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» DiarioWeb
Fecha: 26/12/2025 20:36
El primer refuerzo del Boca 2026 está al caer, solo falta la confirmación oficial: Marino Hinestroza. Pero no será el único, porque Juan Román Riquelme planea un mercado de pases movido tanto en el área de los refuerzos como en el de las salidas. Ya solucionadas las gestiones por el extremo colombiano, que era un anhelo del presidente y llegará en una operación que ronda los 5 millones de dólares, Marcelo Delgado y la estructura de fútbol retomarán la búsqueda en enero por tres objetivos más: Gastón Hernández y dos delanteros. Todo comenzó con un ofrecimiento de parte de la representación de Hernández, uno de los tantos nombres de peso del Ciclón -el capitán, ni más ni menos- que tiene potencialidad de venta a un buen precio para colaborar con la recuperación de la estabilidad económica del club. Y la dirigencia del "Xeneize", que lo sigue desde 2024, dio el visto bueno. Lo quieren. Las conversaciones entre Boca y Hernández están avanzadas, aunque la operación se encuentra en pausa debido a la profunda crisis que atraviesa el "Ciclón". El club de Boedo está en acefalía y se encontró con un Marcelo Moretti que se niega a dimitir y recurrió a la justicia para solicitar la anulación de su renuncia. En una entrevista con DSports, el exmandatario fue tajante en lo que respecta a Boca: "No he hablado con Boca. San Lorenzo no puede vender jugadores a Boca porque existe un embargo de un fondo suizo de 700 mil dólares por Martegani. Para vender a Boca tendrías que sobrepasar el monto del embargo que son casi 5 millones de dólares, lo cual no es beneficioso. Braida cuando se fue, pagó la cláusula de rescisión, no fue una venta de San Lorenzo a Boca". A pesar de la inminente llegada del extremo Hinestroza, Riquelme considera crucial que el equipo cuente con más opciones ofensivas de cara a la Libertadores. En ese sentido, Boca apunta a dos atacantes que hoy juegan en el exterior. Uno de ellos es un "9" natural, mientras que el otro se movería en posiciones cercanas al centro del ataque, una especie de segunda punta. No trascendieron nombres, pero la búsqueda responde a un perfil ya definido por la dirigencia en pos de jerarquizar el frente de ataque para la Copa Libertadores. La situación interna justifica la necesidad. Miguel Merentiel llevó gran parte de la carga ofensiva durante el año y terminó como máximo goleador, pero el resto de los delanteros no consiguió mantener la regularidad ni los números para asegurar tranquilidad a largo plazo: Edinson Cavani jugó poco debido a lesiones y Milton Giménez terminó el año con un rendimiento muy errático.
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