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Concordia » Despertar Entrerriano
Fecha: 03/02/2025 05:02
Plantar especies de árboles autóctonos en las ciudades presenta numerosos beneficios, especialmente ante el aumento de las temperaturas y las olas de calor. Los árboles reducen la temperatura, dan sombra, se adaptan al clima local y hasta tienen beneficios económicos. La reducción de la temperatura es uno de los principales beneficios, ya que los árboles nativos pueden disminuir la temperatura del aire entre 2 y 8 grados, proporcionando sombra fresca y mitigando el efecto isla de calor, sobre todo en las grandes áreas urbanas. Las especies autóctonas, están mejor adaptadas al clima y las condiciones ambientales locales, lo que las hace más resistentes al calor extremo y menos demandantes de mantener y precisar ser regadas. Los árboles autóctonos mitigan los efectos del cambio climático porque absorben dióxido de carbono (CO2), ayudando a reducir gases de efecto invernadero. Por ejemplo, un solo árbol puede capturar hasta 150 kg de CO2 al año. El ahorro energético es otro de los beneficios de las especies autóctonas, ya que reducen la necesidad de utilizar aire acondicionado hasta un 30%, disminuyendo el consumo energético y las emisiones asociadas a éste. Por último, fundamentalmente, los árboles autóctonos en las ciudades contribuyen a la biodiversidad del lugar porque proveen refugio y alimento para la fauna local, como aves e insectos, fortaleciendo los ecosistemas urbanos. En resumen, los árboles autóctonos no sólo ayudan a reducir las temperaturas en las ciudades durante las olas de calor, sino que también contribuyen a la sostenibilidad ambiental y al bienestar en las ciudades. En Entre Ríos, existen varias especies de árboles autóctonos adecuadas para plantar en áreas urbanas. Como por ejemplo, el Lapacho, conocido por su hermosa floración, ofrece sombra y es bastante resistente. El Jacarandá, apreciado por sus flores violetas, es adecuado para calles y espacios públicos, el Aromito, emblemático de la provincia, es resistente y proporciona buena sombra. O, el Ñandubay que es adaptable y de bajo mantenimiento, ideal para climas cálidos. Fuente: El Once
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