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» TN
Fecha: 24/12/2025 20:55
Todo empezo en Rio Grande. Pero no en cualquier lado, sino en una jugueteria familiar. De esas donde trabaja el padre, la madre y los hijos. Alli me dieron bolsas y bolsas de juguetes. El destino era Ushuaia, al comedor Copa de Leche que maneja Sulma Paredes. Una de esas mujeres que se ponen el barrio al hombro. Sali a la ruta con la mision clara. Pero el camino tiene sus propios planes. Como durante el trayecto saliamos en vivo por TN la gente se acercaba con juguetes. Toma, lleva esto tambien, me decian, y lo que era un simple envio se transformo en una montana de regalos. La solidaridad es contagiosa. Lee tambien: La historia de los jubilados que no esperan Navidad y regalan juguetes de madera para los chicos todo el ano A mitad de camino hice una parada tecnica en la panaderia La Union que esta Tolhuin. Ese lugar es historia viva. Un incendio la destruyo entera hace 4 anos, la levantaron de las cenizas y ahora esta mas linda que antes. Es un lugar con mucha mistica. Dicen que es cabala y por eso pasan todos los candidatos a presidente antes de las elecciones. Si no pasas por ahi, dicen que perdes. Entre el olor a panaderia, me encontre con una sorpresa. Alli estaba Nahuel Pennisi tomando un cafe con su representante. Habia sido fichado como figura principal para un Festival que se iba a hacer al otro dia en la ciudad. Nahuel esta en un gran momento profesional, fue nominado a tres Grammys latinos, pero no pierde la humildad. Me acerque a su mesa y le conte quien era y lo que andaba haciendo. Enseguida se engancho y tiro unos acordes con la guitarra. Fue un recital privado en el corazon de la isla. Los turistas y parroquianos del lugar no lo podian creer. Cuando llegue a Ushuaia tenia un problema hermoso. Eran tantos los juguetes que no sabia como bajarlos. No tenia manos suficientes. Entonces pedi ayuda a los que siempre estan: los Bomberos Voluntarios. No dieron vueltas. Cargamos todo en la autobomba roja y salimos. De a poco yo me habia convertido en un digno ayudante de Santa: con uniforme colorado, barba y gorro con pom pom blanco. Dos de los bomberos, los mas jovenes, se sumaron al equipo. Ya estabamos listos. Y asi fuimos hasta el merendero. Cuando bajamos los chicos no lo podian creer. Sulma habia invitado a los pibes y pibas del barrio con sus mamas con la excusa de compartir unas empanadas. Imaginen la cara de los chicos cuando vieron llegar a Papa Noel con los regalos. Sirenas, luces y juguetes. Fue el final perfecto para un viaje inolvidable.
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