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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 30/03/2025 04:37
Javier Milei, Donald Trump, Karina Milei, Gerardo Werthein, Luis Caputo y Mike Waltz -consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca- durante la cumbre de la CPAC, (Maryland, Estados Unidos) (Desde Washington, Estados Unidos) Desde que aterrizó en DC, Gerardo Werthein se encierra con su equipo en la embajada argentina en Dupont Circle para preparar las reuniones clave que protagonizará con Marco Rubio -secretario de Estado- y Jamieson Greer, representante de la Oficina Comercial de los Estados Unidos (USTR). Werthein dialoga con Rubio y ya se vieron en Washington, pero la cita del próximo martes será un momento importante para las relaciones bilaterales entre Argentina y Estados Unidos: ese día, el secretario de Estado podría comunicar al canciller cuándo Donald Trump recibirá a Javier Milei en la Casa Blanca. A fines de febrero, los presidentes de Argentina y Estados Unidos compartieron un encuentro en Maryland, y en esa oportunidad Trump invitó a Milei. Será la primera vez que un mandatario de América Latina ingrese al Salón Oval durante la actual administración republicana. “El presidente Trump se reunió con el presidente argentino Javier Milei en la CPAC, donde se trataron las innovadoras reformas económicas del presidente @JMilei y cómo nuestros países pueden trabajar más estrechamente juntos. El presidente Trump también invitó al presidente Milei a visitar la Casa Blanca en los próximos meses”, informó la administración republicana en su cuenta oficial de X, cuando el cónclave ya había concluido. Javier Milei y Donald Trump después el encuentro que compartieron en Maryland, (Estados Unidos) La reunión entre Milei y Trump podría suceder entre los últimos días de abril y las dos primeras semanas de mayo. Para ese época, el presidente argentino tendrá tres asuntos primordiales en su agenda bilateral: agradecer el apoyo en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), avanzar en la construcción política para cerrar un acuerdo comercial y plantear la situación causada por la decisión de Estados Unidos de imponer aranceles recíprocos a todas sus importaciones. Trump considera que el comercio internacional se aprovechó del mercado americano, y en el contexto de una guerra global con China, establecerá aranceles recíprocos a todos los productos que ingresen a los Estados Unidos. Esa decisión será anunciada el 2 de abril, y su impacto económico a priori es imposible de calcular. El líder republicano considera a Milei su aliado estratégico en América Latina, pero no tiene previsto hacer excepciones con los productos nacionales. Trump aplicará aranceles recíprocos a países con muchísima influencia en el sistema mundial de comercio -Japón, China, Alemania, México, Canadá y Brasil, por ejemplo-, y a continuación negociará vis a vis con cada presidente o primer ministro que aporte una solución alternativa. En el Caso Argentino, el impacto será fuerte. Estados Unidos ya aumentó los aranceles en el aluminio y el acero, la semana próxima añadirá un incremento para los productos agropecuarios, y para cerrar el círculo dispondrá los aranceles recíprocos. Esos niveles arancelarios atraviesan toda la economía nacional, acorde a un informe realizado por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en la Argentina (AmCham). Por ejemplo: 1. “En alimentos, Argentina grava la importación en un 16 por ciento, mientras que Estados Unidos tiene un arancel del 4,6 por ciento. 2. En químicos y productos industriales, Argentina cobra 8,1 por ciento y Estados Unidos impone un 0.3 por ciento. 3. En plásticos, el arancel local es de 11 por ciento frente al 1,4 por ciento del país norteamericano. 4. En textiles, la Argentina cobra la tarifa más alta, con 20, 9 por ciento, mientras que en EE.UU se aplica un 6,1 por ciento. 5. En metales, la tarifa local es de 13,7 por ciento y el impuesto estadounidense es de apenas el 0.2 por ciento”. Javier Milei, Gerardo Werthein y Luis Caputo durante la Cumbre de Presidentes del Mercosur, (Montevideo, Uruguay) Tras su encuentro con Rubio, Werthein mantendrá una reunión con Jamieson Greer, representante de la Oficina Comercial de los Estados Unidos (USTR). Greer conoce el comercio internacional, ha diseñado estrategias para contener la ofensiva global de China y es muy escuchado por Trump. Werthein llegará a la cita con Greer para empezar a discutir las bases de un acuerdo comercial con Estados Unidos. Será un primer paso, pero el objetivo es central para el gobierno libertario: relanzar el vínculo bilateral con la Casa Blanca. Esta premisa geopolítica tendrá que conciliar con el plan proteccionista que empuja el presidente de los Estados Unidos desde que asumió en enero. Entonces, la posible táctica del Gobierno para superar esta compleja coyuntura es que Trump haga pesar su alianza con Milei por encima de su decisión de aplicar urbe et orbi el concepto de aranceles recíprocos. Desde esta perspectiva, ya hay un antecedente. Trump excluyó de los aumentos de aranceles en los automóviles que se importan a Estados Unidos, las partes que se fabrican bajo el acuerdo firmado con Canadá y México. Entonces, sin importar el móvil -acuerdo geopolítico o tratado multilateral- Trump podría hacer una excepción sobre ciertos productos importados desde la Argentina. Javier Milei recibió a Marco Rubio en la Casa Rosada antes de su designación como secretario de Estado de Donald Trump Milei tiene excelente relación con Elon Musk, pero la vía más directa para tratar asuntos de Estado es con Marco Rubio. Milei recibió a Rubio en su despacho de la Casa Rosada, y tiempo después compartieron una gala presidencial tras la asunción de Trump. El trato es cordial y hay sintonía ideológica. En este contexto, las reuniones de Werthein con Rubio y Greer serán importantes para preparar el encuentro entre Milei y Trump. Ese día en la Casa Blanca habrá sonrisas mutuas y la posibilidad de capitalizar una cercanía geopolítica que pocos presidentes detentan alrededor del planeta.
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