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Gualeguay » Debate Pregon
Fecha: 27/12/2025 19:16
Sin obra pública no hay trabajo: van a ser fiestas muy tristes para los obreros de la construcción El secretario general de la UOCRA Gualeguay, Martín Barreto, trazó un duro balance sobre la situación del sector: despidos masivos, falta de obra nueva, trabajadores que sobreviven con changas y una fuerte crítica a la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional. El secretario general de la UOCRA Gualeguay, Martín Barreto, describió un escenario crítico para los trabajadores de la construcción, que según sostuvo no escapa a la realidad nacional. La verdad es que estamos cerrando un año difícil, a pesar de que venimos de un año trágico, afirmó, al hacer un balance del período transcurrido desde el inicio del actual gobierno. En ese sentido, Barreto remarcó que con el comienzo del mandato de Javier Milei se paró la obra pública y eso derivó en despidos a mansalva. Muchos de esos trabajadores, señaló, todavía siguen sin estar en un trabajo formal, y quienes continúan vinculados al sector lo hacen en condiciones precarias, sin haber podido ser reincorporados a las empresas. No hubo obra nueva en sí; solamente se terminaron obras que ya habían empezado, explicó. Como ejemplo local, mencionó la culminación del Barrio Cien Viviendas en Gualeguay. Según detalló, cuando asumió el actual gobierno la obra ya tenía un avance del 85 o 90 por ciento. Ese 15 o 20 por ciento que faltaba terminó llevando casi dos años. Para terminar un porcentaje así, es muchísimo tiempo, cuestionó. Además, advirtió que la paralización también genera deterioro: Cuando se frena una obra, se rompen cosas, se tergiversa todo, y cuando se reactiva muchas veces hay que volver un poco para atrás. Barreto insistió en que el problema central es la falta total de nuevos proyectos. No hay obra nueva, nada, repitió. En ese marco, mencionó también el escaso avance de la Escuela Técnica: Es una obra que tendría que estar prácticamente culminada para que el año que viene los alumnos estén ocupando salones y talleres, y no va a ser así. Fueron dos años prácticamente de parate. Consultado sobre la situación de los trabajadores que quedaron desocupados, el dirigente fue contundente: Han sido dos años de muchísimo esfuerzo para mantenerse. Explicó que a muchos se les terminó el fondo de desempleo y debieron recurrir a changas. Y tristemente, te lo tengo que decir, muchos han terminado cartoneando, porque no hay trabajo, lamentó. La situación se agrava, agregó, para quienes tienen entre 50 y 60 años: ¿A dónde van a ir a laburar? Si para los de 25 o 30 años no hay trabajo, menos para ellos. La falta de empleo también impacta directamente en la obra social del gremio. Hay menos aportes, y hoy la obra social está nutrida por mucho monotributo. El obrero constructor formal es muy poco, señaló. Aun así, destacó el esfuerzo de la conducción nacional de la UOCRA, encabezada por Gerardo Martínez, para sostener el sistema. El gobierno les debe a todas las obras sociales, y aun así se mantienen gracias al esfuerzo de las comisiones directivas, subrayó. En relación con el fondo de desempleo, Barreto sostuvo que sirve hasta cierto momento, pero dejó en claro que no es una solución de fondo. Lo que se necesita es trabajo. Sin trabajo, esto no se sostiene, afirmó. En ese marco, cuestionó la falta de cumplimiento de anuncios de infraestructura: La planta potabilizadora prometida no se habla, la circunvalación no se habla. No hay obras nuevas. Si bien valoró la entrega de las cien viviendas bienvenido sea que esas familias tengan su techo para pasar las fiestas, remarcó el contraste con la situación del sector. Para los 500 compañeros que hoy están sin trabajo, hace dos años que no hay actividad. Son 500 familias que hace dos años estaban trabajando, enfatizó. Sobre la Reforma Laboral Barreto también fue muy crítico con la reforma laboral que se discute a nivel nacional. La calificó como sangrienta y en contra de los trabajadores. Que caminen la calle y vean la realidad, reclamó, al apuntar contra legisladores y funcionarios. Le siguen mintiendo a la gente, a los trabajadores y a los jubilados, dijo, y graficó la situación al señalar que un jubilado hace un esfuerzo enorme para comprar un kilo de milanesas para pasar la Navidad, mientras otros convocan a asados para festejar. Respecto al contenido de la reforma, fue tajante: Está pensada para flexibilizar el despido, no para generar nuevos puestos de trabajo. Y desafió: Decime un punto que sea a favor de los trabajadores. ¿Te parece bien sacar la hora extra? ¿O que el empleador decida cómo y cuándo te tomás las vacaciones? Todo es en contra del trabajador. Finalmente, Barreto reconoció el mal ánimo que se vive en la calle y que él percibe en cada charla con los afiliados. Un grupo de compañeros terminó las cien viviendas y se quedó sin trabajo justo antes de Navidad, señaló. Ellos festejaron entregando las llaves, y está bien por esas familias, pero que se pongan en el lugar de los trabajadores, reclamó. Sin trabajo esto no va a salir adelante, concluyó el dirigente gremial. Para los obreros de la construcción, esta va a ser una fiesta muy triste.
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