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Parana » Informe Digital
Fecha: 13/06/2025 08:21
Israel llevó a cabo un ataque a primera hora del viernes contra las instalaciones nucleares de Irán, lo que genera preocupaciones sobre un posible conflicto regional en Medio Oriente. Aquí un resumen de cómo se intensificaron las tensiones en las últimas semanas antes de estos ataques matutinos: Primeros indicios: En mayo, Estados Unidos recibió nueva información de inteligencia indicando que Israel se estaba preparando para atacar instalaciones nucleares en Irán, incluso mientras el presidente Donald Trump buscaba un acuerdo diplomático con Teherán, según varios funcionarios estadounidenses con conocimiento de la situación. El miércoles: Estados Unidos decidió retirar a gran parte del personal no esencial y a sus familias de diversas ubicaciones en Medio Oriente. Aunque las autoridades no especificaron la razón exacta detrás de esta medida, un funcionario del Departamento de Defensa comentó que el Comando Central de Estados Unidos estaba monitorizando el aumento de tensiones en la región. Trump mencionó que la retirada se debía a que “podría ser un lugar peligroso, y veremos qué sucede”. El jueves: El organismo de control nuclear de la ONU aprobó una resolución que establecía que Irán había incumplido sus obligaciones de no proliferación nuclear. En respuesta, Teherán anunció la puesta en marcha de un nuevo centro de enriquecimiento de uranio, advirtiendo que no tenía “otra opción que responder”. El uranio, cuando es altamente enriquecido, puede ser utilizado para fabricar bombas, aunque Irán sostiene que su programa nuclear tiene fines pacíficos. Ese mismo jueves, Trump afirmó que un ataque israelí contra Irán “podría ocurrir”, advirtiendo de un posible “conflicto masivo” en Medio Oriente “pronto”. El viernes: Israel llevó a cabo su ataque, que alcanzó múltiples objetivos en Irán, centrándose en el programa nuclear y las capacidades de misiles de largo alcance, según fuentes militares israelíes. “No se trata de un ataque de un solo día”, señaló una fuente militar a CNN. Este fin de semana: Irán y Estados Unidos tenían pautadas conversaciones sobre el programa nuclear iraní el domingo en Omán, una de las tantas rondas negociadoras. Se desconoce cuál será el destino de esas pláticas ahora. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que completaron un “ataque a gran escala” contra sistemas de defensa aérea en Irán, indicando que decenas de radares y lanzadores de misiles tierra-aire fueron destruidos. Utilizaron un total de 200 aviones en estos ataques sin precedentes. Medios de comunicación estatales iraníes reportaron un nuevo ataque israelí en la ciudad de Tabriz, mostrando columnas de humo que se elevaban tras las explosiones. La agencia de noticias Fars declaró que varios lugares en la provincia de Azerbaiyán Oriental fueron blanco de los ataques. Desde febrero, agencias de inteligencia estadounidenses habían advertido sobre la probabilidad de que Israel intentara atacar instalaciones claves del programa nuclear iraní. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, había defendido repetidamente la opción militar para frenar dicho programa. Recientes informes de inteligencia señalan que Israel busca aprovechar la destrucción ocasionada por ataques a instalaciones de producción de misiles y defensas aéreas en octubre, y que también persigue un cambio de régimen en Irán, considerado como una amenaza existencial para Israel. A lo largo de los años, Israel ha sostenido que es el país que más podría perder si Irán, que no reconoce su derecho a existir, desarrolla una bomba nuclear. Ambos países han estado involucrados en una guerra en la sombra, apoyando a grupos armados que han entrado en conflicto directo, como Hezbollah y Hamas. Las tensiones se intensificaron tras el inicio de la guerra en Gaza, lo que llevó a un incremento de ataques por parte de grupos respaldados por Irán en solidaridad con los palestinos. Situación interna en Israel: Netanyahu enfrenta un desafío político nacional, con la oposición a un nuevo proyecto de ley de reclutamiento militar. El Parlamento israelí, la Knesset, ha discutido la posibilidad de disolverse, lo que podría llevar a elecciones anticipadas, donde se vislumbra que Netanyahu podría perder. Por qué ahora: El organismo de control nuclear de la ONU alertó que Irán incumple sus obligaciones de no proliferación. Teherán respondió intensificando sus actividades nucleares. La planta de enriquecimiento de uranio en Natanz, a 240 kilómetros de Teherán, resultó dañada en el ataque, aunque no se reportaron niveles elevados de radiación. La agencia de control nuclear de la ONU confirmó que otras instalaciones no resultaron afectadas. En el contexto global, China ha expresado su preocupación por las “graves consecuencias” del ataque israelí, instando a todas las partes a buscar la paz y evitar la escalada del conflicto. Reacciones internacionales: Pese a la histórica adversidad entre ambos países, China ha sido un importante apoyo económico y diplomático para Irán, criticando las sanciones de Estados Unidos y mediando en acercamientos con otros países de la región. Los mercados mundiales del petróleo han experimentado incrementos diarios significativos, con temores de que un conflicto más amplio pueda interrumpir el suministro energético. El petróleo Brent subió un 4,3 %, mientras el West Texas Intermediate lo hizo en un 5 %, alcanzando niveles cercanos a los máximos de 2022. En respuesta a la situación, Israel ha intensificado sus medidas de seguridad y la defensa ante posibles represalias iraníes, que han comenzado a manifestarse. Acontecimientos posteriores: Los ataques israelíes mataron a altos comandantes militares iraníes y llevaron a Teherán a lanzar drones hacia el territorio israelí. Estados Unidos ha reiterado que no participó en la operación israelí, mientras las alarmas sobre el posible desenlace de la situación crecen. Irán ha solicitado una reunión de emergencia en la ONU, mientras la comunidad internacional reitera su preocupación por la escalada de conflictos en el Medio Oriente. Varias aerolíneas importantes han suspendido vuelos a la región, y los precios del petróleo continúan fluctuando ante la incertidumbre generada por la situación.
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