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Parana » Informe Digital
Fecha: 13/07/2025 08:03
La vicepresidenta Victoria Villarruel finalmente rompió el silencio y la inercia que marcada su actuación desde que el presidente Javier Milei declaró que “no participaba” del Gobierno. Aislada en el Senado, sin contacto con el Presidente y sin vínculos con la Casa Rosada, utilizó sus redes sociales para responder a las críticas sobre su actuación en la reciente sesión del Senado. En la Casa Rosada, optaron por el silencio. Algunas voces en privado señalaron que Villarruel estaba “perdida” y no le dieron mayor importancia. En el oficialismo no hubo respuesta, al menos por el momento. La titular del Senado expresó duras críticas hacia el Presidente, desatando una nueva crisis en el Gobierno: “Si hay equilibrio, entonces asistir a los más desprotegidos no debería ser tan terrible. El tema es que un jubilado no puede esperar y un discapacitado menos”, afirmó la vicepresidenta al responder a una crítica en redes, y agregó: “Que ahorre en viajes y en la SIDE y listo”. Un dardo dirigido no solo al Presidente y sus actividades en el exterior, sino también al asesor Santiago Caputo, responsable del sistema de inteligencia. Villarruel recibió una avalancha de críticas en sus redes por su actuación en la última sesión del Senado, en la que se votaron varias leyes de impacto fiscal. En otra de sus respuestas, Villarruel declaró que “cuando el Presidente decida hablar y comportarse como un adulto, podré saber cuáles son sus políticas, dado que no se pronuncia”. Villarruel maneja sus propias redes sociales; no cuenta con community manager ni asesores en esta área. En este aspecto, se asemeja al Presidente. En su entorno, mantienen un estricto silencio. Las contundentes respuestas que dio la vicepresidenta ante las críticas revelaron el descontento que había estado acumulando hacia la Casa Rosada y marcaron un nuevo episodio que aleja cada vez más la posibilidad de restablecer el vínculo entre Milei y su vicepresidenta. La presidenta de la Cámara alta ya había tenido un cruce severo con Patricia Bullrich el propio jueves, día de la sesión, intercambiando acusaciones mutuas. A Villarruel, que ha permanecido recluida en la Cámara alta, se le plantean interrogantes. Había logrado establecer una buena relación con el líder de la banca peronista, José Mayans, pero durante la última sesión, el formoseño criticó con dureza el accionar del oficialismo. El lunes, Villarruel y Mayans se reunieron para comenzar a organizar el trabajo legislativo, lo que culminó en una reunión de jefes de bloque para el martes. En medio de tensiones incluso con aliados como la cordobesa Carmen Álvarez Rivero, no está claro cómo continuará la labor legislativa en la Cámara alta. En otra de sus declaraciones, la vicepresidenta dio la impresión de sugerir actos de corrupción en el Poder Ejecutivo. “Así vivo mi vida en paz, dado que así vivimos los que no robamos”, expresó al responder a un comentario que indicaba que la sociedad recuerda a los presidentes, pero no a sus vicepresidentes. En la Casa Rosada, se limitaron a señalar que el comentario no estaba dirigido a Milei.
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