05/07/2025 07:39
05/07/2025 07:35
05/07/2025 07:35
05/07/2025 07:34
05/07/2025 07:33
05/07/2025 07:32
05/07/2025 07:30
05/07/2025 07:30
05/07/2025 07:30
05/07/2025 07:26
Parana » Entreriosya
Fecha: 05/07/2025 03:02
Miguel Ángel Romero, de 39 años había llegado hacía pocos meses a la zona rural de Olavarría, en la provincia de Buenos Aires, donde vivía con su pareja, Daiana Contreras, de 34, y la hija de ella, Iris Uhart de 4 años. Pero este jueves, el hombre no se presentó a trabajar y su ausencia puso en alerta a un vecino, que se acercó a la vivienda y ante el panorama llamó a la policía. Al ingresar, los efectivos encontraron al hombre, a la mujer y a la nena muertos dentro de una habitación cerrada por dentro. Todo ocurrió en la estancia “El rincón del 18”, en Espigas, a 40 kilómetros de la ciudad de Olavarría, en el centro de la provincia de Buenos Aires. La habitación en la que estaban los cuerpos se encontraba cerrada, con la llave puesta del lado de adentro. Esa es una de las claves del crimen y por la que, en principio, descartan la participación de otras personas. Las heridas son otras de las pistas que guiaron a los investigadores para caratular el caso. Contreras fue víctima de asfixia mecánica, mientras que la nena de 4 años presentaba un golpe contundente que le generó hundimiento de cráneo. A metros de ambas, Romero tenía una herida cortopunzante en la zona pectoral y estaba colgado de un picaporte de la puerta de la habitación, casi arrodillado. En un inicio se barajó la posibilidad de que la menor fuera la hija de ambos, aunque en las últimas horas del jueves esa hipótesis fue echada por tierra por los investigadores y obligó a cambiar el mapa conceptual, que viró desde “femicidio y filicidio seguido de suicidio” a “doble homicidio seguido de suicidio”. Según consignaron fuentes de la investigación al portal En Línea Noticias, los cuerpos habrían llevado más de 17 horas antes de ser encontrados. Los agentes de la división Científica de la Bonaerense confiscaron, durante el peritaje de la escena, un cuchillo, tres teléfonos celulares y una faja pampa -un tradicional cinturón campero- que, se presume, habría sido un arma de estrangulamiento. Intervino también el fiscal Christian Urlézaga, del Departamiento Judicial de Azul con sede en Olavarría. Romero era oriundo de Corrientes y llevaba junto con Contreras pocos meses en pareja. Podes comentar y leer comentarios sobre esta noticia mas abajo
Ver noticia original