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Parana » Informe Digital
Fecha: 28/06/2025 01:39
Tal como lo había anticipado, el Gobierno subirá las retenciones a las ventas de soja y maíz, aunque decidió mantener bajas las retenciones de trigo y cebada. El 1° de julio pasarán, respectivamente, del 26 al 33 por ciento y del 9,5 al 12 por ciento. En el caso de la soja la suba es sustantiva, de siete puntos porcentuales, y los analistas anticipan un freno en las exportaciones de la oleaginosa. Desde las gremiales rurales advirtieron también al Gobierno que no liquidarán hasta noviembre. El Decreto 439/2025 que oficializa la decisión fundamenta la suba en la “necesidad de fortalecer el equilibrio fiscal” y “garantizar la eficacia de la política macroeconómica”. El éxito del programa económico parece haber cambiado y pasó de depender de las liquidaciones de divisas provenientes de las exportaciones del sector agropecuario a nuevamente anclarse en el equilibrio de las cuentas públicas. El Gobierno había tomado la decisión en enero pasado de rebajar temporalmente las retenciones para estimular la liquidación de cosechas en temporada alta. Desde la Sociedad Rural Argentina (SRA) no se demoraron en contestar al Gobierno. “Se van a quedar secos hasta noviembre”, sentenció Andrés Costamagna, directivo de la entidad, haciendo referencia a que muchos productores podrían suspender las ventas habiéndose armado de un colchón al invertir en el “carry trade” las divisas obtenidas de la liquidación de comienzos de año. Aprovecharon las tasas de interés atractivas y la estabilidad cambiaria que garantiza el Banco Central con sus intervenciones en futuros. Es esa estabilidad cambiaria la que el productor puede considerar amenazada de aquí a octubre que son las elecciones de medio término. Entendiblemente, en un contexto de creciente salida de divisas en concepto de importaciones, viajes al extranjero y pago de deuda. “Si creen que en octubre el Gobierno devaluará la moneda, entonces van a esperar hasta noviembre para liquidar”, contempla Javier Preciado Patiño, especialista en agronegocios y director en RIA consultores. “La suba en soja es importante porque son 7 p.p. más, es decir que el productor recibirá 30.000 pesos menos aproximadamente. Entonces es casi seguro que se va a frenar la venta de soja a partir del martes que viene y también la registración de exportaciones (que fue adelantada)”, agrega. Respecto de los dólares que ingresaron hasta el momento, Preciado Patiño estima unas 21,4 millones de toneladas vendidas hasta este viernes, “con lo cual podemos terminar en 23 millones considerando el lunes”. El Gobierno logró concentrar las liquidaciones de dólares en los primeros meses del año. “Se trató del volúmen de ventas más alto en la serie que empieza en 2029: más alto inclusive que la liquidación que siguió al dólar blend de Sergio Massa (unas 15,6 millones de toneladas) y lo que recibió Milei a comienzos de su mandato (18,7 millones en la cosecha gruesa de 2024)”. Pero persiste el interrogante en materia de divisas para lo que resta del año. El superávit externo se achicó considerablemente versus el año anterior de la mano de crecientes importaciones, viajes al extranjero y el pago de los servicios de la deuda. En cuanto al equilibrio de las cuentas públicas es verdad que las retenciones tienen mucho que aportar. Preciado Patiño estima que el Gobierno dejó de recaudar entre 120 a 140 millones de dólares por mes por Derechos de exportación entre enero y junio. “La diferencia fueron unos 900 millones de dólares que quedaron a favor del productor, y si el Gobierno extendía la rebaja de retenciones a octubre perderían unos 400 millones de dólares más”, apunta. De todas formas es delicado el equilibrio que buscará sostener el Gobierno, con menos dólares en los meses que siguen y el temblor que suele provocar en los mercados la contienda electoral, se aproximan riesgos que podrían poner en jaque la base real del modelo económico, que es la estabilidad cambiaria y el cuidado de la inflación, más allá del superávit fiscal que también está tensionado en materia de los ingresos. El voto que tiene el oficialismo en Córdoba, Santa Fé, Entre Ríos y una parte de la provincia de Buenos Aires proviene también del sector rural, que salió a cruzar al Gobierno por no prorrogar la rebaja de las retenciones. No sólo la SRA cuestionó la decisión, también lo hicieron entidades como Coninagro y las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) con sendos comunicados. Las últimas señalaron que el restablecimiento de las retenciones a los granos se da “en un contexto productivo extremadamente adverso”. Mientras Coninagro sostuvo que “la medida fue tomada en el medio de procesos productivos y muchos de ellos se encuentran inconclusos al 30 de junio próximo”.
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