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Gualeguaychu » Reporte2820
Fecha: 26/11/2024 17:54
UN ELOGIO ENTRE LAS CRÍTICAS Con aspiraciones políticas, Guillermo Michel fue uno de los hombre de extrema confianza del ex ministro de Economía, Sergio Massa. Hoy, recorre disertaciones y foros, expone críticas a la situación actual del país y analiza la realidad entrerriana.En un mano a mano con, el ex titular de Aduanas, habló de la economía, adelantó que aún no piensa si sera candidato el año que viene a Senador Nacional y prefirió no opinar de la prisión preventiva del ex gobernador Sergio Urribarri tras su condena por corrupción.De cara a una eventual postulación a Senador nacional por el Peronismo en 2025 o a la gobernación en 2027, Guillermo Michel respondió que "la verdad no estoy pensando en eso y creo que hoy hablar de candidaturas, con lo mal que la está pasando la gente, es faltarle el respeto. Si pensar en 2025 me parece muy dificultoso, imagínese en 2027. La verdad, es ciencia ficción".Según el dirigente "nos tenemos que abocar a pensar cómo le damos soluciones a los brutales tarifazos que está viviendo la ciudadanía. Por ejemplo, la factura de luz pasó de 40.000 pesos a 150.000 o 200.000 pesos. Ahora viene el verano y debido a la falta de inversiones, en la ciudad de Gualeguaychú vamos a sufrir un sinnúmero de cortes de electricidad. Será en toda la provincia, pero fundamentalmente en Gualeguaychú producto de la desinversión del gobierno nacional en esta materia".Siempre en la arena política y en medio del rearmado interno del Peronismo entrerriano, Michel explicó que "al haber perdido las elecciones, se vivió un proceso mucho más horizontal: la diferencia de lo que ocurría antes es que el gobernador provincial ordenaba la interna. Hoy, creo que hay que prestarle mucha atención a lo que son los liderazgos territoriales de los intendentes como José Lauritto en la costa del Uruguay, Gustavo Bastián en San José, Adrián Fuertes en Villaguay, y a Rosario Romero en la costa del Paraná. Yo creo que hay que hacer eje y trabajar respetando la capacidad territorial de los intendentes que han sido premiados por los ciudadanos con el voto".Respecto de la condena por corrupción y la prisión preventiva del ex gobernador Sergio Uribarri, su cuñado Juan Pablo Aguilera y el ex ministro de Cultura, Pedro Báez , Michel prefirió no emitir una opinión. "Soy abogado, soy responsable y cuando hablo de las causas penales es porque las leí y me interioricé. No tengo acceso al expediente y no puedo hablar a la ligera de causas tan profundas, no estoy en condiciones de opinar de esos temas".Guillermo Michel reiteró sus cuestionamientos a la política económica del presidente Javier Milei y también reconoció su "voluntad" por mantener un equilibrio en las cuentas públicas. "Por más que no comparto sus ideas, reconozco la voluntad de parte del presidente para mantener controlado el déficit fiscal"."A diferencia de todo lo prometido en campaña donde Javier Milei versaba sobre que se iba a dolarizar, se iba a poner una bomba al Banco Central, que no se iban a aumentar impuestos; el programa económico que aplicó el gobierno es ortodoxo, tal como lo plantea el Fondo Monetario Internacional", dijo.Según Michel ese plan consta de "una brutal devaluación del 118%, más el aumento de impuestos como el impuesto País, a los combustibles y el monotributo. También se eliminó la devolución de IVA y se aumentó el impuesto a las Ganancias. Ese fue el programa económico con ajuste del gasto".En respuesta a qué rescata de las políticas implementadas por Milei, Michel dice que "tiene algunas cuestiones sobre las cuales incidió de manera favorable como lo es la baja de la inflación. Básicamente lo que se hizo fue secar la plaza de pesos y utilizar el salario como ancla. Tampoco nadie puede estar en desacuerdo en reducir el décifit fiscal. En todos los organismos que me ha tocado administrar, los he administrado con superávit fiscal. Lo que sí se está viendo es que hay que trabajar más sobre qué rubro se ajustan, porque hasta ahora el ajuste lo están pagando los jubilados, la clase media y los trabajadores, no la casta como habían prometido en campaña".Para Michel, los argentinos "le reconoce la estabilización y la baja de la inflación al gobierno nacional" y enseguida expuso que "esto se puede hacer, únicamente, en un gobierno que recién inicia un mandato. Es muy difícil hacerlo en una etapa anterior con toda la oposición buscando que le vaya mal al gobierno. A mí me tocó estar en el Fondo Monetario y de boca de los propios representantes del Fondo, sabíamos que economistas argentinos, sobre todo del PRO, iban a pedirles que le bajen la palanca al gobierno de Alberto Fernández".Respecto del panorama que se analiza para 2025, el ex titular de la Aduana deja de lado los tecnicismos y hablá en términos simple: "tomar un café en Buenos Aires sale más caro que tomarlo en Miami o Madrid. Algún problema con el tipo de cambio existe. En Gualeguaychú lo vemos clarito porque con el tipo de cambio barato venían los uruguayos a comprar, pero ahora no queda ningún uruguayo. Encima, los argentinos se están yendo de vacaciones a Punta del Este o Brasil y no a la costa argentina"."Claramente el programa económico tiene un dólar atrasado, utilizar el dólar y los salarios como ancla puede dar una estabilidad superficial durante un tiempo, pero en algún momento va a generar desequilibrios vinculados a la balanza cambiaria", advirtió Michel y pidió que "el gobierno reconozca esta situación con el tipo de cambio y busque la manera de corregirlo sin tener que tengamos una crisis cambiaria", analizó.Más adelante, Michel puntualizó aque "soy muy optimista con el futuro de Argentina, independientemente de cuál sea el gobierno, porque tiene un potencial enorme, no solo en agro sino en la energía. El año pasado pasado pasamos de un déficit de balanza comercial de 3.000 millones de dólares vinculada a la energía a un superávit de 4.000 millones de dólares este año, gracias a una obra pública -de la que este gobierno reniega- como fue el gasoducto ahora llamado Perito Moreno antes era Néstor Kirchner"."El gas, el petróleo, la minería son industrias primarias que son importantes para diversificar la matriz exportadora y para generar dólares para el país, pero hoy la industria no tiene destino. Lo estamos viendo con el atraso del tipo de cambio, la liberación de importaciones que se traduce en desocupación y en destrucción del trabajo local".Entonces, cerró con un ejemplo: "la industria textil en Argentina emplea a más de 500.000 trabajadores con un amplio despliegue federal porque en La Rioja y Catamarca de cada tres empleados industriales, uno es de la industria textil. Con esta política del gobierno, con el tipo de cambio atrasado, la liberación de los controles o la apertura del courier levantando la franquicia de 3.000 dólares por envío, lo único que se logra es destruir el empleo local, destruir la industria local".
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