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» Sin Mordaza
Fecha: 22/03/2025 09:10
Con 62 votos a favor y ninguno en contra, la Legislatura de la provincia destituyó ayer al fiscal Aldo Gerosa y le prohibió acercarse o participar de concursos en el MPA por diez años. Desde el principio fueron pocas las voces opositoras al fiscal, costó mucho, pero la votación fue contundente. El hecho, sin embargo, dejó mucho de qué hablar. En primer lugar, faltaron seis legisladores, entre ellos el senador Marcón, amigo y sostén de Gerosa. No bajó a votar aun estando en el recinto, lo que muestra que no estaba realmente convencido de la inocencia de su defendido, porque sino hubiese dado su único voto de apoyo. La pregunta que surge es por qué la política lo acompañó hasta acá. Muchos legisladores no tenían ni idea de las acusaciones que recaían sobre Gerosa. Se enteraron cuando se leyó el informe en la Cámara. Esto marca una falencia inicial: muchos diputados no están al tanto de lo que se discute en comisiones. Se suman las numerosas operaciones del radicalismo para que esto no suceda. En definitiva, fueron pocas las personas que entendieron desde un principio que no podía seguir en el cargo. Otro dato adicional es que a los legisladores del sur parece no importarles lo que pasa en el norte. Todos hablan del norte como algo problemático, sobre todo porque los abusos sexuales son más en General Obligado y Vera; como también el abigeato. Pero queda bien claro que la gente del sur no le importa lo que pasa en la justicia del norte. El testimonio de una de las víctimas fue clave. Muchos diputados detallaron que fue “desgarrador” escucharla. No se podía estar en contra de la ella. Pero este es uno de los casos, Gerosa tiene más ejemplos en su haber. En la comisión de acuerdo el día miércoles, hubo una reunión con el secretario de justicia Santiago Mascheroni, para que se designen tres nuevos fiscales en Reconquista, que sean más idóneos. El caso del ahora ex fiscal Aldo Gerosa tiene que servir de ejemplo. No sólo para no vuelva a suceder, para que ninguna persona se crea con el poder de hacer lo que quiera; sino sobre todo, para rediscutir el funcionamiento del sistema judicial en la provincia.
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