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» La Verdad
Fecha: 27/12/2025 06:16
Por Víctor A. Rivera (*) En los últimos días se conoció en Junín una sentencia laboral que condena a una empresa local a abonar a un ex empleado una suma cercana a los 190 millones de pesos. El monto generó sorpresa y preocupación, no por la existencia del derecho reconocido que forma parte del sistema de protección laboral sino por los efectos económicos que una decisión de este tipo puede producir en el contexto actual. Los procesos judiciales extensos, atravesados por años de inflación, plantean un desafío evidente. El capital histórico, combinado con intereses acumulados durante largos períodos, puede derivar en cifras que se alejan de toda proporción con el conflicto original. Este fenómeno no es desconocido para el derecho ni para los tribunales, que desde hace tiempo vienen buscando respuestas para evitar tanto la licuación de los créditos como resultados finales excesivos. En ese marco se inscribe el conocido fallo Barrios de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires. Allí se sostuvo que la prohibición legal de indexar no puede aplicarse de manera automática cuando conduce a resultados irrazonables y, en ese contexto, se reafirmó la necesidad de que los órganos judiciales controlen los efectos económicos de las sentencias, incluyendo la posibilidad de graduar los intereses, a fin de evitar dobles compensaciones o montos finales desproporcionados. Esta precisión es importante. El derecho vigente no impone soluciones automáticas ni obliga a maximizar condenas. Por el contrario, reconoce la necesidad de graduar los efectos económicos de las sentencias, atendiendo a las particularidades de cada caso. La moderación de los intereses no implica desconocer derechos, sino ejercer una potestad que el propio sistema contempla para preservar la razonabilidad del resultado. En el caso que hoy se comenta en Junín, la sentencia reconoce la necesidad de preservar el valor del crédito, lo cual resulta atendible. Queda abierta, sin embargo, la posibilidad de que instancias superiores evalúen si corresponde atemperar sus efectos económicos, dentro del marco que la jurisprudencia provincial ha delineado. La intervención de la Suprema Corte Provincial, llegado el caso, permitiría analizar la cuestión desde una perspectiva más amplia, ponderando tanto el derecho reconocido como la viabilidad y razonabilidad del monto final. Este tipo de debates excede a un expediente en particular. Interpela a la comunidad jurídica y a la sociedad en su conjunto sobre cómo compatibilizar la tutela de derechos con decisiones judiciales que sean sostenibles en el tiempo. El desafío no es menor: alcanzar soluciones que sean legales, justas y equilibradas, sin perder de vista el impacto real que una sentencia puede tener en la vida económica y social de una ciudad como Junín. (*) Abogado ++++++++++++++ También puede interesarte: Todo el Deporte en: La Deportiva Escuchar las notas más importantes en: LT20 Radio Junin Escuchar LT20 Radio Junín en VIVO: Escuchar ahora
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