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Parana » Informe Digital
Fecha: 02/07/2025 23:40
La cadena avícola presentó un reclamo respaldado por datos contundentes, un diagnóstico certero y una consigna clara: establecer condiciones justas para competir. Si bien se reconocieron los avances en materia de desregulaciones del Gobierno, se enfatizó la necesidad de “acelerar el acceso al crédito” para el sector y reducir la presión impositiva. Así lo expresó el presidente de la Cámara Argentina de Productores Avícolas (Capia), Juan Kútulas, durante su discurso por el Día de la Avicultura Argentina, que se conmemora hoy. En el evento, llevado a cabo en el Centro Costa Salguero, asistieron, entre otras autoridades nacionales y provinciales, Manuel Chiappe, subsecretario de Producción Agropecuaria y Forestal. Aunque se esperaba la presencia de la vicepresidenta Victoria Villarruel, no pudo asistir debido a “compromisos institucionales de último momento”. En un mensaje enviado, resaltó el trabajo del sector. Kútulas destacó que Argentina cuenta con más de 58 millones de ponedoras, 900 millones de pollos faenados al año y más de 17.500 millones de huevos producidos. En este contexto, indicó que el sector abastece con eficiencia el mercado interno y exporta a más de 65 destinos, además de generar más de 90.000 empleos directos e indirectos en 18 provincias, y consumir más de 7 millones de toneladas de maíz y soja anualmente. El empresario observó que este volumen productivo se traduce en una facturación combinada de casi US$7000 millones y exportaciones por US$450 millones. A escala global, Argentina ocupa el segundo lugar en consumo de huevos, con 363 unidades por persona, es el octavo productor mundial de carne aviar, el décimo exportador de esta proteína, y se sitúa en el puesto 15 como exportador de ovoproductos. El huevo es considerado por la FAO como el alimento más completo después de la leche maternaFoto: Freepik “La avicultura es mucho más que cifras. Es una cadena estratégica que genera arraigo, empleos de calidad, progreso en comunidades del interior, agrega valor al maíz y la soja, y responde a una demanda global de alimentos accesibles, seguros, saludables y sostenibles”, afirmó. Subrayaron que, con un consumo récord, la industria avícola se consolida como un pilar nutricional y motor productivo, aunque advirtió sobre desafíos estructurales que amenazan su competitividad. Ambas proteínas, accesibles, completas y saludables, son actualmente las más consumidas por los argentinos, con un promedio anual de 73 kilos per cápita. “El huevo es considerado por la FAO como el alimento más completo después de la leche materna”, recordó. No obstante, Kútulas advirtió que la elevada carga impositiva —que en muchos casos supera el 40% del precio final— disminuye la competitividad frente al resto del mundo y castiga al productor formal. “El huevo es la única proteína de origen animal que tributa 21% de IVA; esta situación debe ser corregida. El contrabando en zonas de frontera genera problemas sociales para pequeños productores, distorsiona precios, pone en peligro nuestro estatus sanitario y pone en riesgo 450 millones de dólares en exportaciones”, señaló. El sector aviar sostiene que aún no cuentan con líneas de financiamiento Gza. Secretaría de Agricultura Destacó también un aumento en las importaciones de productos aviares. “A pesar de nuestra competitividad, las asimetrías con otros países y la falta de planificación de reposiciones nos perjudican. Aún no contamos con líneas de financiamiento accesibles para inversiones productivas. Las empresas sostienen sus avances con recursos propios que no cubren las necesidades mínimas”, afirmó. Igualmente, mencionó que desde Capia enfatizan la necesidad de contar con la herramienta de vacunación contra la influenza aviar para proteger a las aves en ciclos prolongados, siempre de manera estratégica, transparente y asegurando que su implementación no afecte los mercados internacionales abastecidos por la industria exportadora de carne aviar. “Celebramos que hoy comenzamos a vislumbrar una Argentina más desregulada, con menos burocracia, más libertad, cumplimiento de la ley y una economía que comienza a florecer. Una Argentina que, por primera vez en mucho tiempo, nos permite planificar”, agregó. “Es esencial acelerar el acceso al crédito para modernizar galpones, mejorar índices de conversión y garantizar los vacíos sanitarios requeridos por las nuevas líneas genéticas. Elogiamos los primeros pasos que hemos dado en ese sentido, pero aún no son suficientes para la gran escala que precisamos. Estos desafíos requieren decisiones políticas urgentes y concretas”, afirmó. El empresario sostuvo que se deben asumir desafíos y planificar el futuro con reglas claras; para ello, la cancha debe estar nivelada. “No pedimos privilegios ni subsidios, necesitamos condiciones justas para producir, crecer y competir en igualdad”, afirmó. Por su parte, destacó que la carne de pollo —magra, rica en proteínas de alto valor biológico, vitaminas del grupo B y minerales esenciales— es otra opción fundamental en la mesa argentina. Su bajo costo, digestibilidad y valor cultural la posiciona como una de las carnes más elegidas, con más de 50 kilos por persona al año.
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