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Colon » El Entre Rios
Fecha: 12/03/2025 06:30
El nuevo juez de Garantías y Transición de Colón ya está en funciones. Es Jesús David Alexis Penayo Amaya. Acaba de mudarse a Colón y esta es su primera experiencia impartiendo justicia.En su despacho recibe a. Habla de sus expectativas, opina de las posibles reformas en el Código Penal y reconoce que la Justicia argentina está en deuda con la sociedad.-Tengo 43 años, soy papá de tres hijos de 12, 10 y 5 años. Con Eugenia estamos juntos hace 21 años y nos casamos hace 14.Nací en Concordia, donde me formé hasta el secundario. Me recibí de abogado en la ciudad de Santa Fe y me especialicé en Derecho Administrativo y en Defensa y Garantías. Además tengo que entregar la tesis de la especialización en Derecho Penal y estoy debiendo la tesis de Maestría en Monitoreo y Evaluación en Políticas Públicas.Soy docente universitario (UNER) y he sido profesor terciario hasta que licencié en Derechos Humanos, en el Profesorado de Nivel Inicial y Educación Primaria. Durante más de 10 años fui apoderado legal en una escuela de gestión privada del Obispado de Concordia. A la par, desde que me recibí ejercí como abogado, hasta hace cuatro años en que asumí como fiscal suplente en Concordia.-Muchas. La verdad es que me preparé mucho tiempo para este rol, pero hay un abismo entre la relación teórica y el ejercicio práctico, con lo cual lo estoy viendo como un desafío profesional todos los días, que me obliga a estudiar y preguntar. Muy contento, creo que podré estar a la altura de mi expectativa.-Sobre esto ya me explayé en la audiencia del Senado, que era el momento y el lugar donde tenía que explicar mi postura. Hoy estoy enfocado personal y profesionalmente en mirar hacia adelante en este nuevo desafío y en la construcción de vínculos.-Está identificado el autor del hecho, gracias a las cámaras de seguridad de un vecino y los rastros positivos que hay adentro de mi casa. Hasta donde sé está con prisión preventiva. Se recuperaron parte de las cosas, no la totalidad.Muy conforme con el trabajo de la Comisaría Tercera, Investigaciones, Criminalística y la Dra. (Julia) Rivoira que es la fiscal a cargo, ya que yo justo estaba de turno pero no podía intervenir por ser víctima.Fue algo lamentable por la pérdida económica, pero también por la situación que uno vive como víctima.-En la asunción en Concordia me acompañaron el presidente municipal de Colón (José Luis Walser) y el diputado provincial (Mauro Godein). Con el resto no he tenido contacto, pero por supuesto estoy a disposición.-No.-No lo conozco personalmente. A través de autoridades del Ministerio de Justicia y en la audiencia del Senado, le agradecí que me haya elegido para este cargo, pero nunca tuve contacto.-Con el jefe de Policía local hemos conversado por teléfono. Por cuestiones de agenda todavía no nos pudimos reunir.-He tomado conocimiento conversando con integrantes del Ministerio Público Fiscal sobre las causas y tuve oportunidad de ver las estadísticas del juzgado sobre los índices de delitos. No cuento con estudios de campo aquí en Colón, pero no soy ajeno a conocer que la mayor parte de la preocupación de la ciudadanía en Entre Ríos y en el país, está vinculada a los delitos contra la propiedad privada en general. También a los delitos de integridad sexual y a las cuestiones de género.-No voy a ser original al decir que hoy tenemos una deuda con la sociedad. La gente reclama, y con razón, actitudes concretas para demostrar el trabajo que estamos haciendo. Hay una imagen de la Justicia que hoy no es favorable y eso lo marcan los estudios de opinión pública. Esto nos obliga a una autocrítica permanente para ver cómo se puede mejorar.-Hay una cuestión vinculada a las resoluciones y en explicarlas. Ustedes nos van a escuchar decir que lo que hacemos es explicar la ley, y muchas veces escuchamos a los legisladores cuestionar cómo se instrumentan esas leyes. Ahí es donde hay que hacer el máximo esfuerzo de difundir lo que se hace y explicar las decisiones en un lenguaje llano y concreto, en lugar de encerrarnos en tecnicismos. Eso es acercar la Justicia al ciudadano.Lo otro importante es la difusión. En mi caso, la comunicación es una autocrítica como fiscal y espero mejorarla como juez, para que la gente sepa por qué se toman las decisiones.También el hecho de mostrarnos como un ciudadano más. Esta cuestión de aire monárquico que se tiene sobre los funcionarios judiciales, al que algunos quizá contribuyen, hay que desterrarlo. Sin que se pierda el respeto a la investidura, uno tiene que mostrarse como lo que es: un vecino más que ocupa un lugar de relevancia con el que debe ser coherente, pero que tiene que pagar sus impuestos y convivir con el resto de la sociedad.