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Concordia » Despertar Entrerriano
Fecha: 21/06/2025 06:42
Carlos Rodríguez Puente, uno de los pocos jurados del interior y el único concordiense en los Premios Gardel, compartió con Despertar Entrerriano su mirada sobre la edición 2025. Con más de diez años de experiencia en el rol, reflexionó sobre la evolución de los galardones, la responsabilidad del voto y los mensajes políticos que cruzaron la ceremonia. La música argentina celebró una nueva edición de los Premios Gardel y, como cada año, miles de artistas y oyentes siguieron la ceremonia con atención. Pero detrás de cada estatuilla entregada, hay un trabajo silencioso, técnico y comprometido. Desde Concordia, Carlos Rodríguez Puente lleva más de una década siendo parte de ese engranaje: es jurado de los Gardel desde el año 2015 y, según él mismo contó a Despertar Entrerriano, uno de los pocos representantes de Entre Ríos y el único concordiense en ese rol. “Me invitan a participar como jurado por la Mesopotamia argentina, representando a Entre Ríos, Misiones y Corrientes. En ese momento fue una iniciativa de federalización que tomó CAPIF, la cámara argentina del disco, para que no todo quede concentrado en Buenos Aires”, recordó Rodríguez Puente. La propuesta llegó de la mano de la reconocida gestora cultural Jorgela Argañarás y desde entonces su participación ha sido ininterrumpida. Sobre la metodología, explicó que “la tarea del jurado es de mucha responsabilidad, de mucho laburo”. Cada jurado accede a una plataforma virtual donde se cargan todas las postulaciones: no solo discos, sino también videoclips y películas musicales. “Con tiempos pactados, uno tiene que ver, escuchar y emitir el voto de manera comprometida”, detalló. Consultado sobre cómo vivió la ceremonia de este 18 de junio, Rodríguez Puente reconoció que si bien no pudo seguirla completa, destacó algunos aspectos salientes: “Pensé que iba a haber una edición más política, pero fue bastante sobria. Se notó el discurso de Teresa Parodi, una mujer siempre comprometida con los derechos humanos y la cultura, que llamó la atención sobre el vaciamiento de las áreas culturales por parte del Gobierno Nacional”. También mencionó el mensaje de Lali Espósito: “Sin echar demasiada leña al fuego, fue concreta: dijo que nadie se salva solo y que las soluciones son colectivas”. En cuanto al aspecto estrictamente musical, consideró que fue una premiación justa. “Ca7riel y Paco Amoroso, que se llevaron el Gardel de Oro, hoy son artistas globales. Donde se presentan, llenan. Vinieron solo para la ceremonia y ya están de vuelta en Europa para continuar su gira mundial”, relató. A diez años de su incorporación como jurado, Rodríguez Puente valora el rol como una enorme responsabilidad y también un privilegio: “Uno representa a una región. Es fundamental que las voces del interior también estén en estos espacios donde se decide qué se valora y cómo se premia en la música argentina”. Fuente: Despertar Entrerriano
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