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  • Memoria Frágil: José Guillermo Bonaparte, ese gran hombre olvidado

    Parana » AnalisisDigital

    Fecha: 30/03/2025 10:33

    De ANÁLISIS En el programa de televisión Memoria Frágil (Canal 9, Litoral todos los sábados a partir de las 20:30 y también por YouTube -www.youtube.com/@memoriafragiltv16), este sábado se abordó –a manera de reconocimiento- la personalidad del juez socialista José Guillermo Bonaparte; justamente para derrotar todo posible olvido. Los testimonios -por orden de aparición- de Luis Bruschtein (nieto y periodista), Rodolfo Parente (ex diputado nacional y provincial UCR), Jorge Riani (periodista y escritor), Lautaro Varisco (bisnieto), Juan Manuel Rossi (diputado provincial por el socialismo), Jorge Vilanova (historiador) y Gastón Buet (profesor e historiador), aportan sus recuerdos en algunos casos, sus perspectivas en otros y todos coinciden en la valoración de un hombre cabal, íntegro, con valores y que nunca se doblegó ante el poder ni tampoco sucumbió cuando él ejerció trascendentes cargos públicos como el de ser presidente del Superior Tribunal de Justicia. José Guillermo Bonaparte, ese gran hombre olvidado El abogado paranaense José Guillermo Bonaparte fue símbolo de lucha compromiso y ética en la historia reciente de Entre Ríos. Nacido en 1894 en Paraná, con estudios de Derecho en Santa Fe, fue fiscal, juez de primera instancia y luego vocal del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia e incluso presidente del alto cuerpo. Cuando llegó el general Juan Domingo Perón a la presidencia en 1943 optó por renunciar, pese a que estaba cerca de jubilarse. Sufrió la cárcel tanto en Paraná como en Devoto, pero nunca traicionó sus ideas socialistas. Luis Bruschtein, nieto y periodista “Hablar de mi abuelo -ahora que tengo 75 años-, me resulta simpático, pero al mismo tiempo también difícil, ¿no? Porque, bueno, no solamente por la memoria, sino porque el tiempo cambió tanto que algunas cosas parecen fuera de contexto. Yo con la edad, este, desde chico de los 16 años, milité en el peronismo, o sea que tenía una diferencia ideológica grande con el abuelo. El abuelo murió cuando yo tenía once o doce años. Sin embargo, creo que, a pesar de esas diferencias ideológicas o esas diferencias políticas, la imagen que tengo de mi abuelo es la de un tipo absolutamente coherente, absolutamente honesto con su pensamiento, honesto en su vida, en su forma de vivir. Un hombre austero, riguroso con lo que hacía. Mi madre le tenía una admiración enorme, y a pesar de que mi madre en su rebeldía como hija, también, militó en el peronismo después, ¿no? En realidad, fuimos de los dos únicos de la familia que militamos en el peronismo. Mi madre tenía una admiración total. El abuelo estaba en la Corte Suprema de Justicia cuando fue el golpe del GOU (Grupo de Oficiales Unidos o Grupo Obra de Unificación)”. Rodolfo Parente, ex diputado nacional y provincial UCR “Guillermo Bonaparte fue un hombre, que tuvo un apego real a la justicia, tanto que fue Presidente del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos desde 1929 a 1938; que era una época gloriosa para la Justicia de Entre Ríos, que ojalá se hubiese repetido por los años, hasta el golpe palaciego de 1943, que en Entre Ríos derrocó al Dr. Enrique Miguel Mihura, que asumió el Ejército en la conducción del país. El Dr. Bonaparte renunció o solicitó, yo no lo sé muy claro, pero dejó de ser Presidente del Superior Tribunal de Justicia y se dedicó al ejercicio profesional y a alguna actividad vinculada con los libros y demás. En ese período, el peronismo, el primer y segundo peronismo, por la cuarta sufrió cárcel, fue detenido en varias oportunidades, en algunas oportunidades y estuvo varios meses detenido. Fue perseguido concretamente en ese período. A mí, en lo personal, me impactó la trayectoria de Bonaparte, no solamente su apego a los principios republicanos, cuando dejó la presidencia del Superior Tribunal y dejó el Superior Tribunal. Y bueno, luego su carrera profesional como abogado, que fue muy buena, muy brillante”. Jorge Riani, periodista y escritor “Guillermo Bonaparte es uno de los nombres con los que uno se encuentra, sea transitando una calle que lleva su nombre, sea viendo una placa… uno cuando va por Tribunales, en lo que fue la Plaza Mansilla, o lo que es la nueva Plaza Mansilla, ve un busto y encuentra ahí el nombre de Guillermo Bonaparte. Entonces, empieza a preguntar. Pero, también, a mí que me ha dado, digamos, he indagado en la historia, también he encontrado a Guillermo Bonaparte como un, digamos, actor central de una Argentina, fundamentalmente de una Paraná o de una Entre Ríos, muy polarizada entre peronismo y antiperonismo, fundamentalmente. Él era un juez socialista que prestó servicios en Concordia -oriundo de Paraná él-. Ahí en Concordia nace su hija. Y me parece importante también decir quién era la hija, porque si bien uno cuando se refiere a alguien busca referenciarse en su antepasado como para poder conceptualizarlo, me