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» Diario Cordoba
Fecha: 26/06/2025 15:55
-Aunque se haya oído nombrar muchas veces, conviene decirle a la gente qué es Fepamic y a partir de ahí empezar a hablar, ¿no? -Sí, efectivamente. Yo creo que a pesar de que el nombre o la entidad suena y se conoce, nos estamos encontrando que cuando vienen a nuestras puertas se dan cuenta de que la dimensión de nuestra acción es bastante desconocida. Y estamos en esa labor, la de intentar vender todo lo que hacemos, porque no solamente somos una flota de transporte adaptado o centros de atención a personas gravemente afectadas, sino que somos un equipo, hoy en día somos una estructura, una ONG, que conformamos y representamos a 30 asociaciones. -¿A quién representan esas asociaciones? -Esas 30 asociaciones representan a la discapacidad física y orgánica de Córdoba y provincia. Esa es la pata política de Fepamic ¿no? Es decir, que surgió para dar voz a la problemática de las personas con discapacidad. Después, nosotros tenemos un grupo empresarial conformado por seis mercantiles, cinco centros de empleo de iniciativa social y una ordinaria. En total, en este grupo somos más de 759 trabajadores. Y luego tenemos una fundación. -¿Qué hace la fundación? -La fundación lo que hace es revertir a la sociedad parte de lo que hemos recibido de ella. También lo devolvemos y lo reinvertimos para transformar y mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad. -¿Y eso cómo se hace? ¿Cómo se articula todo eso sin perder esa esencia fundamental de atender a esas personas? -Se articula no perdiendo de vista que nosotros nacimos para mejorar la calidad de vida de las personas. Eso es nuestro mantra, nuestra misión. Tenemos que ser referentes y tenemos que dar una respuesta útil a las personas con discapacidad. ¿Cómo creemos que es la mejor manera? A través del empleo. Y así fue como surgió el grupo empresarial, a través del cual dimos empleo a las personas con discapacidad. ¿Por qué lo hicimos? Porque nadie les daba la oportunidad. -¿Cuál es la gran dificultad de una entidad como esta para conseguir esa integración laboral? ¿Tiene que ser a través de empresas propias? ¿Es fácil hacerlo en empresas terceras? -Tuvimos que nacer porque en los diez primeros años de historia de Fepamic, nosotros formábamos y capacitábamos para que las personas fueran al mercado ordinario. Sin embargo, nos dimos cuenta de que no las absorbían. Entonces, como vimos que nuestra acción no servía de nada, dijimos: «o lo hacemos nosotros o no lo hace nadie». Así que empezamos con una actividad, de cuatro personas, y lo hicimos en la limpieza. -Eso le iba a preguntar, ¿qué tipo de trabajo, de actividad, de labor desempeñan las personas que ustedes ocupan? -En principio empezamos con actividades que requerían baja cualificación profesional, porque esa era la realidad de las personas con discapacidad. Casi el 70% de las personas de nuestra bolsa de empleo no tienen estudios básicos. Eso condicionó el comienzo de determinadas actividades. Empezamos con cuatro personas, en limpieza de comunidades y lavaderos de coches y a partir de ahí empezamos con más actividades, como la limpieza diaria por municipios. Después dimos el salto no solamente para crear empleos, sino para atender a los nuestros, que eran nuestro gran deber. Y ahí empezamos con las unidades de día y las residencias. De ese modo se van haciendo como dos grandes áreas que son servicio a la comunidad, servicio control de accesos, jardinería... -Hay una cuestión que puede ser paradójica y es que cuando el resto de los ciudadanos reciben prestaciones laborales o profesionales de una persona con discapacidad, parece que lo agradece, que lo ve bien, pero a la hora de darles empleo ya no es lo mismo. -Es que eso requiere un esfuerzo extra. No es que no haya voluntad, sino que hay desconocimiento de que ese esfuerzo extra no es un gasto, es una inversión y que después se retornaría en un resultado eficiente. Entonces, nosotros, ¿por qué lo hemos hecho? Porque hemos invertido en esos grupos de apoyo que tienen