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Concordia » Lt15 Concordia
Fecha: 31/12/2025 15:14
Victoria Piccoli, tarotista y terapeuta holística, habló con UNO sobre la importancia de agradecer, intencionar y dar paso a lo nuevo ante el año que inicia En las vísperas de un nuevo año, la sociedad suele volcarse a la búsqueda de cábalas y tradiciones para atraer la buena fortuna. Sin embargo, la tarotista y terapeuta holística Victoria Piccoli en terapias holísticas, sugirió que no importa tanto el ritual en sí mismo, sino la intención y la emoción con la que se realice. Desde salir con una valija hasta comer las doce uvas, cualquier acción pierde efectividad si se hace por hacer, sin convencimiento. Para que un ritual tenga efecto, es indispensable que exista convencimiento, emoción y una clara energía depositada en el acto. El para qué se está haciendo algo resulta mucho más relevante que el ritual en sí mismo, indicó y luego agregó: Buscar rituales genéricos en internet no garantiza resultados si no existe una conexión genuina. En última instancia, el ritual actúa como una herramienta, pero la verdadera fuerza transformadora es la conciencia y la claridad de propósito que cada persona aporta al momento. Hacer espacio para lo nuevo Piccoli sostuvo que uno de los pilares fundamentales para recibir el año es la limpieza física, bajo la premisa de que no se puede recibir algo nuevo si no hay lugar donde guardarlo. En este contexto, recomendó dedicar un día a una limpieza profunda del hogar, revisar armarios y eliminar aquello que ya no representa a la persona. - Soltar el pasado: la entrevistada indicó que es vital desprenderse de objetos rotos que no se repararon en todo el año, manuales de electrodomésticos que ya no existen, o ropa guardada por si acaso en algún momento se puede volver a utilizarla. - Carga simbólica: también se sugiere revisar pertenencias de personas fallecidas o regalos que evoquen recuerdos dolorosos, como engaños o vínculos tóxicos, para recuperar la sensación de liviandad. El detox digital y emocional La terapeuta holística recalcó que la limpieza no debe limitarse al espacio físico; porque también el entorno digital y los vínculos afectivos requieren una revisión profunda. Teniendo en cuenta que hoy día el celular es considerado una extensión del ser humano, aconsejó un detox de redes sociales y limpieza de contactos. Esto implica dejar de seguir cuentas que generan sentimientos de inferioridad, páginas de chimentos o medios que solo informan negatividad, indicó la entrevistada. El principal motivo para realizar este proceso es proteger la salud emocional. Solemos seguir cuentas en redes sociales que, lejos de sumarnos, nos hacen sentir inferiores, chiquitos, feos o incapaces Esta carga de negatividad se ve alimentada por: - Noticias negativas: sobre desgracias que mantienen al usuario en alerta y angustiado. - Cuentas de chimentos: espacios dedicados a hablar mal de otros que solo aportan energías que no suman al bienestar personal. - Vínculos por inercia: contactos agendados que ya no tienen relevancia en la vida actual, como prestadores de servicios ocasionales que solo llenan la lista de contactos y cuyos estados de WhatsApp son consumidos sin sentido. En el plano emocional, la recomendación fue priorizar el autocuidado. Al respecto, Piccoli dijo que no es necesario cumplir con todos los compromisos sociales ni asistir a reuniones por compromiso si el vínculo no es nutritivo. El acto de decir no a ciertos encuentros familiares o sociales donde no se siente bien es considerado un acto de amor propio. Adiós a la presión del balance Existe una presión cultural por cerrar el año con resultados concretos, pero Piccoli advirtió que no hay que enloquecerse con el balance de fin de año. El calendario es una convención humana y, si no se siente la energía para reflexionar el 31 de diciembre, es perfectamente válido hacerlo en los meses siguientes, indicó. Finalmente, señaló que la herramienta más poderosa para transformar la energía es la gratitud. En lugar de enfocarse en lo que faltó, el enfoque debe estar en agradecer lo básico: un techo, comida y salud. La gratitud abre puertas y cambia la frecuencia vibratoria de las personas, especificó la consultada. Fuente Diario Uno Entre Ríos
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