parece que, tratándose del padre de Laura Bonaparte… hablar de Laura Bonaparte también un poco es hablar de su padre, de Guillermo. Estamos hablando de una mujer que ha sido calificada, estaba leyendo una nota del genial periodista Carlos Ulanovsky que dice de ella, algo así como valiente madre de Plaza de Mayo, de la Línea Fundadora, militante, mujer bellísima y apreciada flor de Paraná. Esa era Laura Bonaparte. Laura Bonaparte ya era conocida mucho tiempo antes de su militancia, post dictadura militar o durante la dictadura militar, es una militante muy importante en términos internacionales también para que sea reconocido como delito de lesa humanidad la desaparición forzada de personas. Ella tenía tres hijos desaparecidos, dos yernos, y su compañero también desaparecido. Y esto habla de un carácter”. Lautaro Varisco, bisnieto “Mi bisabuelo nació casi en el siglo XIX, podría decirse, ¿no? A finales del siglo XIX. Y él hacía la segunda generación de abogados en la familia. Vinculado políticamente con López Jordán en su momento. Él estudia en la Universidad ´Provincial´ de Santa Fe. Lo cierto es que el sistema universitario argentino en esa época solamente tenía dos universidades nacionales: la Universidad Nacional de Córdoba y la Universidad Nacional de Buenos Aires. Y en 1918 ocurre la reforma universitaria, fundamentalmente el reclamo de los estudiantes de darle un fin a la universidad que fuera mayor al del servicio de las profesiones liberales, que fuera un fin de cultura abierta, un fin científico, no solamente profesional. Y eso requería una serie de cambios en las universidades bastante importantes, desde la libertad de clase de la perspectiva a la autonomía universitaria en esa perspectiva. En esta época el Poder Ejecutivo inclusive designaba a los rectores de las universidades. Y mi bisabuelo, junto a su hermano, fueron protagonistas en la Universidad de Santa Fe de la reforma universitaria del ´18. Y junto a Pablo Villau y otros actores en ese momento, fundaron la Universidad Nacional del Litoral”. Guillermo Bonaparte -como todos le decían- fue padre de varios hijos: entre ellos, Laura Bonaparte, la recordada expresidenta de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora. A todos les hizo practicar deportes y en especial natación en el Rowing Club hasta donde iba con ellos todas las semanas para cruzar a nado hasta la isla. Pero, en especial les inculcó crecer con ideales firmes y comprometidos. Juan Manuel Rossi, diputado provincial por el socialismo “De muy joven en el ambiente universitario en Santa Fe, época de la reforma universitaria, 1918, debates muy agitados en el ambiente estudiantil, es un centro de estudiante, por supuesto, de la reforma del 1918, el socialismo siempre acompañó esas luchas con sus diputados nacionales, todo su partido. Después vuelve a Paraná, fue compromiso militante en función de su labor en el Poder Judicial, se mengua, renuncia a la afiliación del partido, pero una vez que lo expulsan, que él renuncia, en verdad en el 43 no la aceptan, la renuncia, lo desplazan con el golpe de Estado, lo renuncian, pero lo, ¿cómo sería?, lo dejan, no la aceptan, la renuncian, lo desplazan, él sí, ahí se aumenta su compromiso militante en el Partido Socialista. Es toda una generación de gente muy comprometida, gente muy honesta, modesta, viviendo de manera muy sencilla, habiendo ocupado cargos muy altos en el Poder Judicial en ese caso Él fue candidato a gobernador, candidato a convencional constituyente, candidato a diputado nacional, a diputado provincial, incluso candidato a vicepresidente en la década de 50, gente sin cálculos electorales, había un compromiso, había una convicción muy profunda de participar, en épocas, en tiempos muy difíciles para el Partido Socialista y también para una parte importante de la sociedad. Siempre con su compromiso militante y siempre usó el Derecho, su carrera para defender a los más justos, a los más humildes, a la gente más necesitada, también, por supuesto, la militancia socialista y ejerció el periodismo. Fueron como sus tres tribunas los lugares donde hizo sus aportes en diferentes momentos de su vida”. Jorge Vilanova, historiador “Bonaparte, detenido y liberado por el gobierno militar del año `43, retoma la actividad partidaria, se vuelca al periodismo, consigue nuevos enemigos dice una semblanza que se va a seguir por ahí a través de la prensa. Va a ser candidato a gobernador en el año ´51. Bueno, las elecciones que le dan la reelección a la mayoría a Perón. En esa elección es elegido el gobernador Felipe (Alfredo) Texier, un docente que venía de ser rector del Colegio del Uruguay en Concepción. Y tiene un puñado de votos. La verdad es que no tiene mayor trascendencia política. Pero es lo que estaba pasando con el socialismo a nivel nacional. Un partido que tuvo, que supo ser referencia, pero luego de la experiencia peronista en el poder había prácticamente desaparecido en la escena política. Más allá de algunos nombres importantes. Luego la elección va a ser detenido. Y también ahí