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Parana » Ahora
Fecha: 31/05/2025 20:54
Un hecho preocupante se registró en el Puesto de Control Vial Nogoyá durante un procedimiento de rutina. Un conductor fue detenido por efectivos de la Dirección General de Prevención y Seguridad Vial. Fue luego de que su examen de alcoholemia arrojara un resultado superior a 3.0 gramos por litro de alcohol en sangre, cifra que no solo excede ampliamente el límite permitido, sino que también representa un récord alarmante en la zona. Según supo AHORA, la medición fue de tal magnitud que superó el límite de medición del alcoholímetro. El hombre demorado en Nogoyá superó al conductor de Paraná que registró el sábado 4 de enero de este año 2,95 gramos de alcohol en sangre durante un control en calle Celia Torrá y Cesario de Quirós. Anteriormente, el máximo nivel nacional de alcoholemia lo tenía un conductor en Santa Lucía, en el Gran San Juan, que había registrado 2,85 gramos. Reincidente y peligroso El vehículo, un Peugeot Expert, era conducido por un hombre mayor de edad oriundo de Lucas González, quien no solo circulaba con niveles peligrosos de alcohol, sino que además tenía su licencia inhabilitada para conducir. De acuerdo con registros oficiales, la prohibición estaba vigente desde el 8 de noviembre de 2024 hasta el 8 de noviembre de 2025, evidenciando una reincidencia grave en el incumplimiento de normas de tránsito. Ante esta situación, se procedió a labrar las actas de infracción, retener la licencia de conducir y secuestrar el vehículo. Según se contó a AHORA, el conductor tiene severos problemas de alcoholismo y, a pesar de la prohibición que le aplican, sigue manejando. Desde el área de Prevención Vial de la Policía reiteraron la importancia de la Ley N° 10.460, conocida como “Alcoholemia Cero”, cuyo propósito es prevenir accidentes de tránsito derivados del consumo de alcohol al volante. La normativa prohíbe cualquier nivel de alcohol en sangre para quienes conducen dentro del territorio de Entre Ríos, reforzando así el compromiso con la seguridad vial. Expertos en seguridad vial advierten que una concentración de más de 3.0 g/l de alcohol en sangre puede afectar severamente la capacidad de reacción, el juicio y la coordinación, convirtiendo a la persona en un riesgo tanto para sí misma como para los demás. La Policía realiza miles de test por semana de alcoholemia en las rutas y detecta en promedio una docena de conductores alcoholizados al frente de vehículos.
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