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Concordia » Despertar Entrerriano
Fecha: 28/06/2025 20:59
Durante la madrugada de este viernes 27 de junio, se produjo un nuevo hecho de inseguridad en la ciudad que reavivó el reclamo de vecinos y comerciantes por mayor presencia policial, especialmente durante la noche. Esta vez, el blanco fue el reconocido local de blanquería Comodín Blanco, ubicado en calle Laprida 1098, que sufrió la rotura de uno de sus vidrios de vidriera y el robo de un acolchado triple, generando además importantes daños materiales. Desde Despertar Entrerriano dialogamos con la propietaria del comercio, quien visiblemente afectada relató lo ocurrido y compartió el sentimiento de frustración que se extiende entre los comerciantes de la zona: “Por la madrugada rompieron el vidrio del negocio y se llevaron un edredón que estaba en la vidriera. El daño económico no termina en el producto robado, también está el costo del arreglo del vidrio y lo que esto representa para quienes todos los días nos esforzamos por sostener un comercio abierto. Pero más allá de lo material, lo que más duele es la sensación de vulnerabilidad. Nos sentimos desprotegidos.” La comerciante manifestó además que este no es un hecho aislado. Según le informaron agentes policiales que se acercaron al lugar, esa misma noche se habría registrado otro robo en las inmediaciones. “La policía vino, tomó los datos y me dijeron que iban a revisar cámaras de seguridad de la zona. Me comentaron que también hubo otro robo anoche. Ya no se trata de casos puntuales: es una situación que se repite.” Frente a este panorama, remarcó que los reclamos de mayor seguridad no son nuevos y que hace tiempo los comerciantes del área de calle Las Heras y alrededores vienen alertando sobre la falta de patrullaje nocturno: “La policía se ve solo un rato por el día en esta zona. Por las noches no frecuentan. Y eso lo saben todos los que vivimos y trabajamos acá.” Pese al difícil momento, la dueña de Comodín Blanco aseguró que no bajará los brazos y que seguirá adelante, aunque ahora con nuevas medidas de resguardo para su negocio: “Por mi parte seguiré trabajando. Tendré que cuidar más lo mío y reforzar la seguridad del local. No me queda otra.” Finalmente, expresó un deseo cargado de ironía pero también de humanidad frente al robo sufrido: “Ojalá la mercadería que me robaron la usen con sus hijos y los abriguen. Porque esto también habla de la sociedad que estamos viviendo.” Fuente: Despertar Entrerriano
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