vemos un paralelismo con el gobierno nacional, donde el gobierno nacional de Perón hostiga a los opositores y algunos socialistas son detenidos, como pasó con Alfredo Palacio, con Ferreyra y otros nombres. Y en esta línea sucede lo mismo en la provincia, con buena parte detenidos. También esto le genera una suerte de prestigio. Convengamos que para los socialistas del país y también de la provincia, en el caso particular de Bonaparte, caracterizaban al gobierno peronista como una dictadura. Más allá de la diferencia que podemos tener con esta característica, es comprensible que en ese momento ellos lo hicieran así. Acertaba o equivocadamente era la posición que ellos tenían. Por lo tanto, entre las filas de la oposición, eso le generaba un prestigio. Además del estoicismo de personal de Bonaparte, de aceptar todo tipo de prerrogativa o de amnistía con consideraciones especiales dentro de la cárcel. Se va a exigir su detención por peso propio. En un momento lo van a librar porque ya no tiene sentido el hecho de detenerlo. Y bueno, en ese contexto él va a lanzar ya y va a incrementar su prestigio dentro de la fila socialista. Y por ahí va a ir su camino”. Gastón Buet, profesor e historiador “Yo pienso que la imagen de Guillermo Bonaparte no es rescatada como debería hacerlo, ¿no? Es decir, pero pasa con muchos hombres de la historia argentina, digamos, por lo general hace más ruido el deshonesto que el honesto, pero la la figura de Guillermo Brown como juez y como hombre de ley debería recordarse como un hombre probo de honestidad intelectual, de valores éticos, morales, ideológica, que nunca contradijo. Inclusive cuando él rechaza ser nombrado o avalar este gobierno dictatorial, tiene que irse de la provincia, se le prohíbe entrar. Cuando asume la presidencia Perón, por ejemplo, él tiene muchos desencuentros con el peronismo y el peronismo termina encarcelándolo. Y dentro de la cárcel mucha gente, digamos, quieren pagar fianza. Él dice que no hay que pagar fianza porque él defiende y proclama que él no es culpable de nada, solamente de pensar libremente. Entonces, no considera que haya que pagar fianza porque sería darles razones a sus captores. Cuando finalmente alguien dice, según la biografía, alguien desconocido paga esa fianza, Él no pide disculpas porque él considera que le hacen una amnistía y él tampoco y él rechaza amnistía, porque él no tenía que haber sido preso, digamos. Es una persona de convicciones fuertes, pese a todo, no claudicaba en sus en sus convicciones. Y finalmente, él debe renunciar, nunca más puede recuperar cuando hay un gobierno legal, le ofrece nunca más le ofrecen ser parte del magistrado, nunca puede lograr la jubilación, salvo los últimos años. Entonces, es una persona que por convicciones propias la pasó mal, la pasó bien, pero nunca claudicó en sus en sus intenciones”. Guillermo Bonaparte sufrió mucho la embestida del poder de turno. Después de padecer la cárcel le hicieron varios procesos judiciales; le cancelaron la matrícula de abogado para no dejarlo trabajar; le impidieron ejercer en la provincia varias veces. Pero, siempre se mantuvo con valores éticos muy altos y una gran honestidad intelectual. Luis Bruschtein, nieto y periodista “Él renuncia a la corte y le cambia la vida en todo en ese momento: de tener una casa muy linda que estaba sobre la barranca, pasaron a vivir a la casa que fue después la casa de familiar de ellos, que era una casa mucho más modesta. Y él trabajaba haciendo colaboraciones periodísticas. Pero, eso lo pinta de cuerpo entero, ¿no? Quisiera que hubiera más jueces que sean capaces de renunciar por una cuestión de principios cuando se generan estas situaciones que en el país son tan comunes. Y en ese sentido, yo creo que sí, que la figura del abuelo tiene una importancia en lo que es el universo de la justicia, este, importante, Porque ese gesto yo creo que es un gesto que enaltece a la carrera judicial, ¿no? Concebida como la concebía él. Cuando Perón ganó las elecciones en el cuarenta y cinco, echa al interventor nazi y le ofrecen al abuelo volver a la corte. Pero el abuelo ya, en ese momento, estaba en la oposición al peronismo con todo el Partido Socialista, y no quiso. Eso también es un ejemplo, porque él podría haber aceptado, y haber actuado políticamente sin ningún… Pero bueno, por una cuestión de principios, el abuelo tampoco quiso aceptar la oferta que le hace Perón en ese momento cuando echa al interventor nazi, que era más de la facción de los hermanos Ramírez”. “Creo también, y eso por las historias que contaba mi madre, el abuelo crea una cárcel modelo, yo creo que en eso tenía una visión muy avanzada de la justicia y de una cárcel modelo donde los presos podían trabajar, tenían las puertas abiertas, y donde a leer y escribir a los presos, ¿no? Yo creo que ahí se forjó un poco el carácter de mi madre. Ella siempre tuvo retratos del padre hasta el final de sus días también, ¿no? Y las anécdotas del abuelo como un personaje, yo me acuerdo que siempre nos decían que el abuelo se levantaba cuando salía