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» Data Chaco
Fecha: 26/12/2024 21:35
La comunidad de Puerto Vilelas sigue conmocionada tras el fallecimiento de Vanesa Bernachea, la mujer de 38 años quien sufrió un violento rodo cuando se dirigía a la casa de sus padres para organizar los festejos de Nochebuena. Su familia, en un acto de solidaridad y amor, decidió donar sus órganos para salvar otras vidas. El cuerpo de Vanesa permanece en el Hospital Perrando, donde será sometido a una ablación para distribuir sus órganos. Uno de ellos ya tiene como destino Corrientes, mientras que otros beneficiarán a un chaqueño y a un rosarino. El resto se trasladará a Buenos Aires. Alfredo, su padre, expresó entre lágrimas: "Decidimos donar sus órganos. Me dio muchas ganas de llorar, una emoción". Vanesa, de 35 años, dejó dos hijos, uno de 18 y otro de 15. Alfredo recordó la última conversación que tuvo con su hija, quien lo llamó para coordinar la cena familiar. "No sabía a qué hora iba a venir, entonces salí a hacer compras y dejé el celular. Ahí me llamó primero su novio, me dijo que Vanesa había tenido un accidente", relató. El grave hecho de inseguridad ocurrió cuando Vanesa volvía de cobrar un trabajo, ya que se dedicaba a la pedicura y como trabajadora doméstica. Según el testimonio de Alfredo, en el lugar del robo, no se encontraron su documento ni el dinero que había ganado ese día, aunque sí quedaron su mochila y su moto."Para mí que la estaban esperando a ella", afirmó con dolor, dejando entrever que pudo tratarse de un hecho intencional. La policía actuó rápidamente, en el lugar del accidente ya habían notificado a Alfredo que uno de los sospechosos se encontraba detenido para que realizara la denuncia correspondiente. Sin embargo, el hombre expresó su escepticismo hacia el sistema judicial: "Pensé que iba a ser en vano, porque los jueces los largan, y si ellos salen, se van a querer agarrar conmigo". Vanesa fue trasladada de inmediato al hospital, pero su estado era crítico. Al llegar, entró en coma y no logró recuperarse. Su padre recordó que uno de los últimos pedidos de su hija fue dinero para comprar insumos y seguir trabajando en la colocación de uñas, un oficio que complementaba con su labor como trabajadora doméstica. En medio del dolor, Alfredo destacó la importancia de la decisión tomada en familia: donar los órganos de Vanesa. "Es un último gesto de amor, una forma de que ella siga viva en otras personas", expresó.
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