Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • El ghosting afecta la salud emocional del 65% de las personas

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 04/07/2025 08:55

    Conversaron sobre "El Ghosting" en el estudio de Infobae “¿Por qué alguien desaparece sin dejar rastro tras una cita perfecta?” Con esta pregunta, el fenómeno del ghosting se instala en el centro del debate social. Quizá en alguna oportunidad saliste con una persona, tuviste una cita súper divertida, la pasaste buenísimo, reíste a morir, hubo carcajadas, conexión, química… Y de la nada la otra persona no te responde más: desaparece. Este fenómeno más allá de ser irresponsabilidad absoluta, en este tiempo se conoce como ghosting, que en español se traduce como “hacerse el fantasma”, o “fantasmear” haciendo referencia al acto de desaparecer de la vida de una persona. La acción de cortar toda comunicación con alguien de manera abrupta y sin explicación. Según la psicóloga clínica Celia Antonini (MN 10.494), hay un 65% de personas que lo han sufrido. La experiencia, lejos de ser aislada, afecta a una mayoría significativa, lo que lleva a muchos a definirse como “víctimas, y algunos victimarios”, reconociendo que muchos han estado en ambos lados de la situación. El auge de las redes sociales ha facilitado este comportamiento. “Lo más fácil que hay hoy a través de las redes sociales, es desaparecer, no contestar, ni enfrentar las situaciones. Desaparecer es más rápido, más fácil, más sencillo, no tiene ningún tipo de compromiso y uno se siente usado, maltratado”, explica la especialista. Foto: Diego Barbatto Aunque el ghosting existía antes de la era digital, la tecnología ha hecho más evidente la desaparición: “Antes de las redes también sucedía. No tenía nombre. La persona desaparecía, ya no se podía volver a encontrar. Pero ahora con las redes ubicamos a todo el mundo más rápido. Y es difícil porque te das cuenta que es que te dejó de hablar a ti. A esa persona es imposible que se la haya tragado la tierra”. El impacto emocional del ghosting resulta profundo. “Genera no solamente dolor, sino que genera esa sensación de rechazo”, afirma Celia. La reacción cerebral ante el rechazo es tangible: “Hoy sabemos lo que el rechazo y la crítica provocan. Se enciende un circuito en el cerebro, que es el circuito del dolor físico. Quiere decir que cuando eres rechazado, te critican o te dicen algo agraviante para ti, lo que te sucede es que tienes un dolor y no es baja autoestima... es dolor por el rechazo”. La experta compara la sensación con “sostener una taza de té caliente en la mano”, subrayando que el dolor es real y universal: “No hay ninguna persona que no sienta algo cuando es rechazado, cuando es criticada”. (Diego Barbatto) La conversación aborda la confusión frecuente entre dolor por rechazo y baja autoestima: La autoestima es “auto”, es la estima que te tienes a ti mismo, no es la estima que te tiene el otro, aclara la experta. “Si yo tomo la gente que me rechaza, la gente que me critica o la gente que me alaba y que me dice que soy fantástica, divina y maravillosa, yo tendría la estima de acuerdo a las personas con las cuales me voy a enfrentar ese día. Entonces el día de hoy lo voy a pasar de acuerdo a lo que el otro me diga. Si me dicen que soy maravillosa, voy a tener un buen día y si me rechazan voy a tener un mal día. Nosotros confundimos esto de la autoestima”. El análisis descarta que el ghosting sea una patología. No es una cuestión de patología: es una cuestión de falta de empatía, de no importarse por lo que siente el otro. Si desaparezco, no me importa lo que le estoy haciendo al otro. No me interesa si me va a buscar o no; lo bloqueo, la bloqueo. Da igual, es una falta de conexión y de responsabilidad hacia lo que se generó en ese vínculo, sea poco o mucho. Y desaparecer es eso, es una falta de no tener en cuenta al otro, sostiene la especialista. “No es un enfermo el que lo hace”, insiste, sino alguien “descuidado que no mide el daño que está haciendo”. (Diego Barbatto) Se explora también la contradicción entre la intensidad de algunas citas y la posterior desaparición. “¿Por qué maximizar la cita o el momento contigo? ¿Por qué hacerte sentir tan bien, sin dar ni una señal de que algo está saliendo mal y de repente desaparecer?”. Pero no todas las personas actúan igual ni son tan efusivas. En lo nuevo nos sentimos mucho más impactados. El relato incluye testimonios de experiencias extremas: “Hace tiempo una chica salió con un chico y él le dijo que era la mejor cita de su vida, la mujer más increíble que había conocido, que nunca se había reído tanto… Cuando llegó a su casa ella estaba bloqueada de WhatsApp y de Instagram”. Celia califica este caso como “muy fuerte” y poco frecuente, señalando que “esto realmente es una mentira. Todo lo que él le dijo”. (Diego Barbatto) Para enfrentar el ghosting, la experta recomienda no depositar demasiadas expectativas en los primeros encuentros: “No tenemos que darle tanta importancia a la primera cita, ni a la segunda, ni a la tercera. O sea, tenemos que ir un poco más despacio, justamente porque estamos hablando de casi un 65% de gente que le ha pasado. Entonces, la probabilidad de tener un contacto con el otro y que el otro desaparezca es muy alta”. Además, insiste en que “uno no es lo que el otro dice. Uno es lo que uno se cree que es”. La tendencia a confirmar las propias creencias influye en la interpretación de las experiencias: “Si yo me siento la mujer más linda del mundo, me subo al colectivo, al bus y cuando me miran digo ¿Por qué me miran? porque soy la más linda. Pero si yo subo al colectivo o al bus o al metro pensando que soy la mujer más fea que hay, cuando me miran, yo voy a decir que me miran porque soy la más fea. Y la verdad es que la gente a lo mejor me mira nada más que para no llevarme por delante. Pero uno confirma lo que quiere confirmar y uno confirma lo que cree que es y lo que siente que es”. El cierre de la conversación gira hacia la responsabilidad emocional y la posibilidad de evitar el ghosting con un simple mensaje. “No es tan difícil dar la cara. Manda un mensaje y dile: ‘Te agradezco muchísimo, lo he pasado muy bien, pero no voy a poder salir más contigo’. ¿Es tan difícil?”. Celia responde: “No sé si es tan difícil, pero creo que hoy, al ser todo a través de las redes y la comunicación toda es a través de las redes, es mucho más fácil desaparecer que dar la cara. Es una falta de responsabilidad. Por supuesto, es no tener en cuenta al otro, sin duda. Pero uno tiene que tener un compromiso que mucha gente hoy no tiene”. La conversación concluye con la idea de que “sería mucho más sano” cerrar los ciclos de manera directa, ya que “mañana te lo encuentras por la calle y le dices hola, qué tal, y ya está. Si ya se había cerrado la historia”. Foto: Diego Barbatto Gracias por llegar hasta acá.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por