el sol, sea invierno-verano, y se daba una ducha con agua helada, agua fría. Cosa que a mí me sorprendía y me llamaba la atención. Pero, bueno, también era deportista, jugaba la pelota vasca en el Rowing con la mano, ¿no? Y era un personaje así muy conocido en el club, en el Rowing Club”. Lautaro Varisco, bisnieto “Él comienza a ejercer y poco tiempo después ingresa como fiscal en el Poder Judicial de Entre Ríos. Tiene una actividad primero como fiscal y luego como juez de su primer año bastante prolífica. Él llega a ser un protagonista también de la creación de la Unidad Penal Modelo y en ese momento también fue un gran protagonista de la creación del Poder Judicial de Entre Ríos. Parece que como no había el Poder Judicial de Entre Ríos, por supuesto que sí. Para comprender la inserción en el marco del Poder Judicial de Entre Ríos, es interesante saber que Entre Ríos en realidad fue la provincia modelo del país”. Jorge Riani, periodista y escritor “La anécdota que yo recogí para mi libro ´El Imperio del Quijote´ que cuenta la historia de El Diario, es una de cuando en esa Paraná o en esa Argentina, digamos, polarizada, peronismo… pero más aún, más que peronismo, protoperonismo, o diría más lo que fue el golpe del `43, viene a romper un estado político itinerante. Y en el caso de la ciudad de Paraná, antes de que aparezca el peronismo, digámoslo, había un interventor que se llamaba Carlos María Zavalla, que era un nazi. Cuando uno dice un nazi, era efectivamente un nazi. Un nazi que se caracterizó por echar a todos los docentes judíos de la provincia de Entre Ríos, por encarcelarlos. Y en toda esa movida, pasado el tiempo, Guillermo Bonaparte fue detenido y fue llevado a la Unidad Penal número 1, aquí en Paraná. Uno de los compañeros de celda -el compañero de celda-, era nada más y nada menos que el hombre fuerte de la ciudad en ese momento, dueño de El Diario Arturo Julio Etchevehere. La anécdota que me contaba su hijo, recientemente fallecido, “Arturito”, que le conocemos como “Arturito”, es que se contaba en las familias el carácter que tenía Bonaparte. Hay un episodio donde desafiaba a las autoridades carcelarias y si bien no le quitaban el cuerpo, pagaban con su propio presidio la militancia, como el caso de Etchevehere, Uranga y muchos otros… Sebastián Vázquez, en fin… En el caso de Bonaparte se desafiaba y era un rebelde adentro de la reja. Entonces dice que Arturo Etchevehere decía: ´Mire doctor, no los provoque porque algún día tenemos que irnos de acá´. Bueno, eso era Guillermo Bonaparte. Me parece que ese carácter, él era un juez socialista, ¿no es cierto? Se transmite un poco también a su hija, de la que conocemos mucho gracias a su militancia. Así que bueno, Guillermo forma parte de la consideración de esos tantos nombres aquí en la provincia de Entre Ríos, con los que uno se encuentra y que siempre está encontrando una anécdota más. Esta me parece que lo pinta también de cuerpo entero”. Rodolfo Parente, ex diputado nacional y provincial UCR “Bonaparte ha influido en la historia de Entre Ríos respecto a su conducta republicana, a su apego al ejercicio democrático y su incompatibilidad con el autoritarismo y el ejercicio de la justicia. De ahí que la relación, por la parte, con el Poder Judicial se caracteriza por haber dejado su Superior Tribunal en ocasiones de haber sido o dejado de ser miembro del Superior Tribunal. Él militó activamente en el Partido Socialista de Entre Ríos, una figura importante dentro del Partido Socialista, y las cualidades de Bonaparte, yo creo que son sus cualidades éticas y morales, su conocimiento del Derecho, su conducta republicana, que debería haber sido seguida con los años, porque no ocuparon cargo en la justicia, pero siguieron ese comportamiento con las intervenciones que hubo en el proceso constitucional. Sí, es necesario referenciar que su ida al Superior Tribunal generó un libro que se llamó ´Un país sin justicia´, que se editó en el año 1956, donde justamente se refirió a lo que significó esos años de sin justicia, en todo el período dictatorial que motivó la renuncia o la ida de Bonaparte a la justicia”. Guillermo Bonaparte era un gran admirador del líder socialista Alfredo Palacios. Eso lo llevó a ser un activo militante del socialismo pese a que su padre había sido un conocido dirigente radical enfrentado al peronismo que lo llevó a la cárcel en el ´43. Cuando se produjo la revolución libertadora Bonaparte rechazó el ofrecimiento inicial del gobierno militar de ser parte nuevamente miembro del Superior Tribunal de Justicia. Gastón Buet, profesor e historiador “Guillermo va a ser toda su vida un activista del Partido Socialista, admirador de (Alfredo) Palacios, entre otros. Pese a que su familia era de cuna radical, él va a optar por el socialismo y toda la vida va a estar dentro de las filas del socialismo. Inclusive, él mismo va a ver con buenos ojos y valorando que los hombres que lo nombran dentro de como juez en el Tribunal superior pertenecen al partido radical y al partido conservador. Sin embargo, hay una