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Parana » Ahora
Fecha: 20/02/2025 04:14
Sergio Decuyper es un sobreviviente de un abuso sexual de un sacerdote, que además era su tío. El aberrante hecho ocurrió en la casa de sus abuelos en Puigarri cuando él tenía 5 años. Recién en 2019, cuando tenía 41 años y tras varios años de tratamiento psicológico y psiquiátrico, pudo poner en palabras lo que padeció a manos de su tío, el cura José Francisco Decuyper, quien fue párroco de la iglesia Santa Ana, en Paraná; estuvo en General Ramírez y en Las Cuevas, Diamante. Al primero que se lo contó fue al papa Francisco, quien primero leyó su historia a través de una carta, luego lo llamó por teléfono y, por último, lo recibió en el Vaticano. El Sumo Pontífice le pidió que guardara silencio y que confiara en el arzobispo de Paraná Juan Alberto Puiggari. Por eso, tiempo después, lo denunció por encubrimiento. Ahora, a los 46 años y tras años de lucha y de concluir en el País Vasco, en España, la carrera jurídica de Relaciones Internacionales, se decidió a reclamar una reparación económica al Vaticano. Sergio nació en Paraná, pero vive en Europa hace más de dos décadas. En las últimas horas, habló con Canal 9 Litoral sobre su reclamo de reparación económica a la Santa Sede. “Yo he gastado casi todos mis ahorros económicos en recuperar mi salud mental. El Papa Francisco y Monseñor Puiggarí me dicen que mi tío está enfermo y que tiene Alzheimer. Claro, yo soy consciente de que eso es una realidad. Entonces yo, inmediatamente, cuando empecé a tener salud, les empecé a decir: ‘Entonces tenéis que ser vosotros, la institución que le ha dado cobijo a este pederasta, los que tenéis que reparar el daño’. Y estudiando todos estos años, yo he terminado la carrera jurídica de Relaciones Internacionales y he descubierto esta ley, una ley que hay en España, que explica muy bien y muy brevemente lo que es el derecho a la reparación. Y yo tengo derecho a que me repare la institución de la Iglesia Católica”, explicó. En ese sentido, afirmó que “directamente la Santa Sede me tiene que reparar el daño, me tiene que indemnizar” y añadió: “Mucha gente me ataca y me dice: ‘Pero usted quiere dinero, usted quiere destruir la Iglesia’. Yo digo: ‘No, no, no, yo quiero que me ayuden a recuperar mi salud mental’ y yo tengo que reinsertarme también a una vida laboral que no he podido llevar a cabo correctamente por culpa de este abuso”. Sergio tenía un sueño recurrente en el que tenía 5 años y llegaba hasta la puerta del baño de la casa de sus abuelos, en Puiggari, y ahí todo se desvanecía, hasta que un día de enero de 2019 se le desató el recuerdo con todos los detalles y fue devastador. El recuerdo fue del abuso que padeció. Su exesposa y madre de sus hijos es médica. Lo ayudó a transitar el camino. Sergio aseguró que el Vaticano le pide una sentencia judicial o civil, ya que la sentencia canónica no tiene validez. “En mi caso está prescrito el delito y entonces es muy difícil. Entonces yo les explico que con un informe de un psiquiatra y con un informe de un psicólogo, en mi caso y en los demás casos, se puede determinar de forma muy simple y sencilla si estamos mintiendo o no. Entienden que haciendo esta reparación están reconociendo un delito cometido por un miembro de la Iglesia Católica”. Documental Este año está previsto que vea la luz el documental titulado “Tres Cruces”, que aborda la historia de Sergio y de otros dos casos de abuso; uno de ellos es el de Alex, víctima del condenado sacerdote Juan Diego Escobar Gaviria. El documental, dirigido por Alejandro Rath, se estrenará en 2025. Antes de concluir la entrevista con Canal 9 Litoral, Sergio hace un llamado a las víctimas de abuso, instándolas a no rendirse y a buscar ayuda profesional, mencionando la falta de recursos económicos para terapia. También critica la falta de apoyo institucional, tanto de la iglesia como del gobierno, para ayudar a las víctimas y reparar el daño causado. Además, se siente atacado por aquellos que creen que su lucha busca destruir a la iglesia, lo que considera injusto.
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