28/09/2024 15:50
28/09/2024 15:46
28/09/2024 15:45
28/09/2024 15:44
28/09/2024 15:44
28/09/2024 15:44
28/09/2024 15:44
28/09/2024 15:42
28/09/2024 15:42
28/09/2024 15:37
» La Capital
Fecha: 25/06/2024 00:18
A lo largo de los últimos años, la popularidad de las criptomonedas (y, especialmente del bitcoin) ha trascendido fronteras hasta el punto de convertirse en un fenómeno global. En Argentina, donde la economía ha enfrentado desafíos significativos, las criptomonedas han ganado una popularidad creciente como una alternativa de inversión y protección de valor. Cada vez son más los argentinos que se plantean comenzar a operar con estos activos. Pero, ¿cuáles son los pasos a seguir? En la actualidad hay tres vías diferentes para obtener la popular criptomoneda. Minando estas criptomonedas, comprándolas mediante un intermediario o bien realizar alguna venta de un producto o servicio y que el comprador realice el pago en bitcoin. Debido a su instantaneidad y accesibilidad, la compra directa es la alternativa más utilizada. Para adquirir bitcoins mediante compra tan sólo es necesario utilizar una plataforma especializada. Su funcionamiento es relativamente sencillo, especialmente, para aquellos compradores que ya han tenido la oportunidad de invertir en bolsa pues el sistema es bastante parecido. Estas plataformas reciben el nombre de exchange y albergan lo que conocemos como wallets o monederos a modo de medida de seguridad adicional. No obstante, en el mercado podemos identificar diferentes tipologías de monederos de bitcoins en función de factores como la usabilidad y las garantías de protección que brindan. Los formatos físicos wallet consisten en un software preparado para permitir la descarga de bitcoins en un hardware como un ordenador para, a continuación, almacenarlos dentro de un dispositivo monedero similar a una memoria usb. Además, también podemos encontrar modalidades online, es decir, aquellas que se encuentran en plataformas de exchange debidamente encriptadas para garantizar altos niveles de seguridad. Gracias al uso de este tipo de herramientas los usuarios tienen la posibilidad de seguir resguardando sus activos con independencia de que la plataforma en cuestión se encuentre en funcionamiento o no. Debido a sus características, los monederos de bitcoins cuentan con sistemas de respaldo y verificación. Lo más común es que integren factor de doble autenticación, generalmente asociado a una clave individualizada que se recibe de forma privada a través de un mensaje de texto en el teléfono móvil. ¿Qué hay de la cotización? Llevar un seguimiento de la cotización tan sólo requiere acceder al monedero o wallet. En la propia plataforma es posible conocer la evolución de la criptomoneda y el precio de bitcoin. Sea como sea, antes de pasar a la acción hay que tener en cuenta que uno de los rasgos más característicos del bitcoin es su volatilidad y, por tanto, el riesgo implícito a la hora de operar. Escoger el wallet correcto En el mercado podemos encontrar un amplio abanico de carteras de bitcoins. Para identificar la opción más conveniente es importante valorar qué uso se va a hacer exactamente, así como la cantidad de bitcoins que se asociarán o se tienen asociados a la dirección de usuario. En general, las opciones digitales son más apropiadas cuando de lo que se trata es de almacenar cantidades reducidas de criptomonedas pues, al final, son el sistema que ofrece mayor rapidez a la hora de operar. En cambio, no están especialmente aconsejados para conservar grandes volúmenes. En cualquier caso, es imprescindible saber que la clave privada debe ser conservada en un lugar seguro pues a partir de ella será posible recuperar los bitcoins. En términos generales, aquellos usuarios que cuentan con una mayor cantidad de bitcoins deberían escoger un monedero físico en lugar de un wallet íntegramente online. Aún así, esta opción no está exenta de riesgos pues cabe la posibilidad de que el hardware o dispositivo en el que se almacenan los bitcoins se rompa. En este tipo de supuestos, la solución consiste en anotar en un papel y tener fácilmente localizable la clave privada o la dirección privada de la cuenta. Por otra parte, es necesario saber que, al escoger un criptowallet existen diferencias entre aquellas opciones que cuentan con una clave pública y privada y aquellas en las que es la propia plataforma la que se encarga de la gestión y custodia de los activos en lugar del inversor de forma individual y haciendo uso de sus propias claves. ¿Cómo se opera exactamente? En el momento en que se escoge un servicio wallet, el proceso que hay que seguir para comenzar a operar comparte muchas similitudes con el de la compra-venta de acciones. No obstante, atendiendo al método de pago, los plazos en que se formaliza la operación pueden extenderse más o menos. Tal y como ocurre con un bróker convencional, los inversores de bitcoin pueden acceder en cualquier momento a sus carteras personales para revisar la evolución del bitcoin así como su correspondencia en su moneda fiduciaria. Eso sí, en el caso de los BTC, a diferencia de lo que ocurre con las acciones, no es necesario comprar un bitcoin entero como tal sino que, es posible adquirir una porción. En cuanto a las transacciones que se llevan a cabo dentro de las plataformas especializadas en trading de bitcoin, quedan supervisadas por un tercero, es decir, las propias plataformas. Esto implica que la seguridad depende de estas en tanto que poseen las claves privadas de los bitcoins.
Ver noticia original
 (1).jpg)
Examedia © 2024
Desarrollado por