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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 07/02/2025 00:30
La educación impulsa la transformación y construye nuevas realidades en tiempos de incertidumbre (Canva) De la incertidumbre surge la oportunidad de transformación, pero de la educación surgen las verdaderas riquezas de un pueblo, pensemos que, en el camino de lo supuestamente desconocido, podríamos encontrar el espacio para soñar en grande y construir nuevas realidades para salir del espacio inmersivo en el cual muchas veces nos encontramos varados. Los argentinos solemos transitar tantas eventualidades en nuestras vidas cotidianas, que pasamos de la oscuridad de la duda a la luz de la abundancia, donde cada paso nos acerca más a los anhelos más profundos, y que no son más que tener una vida tranquila, social, económica y políticamente estable. Después de acostumbrarnos a mil batallas y cambios de políticas de Estado, el futuro debería estar signado por la esperanza y el anhelo de cierta estabilidad económica y política, como señalamos. A medida que el país vaya enfrentando nuevos desafíos y los pueda sortear positivamente, la búsqueda de líderes representativos que promuevan el crecimiento sostenible y la equidad, será una nueva esperanza para todos. Si hay alguien que conoce de resiliencia y espíritu de lucha, es este pueblo, que sigue aspirando a un futuro en donde la estabilidad nos permita definitivamente el desarrollo pleno de nuestras capacidades. En este contexto, la participación activa y el compromiso cívico serán fundamentales para construir un destino de país más justo y próspero, en donde el valor de la educación será central para las generaciones venideras. Las libertades individuales son claves para el desarrollo de la Argentina, tanto nos costó esta democracia, tanto nos cuesta enfrentarnos a las opiniones divergentes, y tanto nos cuesta asumir que cada uno debe aportar al desarrollo y a la educación, que poder expresarnos libremente, y ejercer la libertad de pensamiento, son centrales para seguir avanzando. Si queremos de una vez por todas evolucionar como sociedad, tenemos que saber que la participación activa en la vida pública debe contener mucho respeto para garantizar que todos los argentinos se manifiesten como quieran, pacíficamente ya que la promoción y defensa de estas libertades son tareas continuas que requieren el compromiso de todos los sectores políticos y de la sociedad para preservar la dignidad y los derechos de cada uno. Escuchar activamente “el viento” por parte de los gobiernos de turno y considerar las ideas ajenas con empatía y apertura nos permite aprender y crecer, además de fortalecer los lazos de confianza y colaboración entre todos los que habitamos este suelo. Por eso habrá que sostener el valor de la educación como factor que tiene el poder de transformar al país al proporcionar las herramientas necesarias para el desarrollo individual y colectivo, ya que, si es de calidad, vamos a adquirir conocimientos, habilidades y sobre todo valores que nos van a permitir participar y contribuir desde nuestro lugar, al progreso social y también económico. Innovación, creatividad, pensamiento crítico, son activos que tenemos que apreciarlos como impulsores del crecimiento de sectores como la ciencia, la tecnología y la industria, para promover algo tan esencial como la igualdad de oportunidades y reducir las brechas sociales para que todos los argentinos de bien podamos alcanzar nuestro máximo potencial. En definitiva, la educación nos hará grandes, será el motor para el desarrollo sostenible, que inevitablemente traerá paz y bienestar. Domingo Faustino Sarmiento señaló, y nos dejó como legado, que “Hombre, Pueblo, Nación y Estado… Se encuentran en los humildes bancos de la Escuela”.
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