Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Ale Sergi y el desgarrador recuerdo de su padre en La Voz Argentina: “Sos igual a él”

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 08/07/2025 14:49

    La presentación de Oscar Burgos en La Voz El estudio vibraba con la energía expectante de una nueva gala, pero nada pudo anticipar lo que sucedería esa noche en La Voz Argentina 2025. Bajo los focos, con el murmullo apagado del público y el brillo en los ojos de los coaches, una escena de profunda emoción se apoderó del aire. En un instante, todo el magnetismo del espectáculo se concentró en un solo punto: Ale Sergi se quebró al ver a un participante idéntico a su padre fallecido. En una nueva jornada de audiciones a ciegas, Oscar Burgos, de Junín de Los Andes, subió al escenario soportado por los recuerdos, las expectativas y el temblor de lo irrepetible: el expolicía de 57 años interpretó Sobreviviendo y conquistó el corazón del público y del jurado. La atmósfera del estudio se tornó aún más densa cuando quedó claro que, detrás de la voz y la potencia de la canción, había años de vida recorridos. No solo eso: Oscar no pisó solo ese escenario. Lo acompañaron su mujer, su hija y, sobre todo, su nieto, quien no pudo contener las lágrimas al ver a su abuelo. Nadie sospechó que, al girarse las sillas, algo mucho más grande que el talento sorprendería a los jurados y a todos quienes miraban el programa. Ale Sergi recordó a su padre en La Voz Fue Soledad Pastorutti quien primero apreció la fuerza de la interpretación, al girar su sillón con decisión. Poco después, Miranda! hizo lo propio, lo que terminó de sellar la suerte del participante. Entonces, llegó el momento de la devolución y, con él, la confesión de Ale. “Por ahí no tiene nada que ver, y no es por ponerme muy sensible, pero, ¿sabés una cosa? Sos igual a mi papá y mi papá se llama Oscar. Cuando te vi, sentí eso y estoy un poco movilizado“, se atrevió a decir el cantante, la voz entrecortada, la mirada fija en el participante. ¿Cómo no conmoverse ante esas palabras? ¿Quién, al recordar a un ser querido ausente, no sintió alguna vez el temblor inesperado de una memoria viva? Mientras el público aplaudía, el propio Oscar Burgos digería la confesión de Ale y decidía sumarse al equipo de Soledad Pastorutti. Pero la emoción no cedía. La cámara buscó el rostro de Ale: aún temblaba por dentro. “Se parece... cuando me di vuelta y lo vi, como que me bajó. Mi papá no vive y me pasa muchas veces de encontrar gente, no sé, en el colectivo, mil veces, y ver a mi papá“, admitió, sincero, ante un auditorio que lo escuchaba en absoluto silencio. La emoción colmó el estudio de La Voz tras el recuerdo de Ale Sergi No fue solo la voz lo que cruzó la pantalla, sino una herida reabierta por la nostalgia, por ese tipo de casualidades que parecen burlarse del dolor y del milagro de los reencuentros fugaces. Entonces, Ale ofreció a todos un recuerdo impregnado de amor filial: “Fue una locura, porque mi papá me apoyó un montonazo con la música y justo cuando empezamos con Miranda!, no llegó ni a verme en el Ateneo. Me fue a ver a 200 mil lugares cuando tocaba para 10 personas, 50 personas, ahí mi viejo esperándome, bancándome. Cuando agarramos Miranda! y la pegamos, yo de alguna manera sentí como que fue un canje macabro del señor“. En ese instante, todos en el estudio sintieron la importancia de un padre presente en la carrera de un hijo, de la ausencia que nunca se termina de llenar por completo. Si algo enseñó esa noche La Voz Argentina, no fue solo sobre talento ni sobre competencia. Fue sobre la fragilidad, el amor y la manera en que, a veces, un rostro desconocido puede devolvernos, por un momento, a quienes ya no están.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por