-Yo creo que la solución hoy por hoy no pasa por una cuestión de más leyes; creo que sobran en la Argentina. Tampoco por agravar las penas.Tenemos que lograr mayor celeridad, que es una de las críticas de la ciudadanía. Para esto muchas veces no alcanza con la buena voluntad de los funcionarios y trabajadores judiciales, sino que implica una cuestión de recursos. Cuando hay un contexto crítico viene a jugar la mirada política de privilegiar los recursos a otras áreas, que desde ya son importantes, como salud o educación. Lo que nosotros podemos hacer es ser eficientes, utilizando lo que tenemos al máximo y gestionar más recursos para poder dar respuestas rápidas a la ciudadanía.-Es importante entender que la regla es que una persona sometida a un proceso penal lo tiene que transitar en libertad; eso está en la ley. La excepción es la prisión preventiva, para lo que hay que acreditar que hay riesgo procesal de fuga o entorpecimiento. Como juez no puedo ir en contra de la ley.Cuando la excarcelación es en el marco de una ejecución de pena (alguien condenado) es una situación distinta, en la que se evalúan otros parámetros y no pasa por las manos de un juez de Garantías sino de un juez de Ejecución Penal.-Muchas causas penales no logran cerrarse por la conducta reiterativa de una persona. Por ejemplo, mientras una causa penal está esperando debate (que vaya a juicio oral) la persona tiene una causa en trámite y a su vez vuelve a cometer un hecho por el cual se encuentra en flagrancia; es decir tiene tres causas en trámite y a veces incluso con antecedentes penales, con lo cual la proyección de la pena es efectiva. En esos casos, esa conducta reiterativa termina entorpeciendo la finalización del proceso penal.Entiendo que termina siendo una herramienta válida. Está en estudio, hay que ver cuál es la redacción final, no quiero adelantar una opinión fina porque supongo que todavía no hay dictamen para ser votado.-En principio hay que poner blanco sobre negro en este tema. Los proyectos que hablan de bajar la edad de imputabilidad de los menores no dejan de mantener un sistema diferencial. Esto significa que no van a ir a la cárcel con los adultos, sino que tendrán un tratamiento diferencial como el que existe hoy.No tengo una opinión formada en cuanto a la edad, pero sí creo que es necesario que se discuta y que hechos graves como el que ha tomado estado público recientemente requieren una respuesta distinto al que actualmente prevé la normativa.-Sí, no solo la figura penal, sino la necesidad de la perspectiva de género en los operadores jurídicos. Lamentablemente, las estadísticas avalan la necesidad de sostener políticas de género. Incluso pienso que hay que profundizar esto, porque no alcanza solo con lo normativo, sino que es un cambio cultural que sobre todo debemos llevar adelante los hombres.-Yo creo que sí. No hay capacitación de la que hayamos participado sin aprender algo. Las actualizaciones que se hacen año a año son fundamentales, porque hay muchas cuestiones que uno no las visualizaba como cuestiones de género, pero que son tales, y eso es gracias a la capacitación.-Esto que decía antes de comunicar; no lo digo institucionalmente sino cada funcionario comunicar más y mejor. Y el factor tiempo: que los procesos sean más rápidos, sin perder el nivel de profesionalismo.-No tengo ninguna persona en particular a la que siga como modelo. En realidad el único modelo que tengo a la hora de tomar decisiones y manejarme en la vida, es un consejo que me daba mi papá cada vez que me despedía en la terminal de Concordia: que más allá de los títulos y de la cuestión económica, a él le gustaría que siempre digan de mí que soy una buena persona.Cada vez que tengo que tomar una decisión pienso en lo que mi viejo me pedía y en actuar como una buena persona. Creo que si logro eso, tengo aprobada la materia, así que ese es mi norte. Él falleció joven, a los 57 años, y siempre lo recuerdo porque es quien me enseñó por dónde ir, él es mi modelo a seguir.
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