María Teresa, Ricardo “Caito”, Mariana, María Edelmira, María Corina, Pedro, Alfredo9 “Tito” y Mercedes. Se recibió de abogado en 1957, y desde ese año hasta 1965 fue el presidente de la Juventud Liberal. Fue diputado provincial entre 1958 y 1960. Fue candidato a vicegobernador en las elecciones de 1963, en que triunfó el Pacto Autonomista - Liberal; como el vencedor en la contienda fue el liberal Diego Nicolás Díaz Colodrero, el cargo de vicegobernador le correspondió al autonomista Salvador Di Tomaso. Díaz Colodrero nombró a Leconte su ministro de Obras Públicas; cargo desde el cual se pavimentaron gran cantidad de rutas y calles, se construyeron un importante número de viviendas populares y aeropuertos en las ciudades de Goya, Curuzú Cuatiá, Paso de los Libres y Mercedes. ? Desde 1972 hasta 1983 fue el presidente del Comité de la Capital del Partido Liberal, y fue intendente de la ciudad de Corrientes durante el gobierno de facto del general Juan Alberto Pita entre 1982 y 1983; con el regreso a la democracia fue el presidente del Partido Liberal, reanudando el Pacto Autonomista - Liberal. Fue elegido senador nacional, ocupando ese cargo hasta el año 1987. En 1987 el Pacto obtuvo la victoria nuevamente en las elecciones y, habiendo correspondido el período anterior al autonomista José Antonio Romero Feris, en esa ocasión el Colegio Electoral eligió gobernador al candidato liberal Leconte, acompañado como vice por el autonomista Gabriel Feris. Al finalizar su mandato, las elecciones favorecieron nuevamente al pacto, aunque obtuvo un muy ajustado triunfo sobre la Unión Cívica Radical; no obstante, la deserción de un elector de ese partido causó el fracaso del Colegio Electoral, que no pudo elegir un sucesor para Leconte; éste entregó el gobierno al presidente de la Legislatura, Hugo Manzini, y pocos meses después la provincia fue intervenida por el presidente Carlos Menem. Tras su paso por la gobernación, Leconte fue elegido diputado nacional y continuó presidiendo el Partido Liberal hasta el año 1993; volvió a asumir ese mismo cargo entre 2002 y 2005. ? En el año 2009 publicó su autobiografía política, titulada Más de 60 años con un ideal y un compromiso. Entrevista de Eduardo Ledesma - Ricardo Leconte: “Mi obsesión no fue ser gobernador, sino estar en el manejo de la cosa política”. Asi opinaba el último liberal al frente de una gestión de gobierno que debió soportar, entre otras cosas, la falta de recursos como producto de una hiperinflación superior al 6 mil por ciento. A casi 40 años de aquellos días dice que “quiere ser recordado como un hombre que tuvo vocación por la cosa pública y que honestamente hizo lo que pudo”. Cuando yo tenía 15 años cuenta Ricardo, al salir de una misa del San Francisco, mi amigo Juan Ramón Aguirre Lanari, varios años mayor que yo, me dijo: “Vos ya estás en edad de actuar en política y hoy hay una reunión en el Comité Liberal. ¿Por qué no venís?”. “Le dije a mi padre y nos fuimos”. Era diciembre del 47, momentos del esplendor peronista. Corrientes fue la única provincia que eligió un gobernador no peronista. (Por ese tiempo) Aguirre Lanari fue nombrado director general de Provincias del Ministerio del Interior. Me llamaron para que fuera su secretario. Fui y estuve con él un año y algo. Después volví a Santa Fe, me recibí de abogado en junio de 1947. Vine a Corrientes, y en ese mes se hacía la primera Convención de la Juventud Liberal, para organizarla, y fui electo presidente. Al año entrante fui diputado provincial. Éramos opositores al gobierno de (Fernando) Piragine Niveyro. Defendimos la estabilidad del empleado público. Fuimos los autores del proyecto de Estatuto Docente que se sancionó y de la donación del terreno para el Club Huracán y para el Club Juventud. Y pregunta Ledesma: Pero, ¿cómo se produce su candidatura o cómo se arma eso para que usted llegue a ser candidato? Yo fui militante activo como presidente de la Juventud, presidente del Comité de la Capital, después como miembro del Comité Ejecutivo. Cuando el doctor Ernesto Meabe, que ya tenía 91 años, renunció, me respaldó a mí como su reemplazante. Yo asumí en 1983. Fui candidato del partido. Pero en el Pacto acordamos que el que tenía más votos en esa oportunidad llevaba el gobernador y el otro partido el vice. “Pocho” Romero Feris me ganó, entonces fue “Pocho” el gobernador y García Enciso (Liberal) el vice, y yo fui electo senador Nacional junto con Gabriel Feris. Gana “Pocho” Romero Feris en el 83, y en el 87, por la vigencia del Pacto, le corresponde al Partido Liberal proponer candidato a gobernador. Ya no era por