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» Radio Sudamericana
Fecha: 20/03/2025 12:23
Jueves 20 de Marzo de 2025 - Actualizada a las: 12:07hs. del 20-03-2025 PANDEMIA DEL COVID EN 2020 Julio Solís recordó en diálogo con Radio Sudamericana cómo fue el cerramiento del barrio a raíz de que su hija, una enfermera que trabajaba en Resistencia, contagió a varios integrantes de su familia mientras tomaban mate. Julio Solís recordó en diálogo con Radio Sudamericana cómo fue el cerramiento del barrio a raíz de que su hija, una enfermera que trabajaba en Resistencia, contagió a varios integrantes de su familia mientras tomaban mate. El 9 de abril de 2020, el barrio San Marcos de Corrientes se convirtió en el primer epicentro de confinamiento total en la provincia, marcando un precedente de lo que sería la pandemia en Argentina. Todo comenzó cuando Laura Solís, enfermera del hospital Perrando en Resistencia, Chaco, contrajo Covid-19 mientras prestaba servicio en la ciudad vecina. Su contagio se expandió rápidamente dentro de su familia, lo que obligó a las autoridades sanitarias a cerrar completamente la zona. Fue por esto que un fuerte operativo por parte del Comité provincial de Crisis y Seguimiento del Plan de Contingencia del Coronavirus, en conjunto con la policía, clausuró el acceso al barrio por las avenidas Maipú, La Paz, Patagonia y Nuestra Señora de la Asunción, dejando a más de 2.000 personas aisladas sin poder salir de sus hogares. En ese entonces, el gobernador, Gustavo Valdés, y el intendente, Eduardo Tassano, fueron notificados y decidieron que por dos semanas nadie podía entrar ni salir del barrio. La enfermera se desplazaba diariamente entre Resistencia y Corrientes en un remís especial, ya que el transporte público estaba suspendido. Sin embargo, un día al regresar a su hogar, compartió mate con su familia, y ese simple gesto se convirtió en el punto de inicio de la propagación. "La amistad de familia nos contagió a nosotros", contó su padre, Julio Solís, para Radio Sudamericana. Tras el positivo de Laura, las autoridades decidieron aislar a toda su familia—integrada por ocho personas—en su vivienda. Además, separaron a los infectados de los negativos dentro del barrio y organizaron la asistencia sanitaria para evitar nuevos contagios. "Los que estaban negativos atendían a los positivos", recordó Solís. El confinamiento en el San Marcos concluyó el 15 de abril luego de que el Gobierno provincial confirmara la liberación de la zona por 40 test negativos.
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