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» Comercio y Justicia
Fecha: 15/05/2025 08:25
La decisión fue tomada por la Unidad Procesal N° 11 de Cipolletti, que consideró el interés superior del adolescente ante la inacción del progenitor. La autorización se extenderá hasta que el joven cumpla la mayoría de edad, evitando futuros trámites judiciales. La Unidad Procesal N° 11 de Cipolletti autorizó a una madre a salir del país con su hijo adolescente rumbo a Chile sin necesidad de contar con el consentimiento del padre. La decisión judicial se basó en el interés superior del niño y en la falta de respuesta del progenitor ante los pedidos de autorización. La mujer había solicitado el permiso para vacacionar, visitar a familiares y realizar compras en el país vecino, motivada también por la diferencia de precios. Sin embargo, el padre del adolescente nunca respondió a las notificaciones y, según lo relatado por la madre, se negó sistemáticamente a firmar cualquier autorización para viajes al extranjero. En su resolución, la jueza Gabriela Lapuente consideró que la autorización solicitada “redundará en beneficio del interés familiar del niño, evitando que la madre deba recurrir al auxilio judicial cada vez que necesite salir del país con su hijo”. Destacó, además, que el objetivo del viaje está vinculado al tiempo compartido, el descanso y la recreación familiar. La madre explicó que su hijo vive con ella desde hace más de diez años y que no mantiene vínculo alguno con su padre, quien tampoco realiza aportes económicos ni participa en su crianza. Por ello, solicitó que la autorización para salir del país se extienda hasta que el joven alcance la mayoría de edad, a fin de evitar tener que iniciar nuevos trámites judiciales cada vez que desee viajar. “Cada vez que quiere visitar a su familia en Chile, debe iniciar un proceso individual, con el costo y el tiempo que ello implica, además de la dificultad de localizar al progenitor”, señaló la mujer. La jueza Lapuente evaluó especialmente los derechos del niño al descanso, al esparcimiento, al juego y a participar plenamente en la vida cultural y familiar, según lo establece la normativa vigente en materia de infancia. También tuvo en cuenta el dictamen favorable de la defensora de menores y la actitud del padre, que no solo se mostró ausente en este expediente, sino también en los intentos previos de resolución mediante instancias de mediación. “Teniendo en cuenta la conducta asumida por el demandado y la falta de oposición fundada, no encuentro motivo para denegar la autorización solicitada”, concluyó la magistrada, quien finalmente otorgó el permiso para que la madre pueda viajar con su hijo sin necesidad de nueva autorización hasta que el menor cumpla los 18 años.
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