cantidad de votos ahí. Era por alternancia. El Pacto tiene dos principios básicos: uno era la alternancia. En la primera elección, el que sacaba más votos llevaba el gobernador y después se producía la alternancia. Como después hubo varios cortes, se empezó de nuevo en el 83, y salió “Pocho”. Además, la mitad del gobierno era para cada uno de los partidos. Incluso había otra norma: si el gobernador era de un partido, el ministro de Hacienda era de otro. Era una sociedad ejemplar para convivir. No siempre era fácil. En ese sentido, Gabriel Feris-director de El Litoral, que fue mi gran compañero en el Senado y mi compañero de fórmula, fue un gran mediador para limar asperezas, acordar consensos, etc. Y bueno, en la elección del 83, “Pocho” me ganó por treinta mil votos y después por mayor diferencia en el 85; y en el 87 le gané por tres mil votos. Le saqué la diferencia, pero en un clima de convivencia constituimos el Gobierno. De golpe, entre marzo y diciembre de 1991, cuando dejé el poder, con la Ley de Convertilidad de Domingo Cavallo creo que la inflación fue del 2 por ciento. Las Privatizaciones se iniciaron en el orden nacional. Nosotros por filosofía liberal, somos partidarios de reducir la función del Estado, que debe ser muy efectivo y contundente en la seguridad con el monopolio de la fuerza, en la educación y en la salud, para crear las condiciones de convivencia, libertad e igualdad para todos. “El Estado en función de empresario es ineficiente, aunque yo lo maneje”. Y privatizamos el Banco de Corrientes, que tenía un déficit y una deuda con la Nación muy grandes. Refinanciamos la deuda y privatizamos. Privatizamos Obras Sanitarias; los casinos de Corrientes y Paso de los Libres; los hoteles de Goya, Esquina y Curuzú; hasta el Boletín Oficial privatizamos. ¿Cómo definiría usted a su propio gobierno? Pregunta Fernando Ledesma: Yo le diría que fue un gobierno que tuvo que asumir en condiciones muy negativas. Hicimos cosas importantes, para mí la más trascendente, que demuestra el espíritu de Corrientes, fue el Instituto de Cardiología. Esa fue una iniciativa de “Pocho” Romero Feris, él inició las obras y antes de entregarme el mando inauguró cuatro consultorios externos. A mí me tocó la opción de seguir, terminar las obras, poner en función los servicios, internaciones y locales quirúrgicos. Y sobre todo el éxito de la administración por la Fundación. Eso fue muy importante. Y ahí hay dos figuras dentro del Instituto que hay que recordarlas y que fueron claves: el doctor Jorge Badaracco y el doctor Joaquín García. Hablando de las relaciones, en la Capital usted gobernó con dos intendentes: Ana María Pando (liberal) y “Tato” Romero Feris (autonomista). ¿Cómo era la relación con ellos? Bueno, con “Tato” no era fácil. Él era muy activo y trabajador y había sido mi ministro (de Hacienda). Yo me acuerdo que cuando fue ministro era muy diligente y difundíamos la situación financiera todos los meses. Pero yo le daba apoyo a Ana María Pando, intendente, y un día “Tato”, al año de gestión, me dijo: “Pero no tenemos plata. No le podemos dar a Ana Pando”. Él ya tenía sus intenciones para disputar la Municipalidad. “Si vos le seguís dando plata, yo me voy”, me dijo. Entonces yo le dije, “tráeme tu renuncia. Te voy a dar un abrazo agradeciéndote lo que has hecho conmigo, pero traeme tu renuncia porque yo la voy a seguir ayudando”. Después cuando hubo la elección él con apoyo peronista nos ganó. Ahí hubo una polarización. Los dos fueron buenos intendentes. Cuando yo terminé mi mandato le entregué el poder al presidente de la Cámara de Senadores, que era (Hugo) Mancini. Me acuerdo que horas antes de entregar me llamó (José Luis) Manzano, ministro del Interior de Menem, y me dijo: “Si no hay gobierno nuevo, quédate vos. El presidente te ofrece todo el apoyo”. Yo le dije: “La Constitución dice que mi mandato dura 4 años y no me quedo un minuto más. Menem mandó de interventor a a Francisco de Durañona y Vedia, después vino Claudia Bello, que hizo una campaña muy rastrera contra los opositores. Y al final Menem -que tenía cintura política- mandó a (Ideler) Tonelli, que fue un caballero. Del Brazo y por la calle y Raffo quiere emular en Ricardo y Teresita la película que protagonizaron Rodolfo Bebán y Evangelina Salazar en 1966. Aunque sólo el título es equiparable a este matrimonio. PUES ELLOS PUEDEN CAMINAR ORGULLOSOS POR LA CALLE SIN QUE NADIE LOS SEÑALE CON EL DEDO comentó la doctora Ana María Pando en su reportaje con Eduardo Ledesma. Un ejemplar gobernador y matrimonio. DOY FE

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