honestidad intelectual de parte de esos hombres que ven en este socialista un hombre probo, un hombre honesto y un hombre que puede impartir justicia con magnanimidad. Entonces, eso habla bien, no solamente de él, sino de los hombres de su época en cuanto a los conservadores y los radicales, que a pesar de que él era un socialista, eso no fue obstáculo para que lo nombren como primario de la Corte”. Luis Bruschtein, nieto y periodista “Y el abuelo exigía a los hijos que supieran nadar, que aprendieran a nadar. Entonces, eran seis hermanos, e iban los seis con el abuelo al río y se echaban al río los seis con el abuelo. Uno de ellos iba en un bote, remaba delante de ellos, y los otros iban nadando hasta la isla que está enfrente de Paraná. O sea, cruzaban el río nadando, ¿no? Y es en todo el mundo sabe que el Paraná es un río difícil para nadar, ¿no? Con sus remansos, con su corriente muy fuerte. Ella siempre tuvo esa relación con el río, y también una relación con la lectura. Yo, así de los recuerdos que tengo del abuelo, los últimos años él estaba muy enfermo. En esa época, enfermó del corazón, No tenía las opciones que tiene ahora, hacía que tenía que estar en reposo todo el tiempo, los últimos dos o tres años. Y los nietos, la abuela ´Gordita´ un poco administraba las visitas que le podíamos hacerle al abuelo que estaba haciendo reposo. Éramos varios nietos, éramos cada uno de los hijos de los abuelos, o sea, de los hermanos de mi madre, tenían hijos. Nosotros éramos cuatro, los hijos de ´Muñeca´ eran dos, los hijos de ´Chiquita´ había tenido un solo hijo, Guillermo tuvo dos hijos, este, mami tuvo tres. Bueno, éramos una banda cuando nos juntábamos en Paraná. Estaba esa mesa redonda que había en el comedor, y donde cada uno de él tenía su lugar. Pero, sobre todo, tenía lugar el abuelo, y los chicos teníamos una mesita aparte. Comíamos aparte, y siempre la ilusión era que a medida que uno iba creciendo, iba a tener lugar en la mesa de los adultos. Y en esa mesa, nadie se sentaba hasta que no se sentaba el abuelo. Estaban todos así, un poco se paraban, estaban parados alrededor, llegaba el abuelo y después se sentaban todos. A mí era una costumbre que me llamaba la atención, porque él era el abuelo, era socialista, pero también fue cadete. Pero, bueno, era como una especie de patriarca de un clan, ¿no? Este, donde se hablaba de actualidad, donde se hablaba de la vida. O sea, siempre desde un lugar de mucho respeto y del deber ser en un sentido social, en un sentido civilizatorio, o sea, del buen vecino, del buen estudiante, del buen trabajo. Siempre un poco esa era la conversación y la idea del abuelo”. Lautaro Varisco, bisnieto “¿Y cómo se veía mi abuelo a sí mismo? Se veía como esos grandes intelectuales, esos grandes referentes institucionales de la época, probablemente. No sé exactamente, pero imagino que así es. ¿Por qué? Porque en esa época el Derecho no era el ejercicio de una técnica legislativa. Era el ejercicio de la construcción de instituciones. Hoy cuando uno ve a un abogado lo que piensa es, esta persona está de leyes laborales, está de leyes civiles. No imagina que en realidad era una profesión que se imaginó, que se pensó como lo más similar a la ingeniería social de la época. La noción de que las leyes escritas, debido a que eran producto de un consenso social, transformaban a la subjetividad”. Juan Manuel Rossi, diputado provincial por el socialismo “Renuncia en el 43, le faltaba muy poco para jubilarse, ya llevaba casi 25 años en la carrera del Poder Judicial y él renuncia, faltaba muy poquito tiempo, él podría haber seguido, eso digamos es hipotético, él podría haber seguido, podría haber tenido una jubilación toda su vida, una muy buena jubilación… él era presidente del Superior Tribunal cuando fue, nada más y nada menos, la autoridad más alta del Poder Judicial. Después, tuvo arrestos, estuvo preso en Paraná, estuvo preso en Devoto, en Buenos Aires, lo enloquecieron con procesos judiciales, se los abrieron, impidieron volver a la provincia más de una vez. Le cortaron la matrícula, o sea, le cancelaron la matrícula, no pudo ejercer como abogado: Terminó vendiendo seguros, una persona con una formación, con una carrera, quiero decir, vivió un momento muy difícil y así todo, siempre mantuvo sus convicciones y bueno, una ética en el manejo de la cosa pública, como decía, y también una posición ante la vida, también es muy contundente su testamento, está ahí a disposición, es muy hermoso para poder leerlo, y me parece que está buenísimo que se lo pueda reivindicar”. Bonaparte no quiso aceptar su regreso al Superior Tribunal de Justicia. Pero, los acuerdos de socialistas para integrar la Junta Consultiva Nacional como los casos de Federico Gioldi, Alicia Moreau de Justo, el mismo Alfredo Palacios que pasó a ser embajador en Uruguay; hicieron que accediera a presidir la Comisión Investigadora sobre los crímenes -supuestos crímenes- y desfalco del gobierno peronista entre 1946 y 1955: Fue en ese tiempo en que Bonaparte escribió su conocido libro “Un país