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Parana » ER 24
Fecha: 20/05/2025 21:44
BETO BAHL EL CANDIDATO DE LOS CONTRATOS TRUCHOS Durante más de una década, Entre Ríos fue saqueada por una maquinaria perfectamente aceitada de corrupción legislativa. El escándalo de los “contratos truchos” —el desfalco más grande de la historia democrática entrerriana— desvió más de 53 millones de dólares en contrataciones fantasmas entre 2008 y 2018. Y aunque muchos intenten correr la vista, hay nombres que no se pueden borrar de ese engranaje. Uno de ellos es Adán Humberto “Beto” Bahl. Bahl fue ministro de Gobierno de Urribarri, vicegobernador de Bordet y jefe político en la Legislatura cuando los contratos se multiplicaban como hongos. Fue contador del Tribunal de Cuentas, conocía cada norma, cada trámite, cada firma. No solo estaba en la cocina: era quien preparaba el menú.Aunque nunca fue imputado, su sombra aparece en cada rincón de la causa. La Justicia —lenta y ciega por conveniencia— nunca quiso tocarlo. Pero periodistas como Daniel Enz lo dejaron claro: buena parte del dinero robado pasó por estructuras cercanas a Bahl. Cuando estalló el escándalo, se deshizo de algunos colaboradores como Gustavo Pérez, pero la podredumbre ya estaba instalada. Humberto Bahl usó la Legislatura como un feudo personal. No solo contrató directamente a imputados como Nicolás Beber, sino que colocó a sus tres hijos, a su esposa y hasta a su suegro en cargos públicos con sueldos elevados. El mismo Nicolás Beber, según consta en pruebas que se intentaron ocultar —incluyendo la investigación iniciada por Aramberry—, manejaba los ingresos y egresos de la Cámara junto a Andrea Zoff, quien luego sería viceintendenta de Paraná y hoy es diputada provincial. Bahl no armó un equipo de gobierno: armó un negocio familiar. Convertido en el candidato de los contratos truchos, representa lo peor del modelo entrerriano: impunidad, nepotismo y saqueo institucional. Hoy, mientras hay 32 imputados esperando juicio y más de 800 contratos anulados por el propio gobierno de Frigerio, Bahl quiere reinventarse como “el senador de la unidad”. La unidad del saqueo, del silencio, del encubrimiento. La unidad de los que fundieron la provincia y ahora se postulan para salvarla.En una provincia donde miles de entrerrianos no llegan a fin de mes, los responsables de este saqueo todavía se pavonean en actos, cortan cintas y reparten cargos. Bahl es uno de ellos. No hay renovación posible si quienes deben rendir cuentas siguen aspirando a fueros. ¿Contrato social o contrato trucho? Que la memoria no sea tan frágil como la justicia.
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