personalizados todos los trabajadores, desde que entran aquí. O sea, dependiendo de las necesidades que tenga cada trabajador, se le personaliza la atención y todo lo que requiera su puesto de trabajo, de forma que pueda desempeñarlo en igualdad de condiciones con cualquier otra persona. Esos apoyos serán duraderos o puntuales, pero eso hace que la persona al final sea igualmente eficiente que cualquier otra. En eso es lo en lo que hay que invertir, en eso en lo que el mercado ordinario a lo mejor ni sabe ni está preparado. -¿Cuáles son entonces los retos que se plantea de cara a este nuevo mandato? -Uno de nuestros grandes retos es que en este grupo empresarial, en un contexto económico muy inestable, tenemos que ser eficientes y sostenibles en el tiempo. Para eso tenemos que retener al talento y atraer nuevo talento. Se tiene la idea de que el tejido asociativo paga poco con respecto al mercado. Y nosotros competimos en igualdad de condiciones. Estamos preparándonos, de hecho ya hemos hecho políticas retributivas equiparadas al mercado, de forma que competimos en igualdad de condiciones. Si los trabajadores en nuestra estructura mercantil cobran igual que en cualquier empresa ordinaria, en igualdad de condiciones, les aseguro que no se quieren ir de aquí. Sara Rodríguez, presidenta de Fepamic: "Somos una de las cinco empresas que más empleo generan en Córdoba" -Últimamente, vemos que el vocabulario ha ido evolucionando en cuanto a la manera de nombrar a las personas que ustedes atienden. Ahora se dice personas con discapacidad. Pero ¿ha llegado esa misma sensibilidad a la sociedad? -Ha ido evolucionando. No podemos negar que ha habido un gran avance. Hace poco me decían los compañeros que parece que la discapacidad está de moda, porque no paramos de tener incidencia política, pero yo no sé hasta qué punto se queda solamente en una voluntad y no se plasma. Yo creo que lo que se plasma y se ejecuta es por entidades como la nuestra. Y cuando ya lo ven en resultados, en que facturamos una cantidad importante, en que somos una de las cinco empresas que más empleo generan en Córdoba, entonces es cuando conseguimos que verdaderamente la sociedad empiece a vernos de otra manera. Yo también entiendo que es la única manera de hacerlo visible. Sería un ejemplo total de integración que se dejará de ver como organización benéfica y empezar a verse como una parte más del tejido empresarial de la ciudad. Es que lo somos. Nosotros creamos empleo. Hacemos 1,8 contratos al día. Eso es una barbaridad. Somos referentes en creación de empleo, en formación de las personas con discapacidad y, sobre todo, que hay muchas personas que vienen porque quieren aprender de esa diversificación que tenemos nosotros de servicios. Porque es verdad que esto es una escuela de negocios. Nos estamos adaptando constantemente. Estamos en un proceso de transformación digital que es supermotivador, que va a suponer un gran valor añadido para el grupo Fepamic. -Como el colectivo es tan amplio, siempre habrá unos perfiles con más dificultad de integración laboral y social. ¿Cómo se puede combatir eso? ¿Cómo se puede trabajar para que esa igualdad sea lo más real posible? Nosotros, en Fepamic estamos aprendiendo y estamos instaurando nuevos métodos de empleabilidad. Tenemos muchas personas en nuestra bolsa que nunca consiguen una oportunidad. Entonces, por ejemplo, en nuestra residencia, que tenemos ahí más de 130 trabajadores, que atienden a 100 personas, los cuidadores suelen ir de uno en uno. Pues hemos pensado que para conseguir una oportunidad para esas personas que nunca la tienen, la figura de cuidador vaya de dos en dos. De forma que es un tándem que se complementa. De forma que uno tendrá a lo mejor más independencia en la toma de decisiones, y el otro tendrá más independencia en el apoyo físico. Así hemos empezado, llevamos como unos 11 meses con ese proyecto y ocho personas con discapacidad intelectual ya tienen un contrato. Tres de ellos, en 6 meses, fueron indefinidos. Suscríbete para seguir leyendo
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