sin justicia” prorrogado por Alicia Moreau de Justo; donde relata su período de detención en el año ´43. Lautaro Varisco, bisnieto “Y tuvo vocación democrática y liberal también. Al punto que, bueno, cuando fue el golpe de 43, un golpe militar, lo fueron a buscar al gobernador Miura, Enrique Miura. Él se dirigió a la oficina del gobernador para defenderlo. Y bueno, lo sacaron de ahí, lo detuvieron. Y estuvo muy nervioso. Estaba tan enojado, mi bisabuelo, que le mandó la renuncia al Superior Tribunal. Y el Superior Tribunal, que en ese momento estaba constituido lógicamente por adictos al golpe de 43, no le aceptó la renuncia y lo echó. Cuando a ellos faltaban como seis meses para jubilarse, digamos. Y ahí le aparece un derrotero muy duro realmente, porque él empieza a ejercer como abogado la profesión. Y era realmente caminar en el desierto. Porque es difícil contratar de abogado a alguien que todo el mundo sabe que está de patadas con el lugar que le tiene que recibir sus declaraciones. Tuvo un período, de verdad, de mucha pobreza. Una persona que había tenido, quizás, la escala más alta del Poder Judicial. Y hubo amigos que le dejaban dinero cuando lo visitaban. Era así de fuerte la situación. Y al punto que las frustraciones de él fueron a ser tan grandes, porque realmente le ponían trampas de todo tipo. Llegaron a una opinión de él, con una sentencia, la convirtieron en un desacato. En esa época el desacato era un delito penal. Y lo detuvieron 15 días en la cárcel. Y lo que él decía constantemente, él presentaba recusación tras recusación. Recusación es el mecanismo con el que se quiere el desplazamiento de un juez en una causa por tener un interés comprometido. Y las rechazaban a todas. Y yo no puedo dejar de pensar en la similitud que hubo en este proceso histórico con lo que ha ocurrido recientemente con la fiscal Adjunta, con Cecilia Goyeneche. Porque ocurrió exactamente lo mismo. El mismo instituto, el de las recusaciones y excusaciones con el que ella trató de dejar en evidencia la parcialidad del tribunal que se había constituido. Fue con ese mismo instituto, fue con el rechazo a ese instituto, con el rechazo al interés o a la recesión de ella a través de esa institución judicial que lograron eventualmente destituirlas. Es decir, nunca analizaron seriamente las recusaciones y excusaciones que ella hizo. De hecho, lo dice la sentencia”. Luis Bruschtein, nieto y periodista “Yo, bueno, de grande, por supuesto, que disentía mucho con las posiciones políticas, que en otras circunstancias en las que yo crecí, que fueron distintas a las que él tuvo que vivir… este… bueno, a mí se me hacía poco… no entendía por qué había sido tan importante participar en la Convención Constituyente que derogó la Constitución del 49, que era una constitución modernísima, social, democrática. Fue un acto de barbarie, ¿no? Este, la abolición de la Constitución del 49. Pero, bueno, cuando todo eso pasaba yo era muy chico. Supongo que, de haber sido más grande, hubiera discutido con él, y él hubiera aceptado la discusión. Era un tipo abierto, porque mi madre, este, siempre era muy rebelde, y ella me contaba que en una época cuando él dejó de ser de estar en la corte y dejó la carrera judicial, ella se tuvo que poner a trabajar y trabajaba como vendedora en Gatti Chávez, ahí en Paraná. Y participó en toda la movida de la reglamentación de la Ley de la Silla, que había sido sancionada en la década del ´30, pero no había sido reglamentada hasta mucho después. Después lo terminó reglamentando luego Perón, después de muchas luchas gremiales, en las que mi madre, como trabajaba como vendedora en Gatti Chávez, participó muy activamente, incluso la metieron presa alguna vez, y mi abuelo la iba a sacar. Y en ese en ese lugar había como un lugar de complicidad, creo yo, en el sentido que al abuelo ese rol de ser la oveja negra, de ser la rebelde de parte de mi madre, a él le gustaba, a él lo le parecía bien…”. Jorge Vilanova, historiador “En ese contexto, lo que encontramos hace un tiempito y lo reflejamos en un libro, fue que una interpelación al gobernador peronista depuesto, Felipe Texier, donde la garantía de Texier fue justamente la figura de Bonaparte con su ecuanimidad y con su honestidad, más allá de las cuestiones políticas, una persona que le garantizaba a cualquier, a Texier, a los investigados de aquel momento, una cuestión de justicia. Si bien la actividad de la Comisión se limitaba simplemente a la investigación, luego las penas o las consecuencias las determinaría otra instancia que ya no estaba Bonaparte. Bonaparte en ese período escribe este libro: ´Un país sin justicia´, donde relata su período de detención en el año ´43. El libro está prolongado por Alicia Moreau de Justo, que habla de la responsabilidad y de la ética de Bonaparte. Pero, que también marca dónde se lo ubica a Bonaparte en el contexto partidario nacional: la figura reconocida. Hay una fuerte vinculación entre Alicia Moreau y Bonaparte. Una línea ahí que luego es lo que va a terminar siendo la ruptura del socialismo