22/06/2025 16:44
22/06/2025 16:43
22/06/2025 16:42
22/06/2025 16:42
22/06/2025 16:41
22/06/2025 16:41
22/06/2025 16:41
22/06/2025 16:39
22/06/2025 16:39
22/06/2025 16:36
Parana » El Once Digital
Fecha: 22/06/2025 10:30
El papa León XIV condenó este domingo el bombardeo de Estados Unidos sobre Irán y llamó a detener la escalada del conflicto entre Irán e Israel. Durante su mensaje tras el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro, el pontífice advirtió que la guerra puede transformarse en una “vorágine irreparable” y pidió a los líderes del mundo que asuman su “responsabilidad moral”. “Cada miembro de la comunidad internacional tiene una responsabilidad moral: detener la tragedia de la guerra antes de que se convierta en una vorágine irreparable”, expresó desde la ventana del Palacio Apostólico ante miles de fieles reunidos en el Vaticano. León XIV lamentó las “noticias alarmantes” provenientes de Medio Oriente, especialmente las que involucran a Irán, país atacado por Estados Unidos en la noche del sábado. “Este escenario dramático que incluye a Israel y Palestina amenaza con dejar en el olvido el sufrimiento cotidiano de la población, especialmente en Gaza y otros territorios, donde la urgencia de un adecuado apoyo humanitario se hace cada vez más urgente”, señaló. “El mundo grita e invoca la paz. Ese grito reclama responsabilidad y razón y no debe ser sofocado por el fragor de las armas ni por palabras retóricas que incitan al conflicto”, insistió el líder de la Iglesia Católica. El papa, de nacionalidad estadounidense, remarcó que “no existen conflictos lejanos cuando la dignidad humana está en juego” y sostuvo que “la guerra no resuelve los problemas sino que los amplifica”. Asimismo, alertó que los conflictos armados “dejan heridas profundas en la historia de los pueblos que tardan generaciones en cicatrizar”. “Ninguna victoria armada podrá compensar el dolor de las madres, el miedo de los niños, el futuro robado. Que la diplomacia haga callar las armas, que las naciones tracen su futuro con obras de paz, no con violencia ni conflictos sangrientos”, concluyó el mensaje papal.
Ver noticia original