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» LaprovinciaSJ
Fecha: 28/12/2025 21:48
Jeremías Jalaf celebró sus 18 años rodeado del cariño de su familia, amigos y de toda una comunidad que lo acompaña desde hace años. El festejo tuvo un momento muy especial: el joven ingresó junto a un móvil policial de la Comisaría 9ª, cumpliendo así uno de sus grandes sueños, ya que anhela convertirse en policía. La escena fue profundamente emotiva y simbolizó no solo un deseo personal, sino también el reconocimiento a un camino marcado por la perseverancia y la fortaleza. Para quienes conocen su historia, alcanzar la mayoría de edad no es un dato menor. Es el reflejo de una vida atravesada por desafíos médicos complejos y por una voluntad inquebrantable de salir adelante. Su cumpleaños fue vivido como una verdadera victoria, tanto para Jeremías como para su entorno más cercano. Una infancia marcada por la lucha La historia de Jeremías comenzó a ser conocida cuando apenas tenía 12 años y ya había atravesado 18 cirugías en la cabeza debido a un tumor cerebral. En ese entonces, su vida transcurría entre hospitales, estudios médicos y tratamientos prolongados, muchos de ellos realizados en Buenos Aires, lejos de su hogar y de su gente. A pesar de su corta edad, el sanjuanino siempre mostró una fortaleza que sorprendió incluso a los médicos. Estoy bien, volveré pronto a mi casa, decía con tranquilidad en una entrevista brindada a Diario La Provincia SJ, mientras continuaba su recuperación tras una intervención quirúrgica. Un ejemplo que inspira a todos Hoy, Jeremías ya no es aquel niño que luchaba desde una cama de hospital, sino un joven que sigue mirando hacia adelante. Su cumpleaños número 18 fue una muestra de cuánto ha recorrido y de todo lo que aún sueña. Como ocurrió desde el primer día, la comunidad de Caucete continúa acompañándolo, celebrando cada logro y cada paso que da. Jeremías Jalaf es, para muchos, un verdadero guerrero de la vida. Su historia no solo habla de superación médica, sino también de esperanza, de amor familiar y de sueños que, aun en los contextos más difíciles, siguen siendo posibles.
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