del `78, el Partido Socialista Argentino, Palacios, Alicia Moreau y Bonaparte va a estar en esa línea que luego, también, va a ser reivindicado por el otro sector del Partido Socialista Democrático”. Gastón Buet, profesor e historiador “Respecto a cómo reacciona él con la Revolución del 43, bueno, lo hace nuevamente de acuerdo a sus convicciones. Él mismo dice cuando era habitual en esa época que pasaba muchas veces, pasó en el treinta, pasa en el en otras revoluciones, que la Justicia terminaba avalando y legalizando gobiernos inconstitucionales, ¿no? Los golpes de Estado. Y él renuncia cuando el gobierno de facto de Entre Ríos lo trata de absorber y trata, a través de la justicia, de legalizar esa dictadura, Guillermo renuncia diciendo justamente que él no puede avalar una dictadura legal, porque él lo que dice es algo tan simple y sencillo, como diciendo, yo he detenido gente por no cumplir la ley, ¿cómo yo voy a no cumplir la ley avalando a un gobierno que no cumple la ley? Y entonces, digamos, no hace falta tener el gran vuelo intelectual para el planteo que hace Guillermo Bonaparte, sino simplemente sentido común. Él renuncia antes que avalar un golpe a un gobierno inconstitucional”. Guillermo Bonaparte fue un hombre que tuvo un apego real a la justicia hasta el golpe palaciego de 1943 que Entre Ríos derrocó al doctor Enrique Miguel Miura. Bonaparte renunció y se dedicó al ejercicio profesional y al periodismo y siguió con su tarea ética peleando por más libertad y soportando el autoritarismo que lo llevó a la cárcel en varias instancias y lo mantuvo numerosos meses detenido. Jorge Riani, periodista y escritor “En realidad, yo creo que Entre Ríos en general, pero Paraná en particular, olvida a mucha gente. Yo valoro y celebro programas como éste, que sacan a superficies cosas que por ahí merecen ser conocidas, por distintos motivos. Siempre el conocimiento es orientador y conocer a las personas también lo es. También es cierto que hay que entenderlo en el contexto, ¿no es cierto? El peronismo tuvo su trayectoria en el país, pero no hay que detenerse solamente en esa Argentina bipolar, ¿no es cierto? O polarizada, mejor dicho. Bipolar en el sentido de que eran dos polos muy irreconciliables, ¿no es cierto? Pero, yo creo que Bonaparte es un nombre del que no sabemos mucho y con el que nos encontramos cada vez que leemos historia. Historia moderna, podríamos decir, ¿no es cierto? Lo que es el siglo pasado. Es conocido en los ámbitos jurídicos y las personas más grandes. Pero, había una renovación poblacional y me parece que hay que refrescar tanto su nombre como el de muchas otras personas. O sea, contestando diría que no tiene el reconocimiento y el conocimiento que por ahí merece alguien que ocupó, por ejemplo, la presidencia del Superior Tribunal de Justicia”. Rodolfo Parente, ex diputado nacional y provincial UCR “La descendencia del doctor Bonaparte tuvo algunos episodios que es digno mencionar. Tengo referencia de dos hijas del doctor Bonaparte: una es Laura Bonaparte, conocida y luchadora por los Derechos Humanos, formó parte de las Abuelas de Plaza de Mayo, y además fue fundadora de la organización de Madres de Plaza de Mayo, hasta sus divisiones quedándose en el grupo de la Fundadora. ¿Por qué estuvo en ese grupo? Porque sufrió la desaparición de dos de sus hijos, dos de sus nueras y su marido. Y el personal tuvo la oportunidad de colaborar cuando el doctor Alfonsín envió al Congreso el proyecto sobre los datos genéticos y la creación del Banco de Datos Genéticos y recibí la visita de la señora Laura Bonaparte y la señora Estela de Carlotto. Con Laura Bonaparte hicimos mención a la relación que había entre nuestros padres y además con su hermana, la señora Bonaparte de Varisco, con la cual tuve una relación más cercana porque ellos trabajaban en un comercio importante en la ciudad de Paraná. Y fue madre del doctor Varisco Bonaparte, lamentablemente fallecido, que fue un funcionario del Poder Judicial de Entre Ríos, de la Judicial Federal, y que además dio clases de Derecho Internacional Público en la Universidad del Litoral. Por fin, tengo que decir que el doctor Guillermo Bonaparte fue uno de los miembros que oficiaron la creación de la Universidad Nacional del Litoral. Y en el Acta Fundacional de la Universidad del Litoral, está su nombre y su firma, con lo cual lo acredita también con su virtud vinculada a la reforma universitaria y a lo mejor del principio en que damos la creación de esta universidad. Bueno, y pues todo lo que podemos decir o lo que no podemos decir de una figura tan importante y he hecho honor a la provincia que su busto todavía se conserve en frente del edificio de tribunales, como mirándolo, como observándolo y como vigilando que las cosas sean como se deben hacer y no como a veces se hacen”. Luis Bruschtein, nieto y periodista “Mi madre se crió ella y los seis hermanos, o sea, mis tíos también, se criaron en ese contexto. Para mí fue extraño saber que él después se había dedicado mucho a trabajar en periodismo. Y después me enteré