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» Informate Salta
Fecha: 27/12/2025 15:03
La Justicia Federal de Salta condenó a seis integrantes de un clan familiar dedicado al narcotráfico y al lavado de activos, que operaba desde hace más de una década y organizaba envíos de grandes cargamentos de droga hacia distintas provincias del país. Las penas llegan hasta 13 años de prisión, e incluyen el decomiso de cuatro inmuebles, 14 vehículos y sumas millonarias de dinero. El fallo fue dictado el pasado 15 de diciembre por el Tribunal Oral Federal N°2 de Salta, a cargo de la jueza Gabriela Catalano, tras homologar un acuerdo pleno impulsado por la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR) y la Fiscalía de Distrito Salta. El líder de la organización, Emanuel Gabriel Cala, fue condenado a 13 años de prisión como jefe de una asociación ilícita dedicada al tráfico de estupefacientes y al lavado de activos. La pena fue unificada en 15 años por su participación en otra causa vinculada al transporte de drogas. Su pareja, Melisa Aleman, también considerada jefa del clan, recibió una condena de 6 años y 6 meses, unificada en 8 años de prisión por antecedentes similares. Además, fueron condenados tres hijos de Aleman y uno de sus yernos, quienes integraban la estructura familiar delictiva. En estos casos, recibieron penas de tres años de prisión en suspenso, como miembros de la asociación ilícita y partícipes secundarios en el lavado de activos. Según la investigación, el clan comenzó a operar en 2011, organizando transportes de 100 a 200 kilos de cocaína hacia provincias como Córdoba y Santiago del Estero, entre otras. Para blanquear las ganancias, realizaban inversiones en inmuebles, vehículos y cuentas bancarias, buscando dar apariencia legal al dinero obtenido del narcotráfico. Entre los bienes decomisados se encuentran tres propiedades, dos en la ciudad de Salta y una en Córdoba, nueve automóviles, cinco motocicletas, más de 16 mil dólares, 800 mil pesos en efectivo y alrededor de 8,5 millones de pesos depositados en cuentas bancarias. La causa se apoyó en tareas de inteligencia de Gendarmería Nacional, que permitió acreditar una estructura estable, con roles definidos y vínculos directos con proveedores de droga en Bolivia. Dos procedimientos clave, realizados en 2022 y 2023, permitieron secuestrar cerca de 200 kilos de cocaína en rutas nacionales. El golpe final al clan se produjo en marzo de 2024, con allanamientos simultáneos en Salta, Jujuy, Santiago del Estero y Córdoba, que derivaron en la detención de todos los acusados. La sentencia marca uno de los fallos más contundentes del año en materia de narcocriminalidad en la provincia, tanto por la extensión de la operatoria delictiva como por el volumen de bienes decomisados.
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