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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 20/05/2025 10:52
Detenciones por el ataque al colectivo Una suboficial de la Policía de Santa Fe, de 21 años, fue detenida este lunes por la tarde mientras visitaba a su pareja: un recluso de la cárcel de Piñero -con el que tiene un bebé de cinco meses. El detenido está imputado por haber participado en la organización de un ataque a tiros a un colectivo, ocurrido el 5 de septiembre pasado en la zona sur de Rosario, indicaron fuentes del caso a Infobae. Se trata de Luna María R., que cumple funciones en el Centro de Monitoreo de la Central de Emergencias 911, donde actualmente está de licencia por maternidad. La mujer está sospechada de haberle mandado datos sobre las cámaras de videovigilancia a su novio Kevin Alfredo Ramos, cuando estaba en libertad, para cometer delitos. El arresto realizado por la División de Asuntos Internos había sido solicitado por el fiscal Ramiro González Raggio, que tiene a su cargo la investigación por la balacera contra una unidad de la línea 146 bandera roja del transporte urbano de pasajeros. El hecho ocurrió en Grandoli y Spiro, en el barrio Tablada, cuando un sicario disparó sin mediar palabra contra el micro, que quedó con cinco orificios de arma de fuego. Por ese atentado fue aprehendido un Ángel M., un adolescente de 16 años apodado “Soretito” que sigue preso por decisión de la Justicia de Menores por estar señalado de haber sido quien jaló el gatillo por 50 mil pesos. Por ese legajo, el Ministerio Público de la Acusación imputó al narco Carlos Jesús “Pelo Duro” Fernández como el presunto instigador, quien dio la orden según la teoría del caso desde el penal de Coronda, donde cumple condenas por narcotráfico, balaceras y por formar parte de la banda de René “Brujo” Ungaro. Los otros acusados por el ataque al colectivo fueron Damaris Betania “Pochi” Fernández, Kevin Ramos y Brandon Moreyra, considerados partícipes. En el caso de Ramos, habría sido quien suministró la pistola a su primo, Ángel M. para que realice la balacera. De acuerdo a la orden que recibió, el menor filmó los tiros y luego envió el video como una suerte de “certificado” del trabajo hecho para poder cobrarlo. Por avances en pericias telefónicas de los involucrados, el fiscal González Raggio detectó que antes del atentado Ramos recibió de parte de su novia Luna María R. datos sobre el funcionamiento de las cámaras de videovigilancia, donde ella trabaja. Se presume, para que pueda cometer distintos delitos.
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