29/06/2025 18:58
29/06/2025 18:58
29/06/2025 18:54
29/06/2025 18:53
29/06/2025 18:53
29/06/2025 18:52
29/06/2025 18:52
29/06/2025 18:51
29/06/2025 18:51
29/06/2025 18:51
Gualeguay » Debate Pregon
Fecha: 29/06/2025 11:45
“Países Bajos es una monarquía parlamentaria. El rey Willem-Alexander es el jefe de Estado, pero su rol es principalmente ceremonial y representativo. El poder real lo ejerce el Parlamento y el gobierno elegido democráticamente. No he tenido la oportunidad de verlos en persona, pero es común que participen en actos públicos y eventos importantes. La figura de la reina Máxima es muy querida, especialmente por su origen argentino, y muchos la ven como un puente entre culturas. Con Dianela. amiga argentina, festejando el cumpleaños del rey El día del cumpleaños del rey es a fines de abril; es feriado por ese motivo. Los canales se llenan de gente en sus botes, celebrando y vestidos de naranja. El paisaje urbano en Países Bajos es único: casas angostas, muchos canales, arquitectura moderna que convive con construcciones antiguas, y bicicletas por todos lados. Todo es muy estético, pero funcional a la vez. Los medios de comunicación son variados: hay canales de TV públicos y privados, mucha presencia digital, radios locales e internacionales, y prensa escrita en varios idiomas. Los florecidos campos de Holanda En cuanto a la vivienda, no es fácil conseguir alquiler en ciudades como Ámsterdam, ya que hay mucha demanda. Los precios son altos, pero si se busca con tiempo y paciencia, se pueden encontrar buenas opciones. Además, hay muy buenas posibilidades de acceder a créditos hipotecarios para comprar una vivienda, seas extranjero o no, lo que hace más fácil proyectarse a largo plazo. Hacer amigos acá fue más fácil de lo que pensaba. Hay muchos grupos de expatriados y la mayoría de la gente está abierta a conocer nuevas personas. Tengo amigos de distintas partes del mundo: Italia, Bélgica, Estados Unidos, y también algunos locales. También me encontré con varios argentinos, y me gusta reunirme con ellos para compartir nuestras costumbres: unas buenas empanadas caseras, algún mate, y largas charlas sobre la vida que, por más lejos que estemos, siempre nos hacen sentir un poco más cerca. En cuanto a distracciones, hay de todo: museos, parques, festivales, mercados al aire libre, bares, ferias de comida. Y lo mejor es que todo se puede recorrer en bicicleta, lo que hace que moverse por la ciudad sea parte del disfrute. El ritmo de vida es tranquilo, pero siempre hay algo para hacer. La fiesta del cumpleaños del rey con los canales llenos de botes color naranja Reflexión final Vivir en Países Bajos me ha enseñado a valorar las cosas simples: andar en bici para ir a trabajar, tener tiempo para uno mismo, disfrutar de la ciudad sin prisa. Aprendí mucho sobre la importancia de la adaptación, la riqueza de la diversidad cultural y el valor de la independencia. Es una experiencia que me permitió crecer tanto personal, como profesionalmente, y aunque la distancia con Gualeguay es grande, siempre llevo mis raíces conmigo. Esta aventura europea es un capítulo más en mi vida, lleno de aprendizajes y nuevas perspectivas.”
Ver noticia original