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» Clarin
Fecha: 30/12/2025 17:24
Tatiana Schlossberg, hija de Caroline Kennedy y nieta del expresidente estadounidense John F. Kennedy, murió este martes a los 35 años tras una dura batalla contra una forma poco común de leucemia. La noticia fue confirmada por la Fundación de la Biblioteca y Museo Presidencial JFK, que informó su fallecimiento a través de un mensaje difundido en redes sociales. Nuestra querida Tatiana falleció esta mañana. Vivirá por siempre en nuestros corazones, señaló el comunicado, que generó una inmediata ola de mensajes de condolencias y homenajes tanto en Estados Unidos como en otros países. Schlossberg había revelado públicamente su diagnóstico en noviembre pasado, en un ensayo íntimo y conmovedor publicado en la revista The New Yorker. Allí contó que padecía leucemia mieloide aguda con una mutación rara, un tipo de cáncer que afecta la sangre y la médula ósea y que, en su caso, había sido diagnosticado en mayo de 2024, poco después del nacimiento de su segundo hijo. En ese texto, Tatiana combinó la crudeza de la enfermedad con reflexiones profundas sobre la maternidad, la memoria y el tiempo. Lejos de un tono grandilocuente, eligió una voz serena y honesta para relatar cómo intentaba vivir y estar presente junto a sus hijos mientras transitaba un tratamiento complejo y un pronóstico adverso. Estar en el presente es más difícil de lo que parece, escribió. Dejo que los recuerdos vayan y vengan. Muchos son de mi infancia, y a veces siento que me observo crecer a mí misma y a mis hijos al mismo tiempo. En uno de los pasajes más citados del ensayo, reflexionó sobre la muerte y la memoria, reconociendo el deseo humano de creer que ciertos momentos pueden preservarse para siempre. Tatiana Schlossberg era reconocida no solo por su apellido, sino por una trayectoria propia como periodista ambiental y escritora. A lo largo de los años, trabajó en temas vinculados al cambio climático, la crisis ambiental y el impacto humano sobre el planeta. Su enfoque combinaba rigor periodístico con sensibilidad narrativa, una marca que también se reflejó en sus libros y artículos. En 2019 publicó el libro Inconspicuous Consumption, en el que analizaba cómo los hábitos cotidianos, muchas veces invisibles, contribuyen al deterioro ambiental. La obra fue bien recibida por la crítica y consolidó su perfil como una voz joven y comprometida en el debate ecológico contemporáneo. Nacida en 1990, Tatiana creció en el seno de una de las familias más emblemáticas de la política estadounidense, pero siempre mantuvo un perfil relativamente bajo en comparación con otros miembros del clan Kennedy. Hija de Caroline Kennedy, exembajadora de Estados Unidos en Japón y Australia, y del diseñador y artista Edwin Schlossberg, eligió un camino alejado de la política partidaria, enfocado en el periodismo, la escritura y el activismo ambiental. Su muerte reaviva el recuerdo de la historia marcada por tragedias que ha atravesado a la familia Kennedy a lo largo de las décadas. Sin embargo, quienes la conocieron destacan que Tatiana supo construir una identidad propia, guiada por la curiosidad intelectual, la empatía y un fuerte sentido de responsabilidad social. Schlossberg deja a su esposo, George Moran, y a sus dos hijos pequeños, un niño y una niña. También la sobreviven sus padres, Caroline Kennedy y Ed Schlossberg, y sus hermanos, Rose y Jack Schlossberg. Newsletter Clarín
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