16/03/2025 03:08
16/03/2025 03:08
16/03/2025 03:07
16/03/2025 03:07
16/03/2025 03:07
16/03/2025 03:05
16/03/2025 03:04
16/03/2025 03:03
16/03/2025 03:02
16/03/2025 02:59
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 16/03/2025 00:34
En un análisis publicado en la revista Nature, se estimó que el aumento récord de las temperaturas oceánicas durante 2023-2024 fue un evento extremo (Imagen Ilustrativa Infobae) La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha postulado que gracias a su labor como mayor sumidero de carbono del planeta, el océano “absorbe el exceso de calor y energía liberado a causa de las emisiones de gases en aumento atrapadas en el sistema de la Tierra. En la actualidad, el océano ha absorbido alrededor del 90% del calor generado por unas emisiones al alza”. Para la ONU, “a medida que un exceso de calor y energía calientan el océano, el cambio en la temperatura lleva a unos efectos progresivos sin precedentes, que incluyen el deshielo de los polos, el aumento del nivel del mar, olas de calor marinas y acidificación del océano”. En ese tono, recientemente, un estudio reveló que el sorprendente salto en las temperaturas oceánicas de 2023 y 2024 estuvo al límite de las expectativas sobre el calentamiento global. Este evento fue tan inusitado que los científicos se cuestionaron si los modelos climáticos aún eran válidos para predecir los próximos años. Según los autores del trabajo, este aumento en las temperaturas habría sido “prácticamente imposible” sin la influencia del cambio climático. “Las temperaturas superficiales oceánicas globales estuvieron en niveles récord durante más de un año desde abril de 2023 en adelante, superando el récord anterior en 2015-2016 por 0,25 °C en promedio entre abril de 2023 y marzo de 2024. La extensión casi global y la intensidad sin precedentes de este evento suscitaron preguntas sobre cuán excepcional fue y si los modelos climáticos pueden representar tales saltos récord en las temperaturas superficiales del océano”, escribieron en la investigación, que fue publicada en la revista Nature. A pesar de que las temperaturas oceánicas han comenzado a descender, aún se mantienen cerca de los niveles récord, lo que podría indicar una mayor sensibilidad climática (Imagen Ilustrativa Infobae) El estudio estuvo a cargo de, entre otros, Jens Terhaar, investigador principal de la Universidad de Berna, Suiza. Según él, un evento de este tipo es muy raro: “Estimamos que esto ocurre aproximadamente cada 500 años con la tendencia actual de calentamiento. Si la tendencia al calentamiento aumenta, tales eventos ocurrirán con mayor frecuencia y si disminuye, ocurrirán con menor frecuencia”, planteó el especialista. El planeta ha experimentado un calentamiento constante en las últimas décadas, y el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero ha sido el principal motor de este fenómeno. Sin embargo, el inesperado aumento de las temperaturas en los océanos en los últimos dos años sobrepasó las proyecciones a largo plazo, lo que causó preocupación entre los expertos. Este fenómeno no solo es alarmante por la cifra alcanzada, sino también por sus implicaciones en los ecosistemas oceánicos. Las aguas más cálidas tienen efectos devastadores en el medio ambiente marino, como la intensificación de los ciclones tropicales, el blanqueo de los corales y la extinción masiva de especies marinas, entre otros, según los especialistas. El aumento extremo de las temperaturas oceánicas ha provocado la intensificación de fenómenos climáticos, como los ciclones tropicales y las olas de calor marinas (Imagen Ilustrativa Infobae) ¿La aceleración del calentamiento global? Este aumento extremo en las temperaturas ha generado debate sobre si el calentamiento global se está acelerando a un ritmo mayor al esperado. Los científicos, sin embargo, aseguran que no se trata de una aceleración inesperada. “Los científicos nunca creyeron que el calentamiento sería lineal, sino que se aceleraría a medida que aumentaran las emisiones”, explicó Terhaar. Es decir, el ritmo del calentamiento global podría seguir fluctuando, pero lo que sucedió en 2023 y 2024 no representa un cambio abrupto en la tendencia. El estudio también descartó que el aumento récord de las temperaturas oceánicas sea una señal de que el calentamiento global se haya intensificado más allá de las proyecciones iniciales. Si bien algunos factores adicionales, como las reducciones en la cobertura de nubes o una disminución en las partículas que reflejan calor, podrían estar contribuyendo, los científicos consideran que el calentamiento global sigue la trayectoria prevista en los modelos climáticos. “Utilizando 270 simulaciones de una amplia gama de modelos climáticos completamente acoplados, demostramos que estos modelos simulan con éxito estos saltos récord en las temperaturas superficiales del océano global, lo que refuerza su utilidad para comprender las características, los factores desencadenantes y las consecuencias de estos eventos. Estas simulaciones sugieren que el salto récord en las temperaturas superficiales del océano en 2023-2024 fue un evento extremo, tras el cual se espera que las temperaturas superficiales del océano vuelvan a la tendencia de calentamiento prevista a largo plazo”, escribieron en el trabajo. Las simulaciones de 270 modelos climáticos demuestran que los saltos récord en las temperaturas superficiales del océano, como los observados en 2023-2024, fueron un evento extremo, aunque los modelos pronostican que seguirán dentro de la tendencia de calentamiento global prevista (Imagen ilustrativa Infobae) Aunque las temperaturas oceánicas han comenzado a descender, se mantienen cerca de los niveles récord. Terhaar y sus colegas señalaron que es probable que las temperaturas regresen a los niveles de largo plazo antes de septiembre de este año. Sin embargo, si no es así, podría ser una señal de que la sensibilidad climática ha sido subestimada, lo que implicaría que el calentamiento futuro será más intenso de lo que se pensaba.
Ver noticia original