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Fecha: 22/05/2025 21:50
El Gobierno de Donald Trump le quitó a la Universidad de Harvard el derecho a inscribir a estudiantes extranjeros, por lo que sus 6800 estudiantes extranjeros deberán transferirse a otras escuelas o abandonar el país, según informó AP. "Con efecto inmediato, se revoca la certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio (SEVIS) de la Universidad de Harvard", escribió la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, en una carta dirigida al presidente de Harvard, Alan Garber. SEVIS es un sistema que permite a los estudiantes extranjeros estudiar en Estados Unidos. En el último curso académico, casi 6800 estudiantes eran extranjeros, el 27,2% del total de los alumnos de Harvard, según la página web ShunStudents. "Harvard tuvo muchas oportunidades de hacer lo correcto. Se negó. Han perdido su certificación del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio como resultado de su incumplimiento de la ley. Que esto sirva de advertencia a todas las universidades e instituciones académicas del país", publicó Noem en la red social X. "La consecuencia es que Harvard ya no puede inscribir a estudiantes extranjeros y los estudiantes extranjeros existentes deben transferirse o perder su estatus legal", señaló un comunicado. Noem acusó a Harvard de "fomentar la violencia, el antisemitismo y coordinarse con el Partido Comunista Chino en su campus". El Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (DHS) envió inicialmente a Harvard una carta el 16 de abril en la cual pedía que la casa de estudios proporcionara información sobre las actividades de los estudiantes internacionales en el campus, incluida la participación en protestas. La universidad, según The Harvard Crimson, presentó parcialmente los registros disciplinarios de los estudiantes internacionales que solicitó la Casa Blanca. El Gobierno estadounidense realiza una cruzada contra las universidades del país a las que acusa de permitir el antisemitismo en los campus, debido a las manifestaciones propalestinas del año pasado. Además, busca terminar con los programas de diversidad que buscan abordar la marginación de las minorías. La semana pasada, la Casa Blanca anunció un nuevo recorte de 450 millones de dólares en subvenciones federales que se suman a otros 2.200 millones anunciados antes. "Para las universidades es un privilegio, no un derecho, matricular a estudiantes extranjeros y beneficiarse de sus elevados pagos de matrícula para ayudar a engrosar sus multimillonarias dotaciones", manifestó Noem. Por su parte, Trump calificó recientemente a Harvard como una "institución de extrema izquierda y antisemita", un "desastre progresista" y una "amenaza para la democracia". Notas Relacionadas
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