mucho más tarde que su padre también había trabajado en periodismo: Luis Bonaparte. Había fundado periódicos en Entre Ríos y después se había tenido que exiliar en Santa Fe, donde también había trabajado como periodista, cosa que yo no sabía. Yo empecé a trabajar como periodista sin saber esa parte de la historia familiar. Pero el abuelo sí, este, bueno, me escribía en el en El Diario de Paraná. La verdad, este, gran parte de los escritos de él, después se coleccionaron en un libro. Como la verdad yo tengo una perspectiva política diferente con relación a eso, no sabría, este, decir hasta qué punto esa esa faceta del abuelo tiene alguna influencia en la forma de hacer periodismo. Yo puedo decir que todo lo que hizo el abuelo lo hizo desde un lugar de honestidad material y de honestidad ideológica absoluta. Nunca no, era una especie de monje muy afable, que tenía buen carácter y, este, y era una persona agradable en el trato, y afectivo con los nietos. La que ponía más, este, ahí la distancias era la abuela. La abuela no nos dejaba a los nietos meternos en el estudio de del abuelo, que era sagrado, era como si fuera el altar de una Iglesia”. Don José Guillermo Bonaparte falleció joven: tenía 67 años cuando murió en Paraná en 1961. Su paso por la vida dejó una marca muy fuerte en sus hijos, en especial en Laura que siguió su lucha y peleó contra la tragedia de la dictadura que le asesinó tres hijos, dos yernos y una nuera, además, de su marido Santiago. Como así también en hermanos amigos compañeros de militancia en el socialismo y en la justicia entrerriana, aunque cuando se lo recuerda muchos prefieren mirar para otro lado y consideran que es mejor dejarlo así en el olvido más allá del monumento o alguna calle. Jorge Vilanova, historiador “A 60 años o más de la muerte de Guillermo Bonaparte, son nombres desconocido en las filas del socialismo entrerriano, olvidado. Pero, no es exclusivamente su nombre, es un problema endémico, digamos, de nuestras fuerzas políticas. En el caso del Partido Socialista, creo que se debe a la discontinuidad, a la ruptura, a los quiebres, a las separaciones que hubo, que en esas rupturas se van olvidando o se van dejando de lado ciertos nombres que tuvieron trascendencia en su momento dentro de las filas partidarias. En el caso de Bonaparte, es uno de ellos, pero, como ya digo, hay otros nombres, Carlos Alejo Rossi, Senebrinski, Fernández, Brizuela, Francisco Moreno, que han sido olvidados en la fila partidaria. Lamentablemente, porque deberían abrevarse en esas personas con por su conducta ética, por su conducta moral, para tomar lo mejor de ellos y traerlos hoy al presente y sostenerlo y tenerlos como bandera. Así como el socialismo reivindica figuras como Alicia Moreau de Justo, Alfredo Palacio, Juan B. de Justo, Guillermo Estévez Boero, Alfredo Bravo, en cada lugar, en cada provincia, en cada ciudad también los tuvo”. Jorge Riani, periodista y escritor “El hecho de que sea un juez que se lo vincule con el socialismo me parece que le aporta un plus a su carrera judicial. En general, los jueces tratan de mostrarse como insípidos en términos políticos. Pero, ser socialista en ese momento era una decisión. Recordemos que ser socialista también implicaba cierto prestigio toda vez que los representantes eran personas como Alfredo Palacios, que era un brillante orador, un personaje, una persona que estaba muy vinculada con Paraná. En ese sentido, yo no lo sé, pero estoy totalmente seguro que alguna vinculación directa y personal ha tenido con Guillermo Bonaparte”. Luis Bruschtein, nieto y periodista “Era un personaje… mi abuela le decía a mi abuelo, “El Querido”. Era “El Querido” para ella cada vez que hablaba del abuelo… la forma que le llamaba era así, lo cual en aquella época me parecía lo más normal del planeta. Y después, pensándolo a la distancia me pareció bastante gracioso. Creo que él tenía esa aureola de hombre activo, de hombre de acción, porque, bueno, él tomó después en el ´52, con su posición antiperonista, él tomó la Casa de Gobierno y lo metieron preso. Era un hombre respetado por los peronistas también, a pesar de sus posiciones ideológicas. Era un hombre que se había ganado el respeto de los peronistas, incluso de muchas de las personas que él tuvo que juzgar. Y en ese aspecto, yo creo que tiene una influencia, porque él creo que fue un adelantado, en el sentido de concebir una justicia verdaderamente independiente, de concebir una justicia que no fuera de castigo, que tuviera una función social. En ese sentido, creo que el aporte que tuvo el abuelo fue importantísimo en el ámbito judicial. Y así se ganó el respeto de las personas, Bueno, yo a veces le preguntaba a mi madre, y ella me contestaba con eso: ella me decía que el abuelo no era gorila, que no era peronista, pero que nunca tuvo una frase despreciativa o discriminatoria de los trabajadores o de los humildes, o de los sectores populares”. El programa Memoria Frágil: José Guillermo Bonaparte, ese gran hombre olvidado

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