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» El cordillerano
Fecha: 23/12/2025 01:24
A ESTAR ATENTOS Qué predijo Baba Vanga para 2026 y por qué genera preocupación Cada vez que se acerca un nuevo año cargado de incertidumbre global, un nombre vuelve a colarse en el debate público con fuerza inquietante: Baba Vanga. Aunque murió en 1996, la vidente búlgara sigue generando impacto décadas después, especialmente cuando algunas de sus supuestas predicciones parecen dialogar con el presente de una forma perturbadora. Baba Vanga, cuyo nombre real fue Vangeliya Pandeva Gushterova, ganó fama mundial por anticipar hechos que, con el paso del tiempo, muchos interpretaron como cumplidos. Catástrofes naturales, conflictos armados y muertes que marcaron época fueron asociadas a sus visiones, lo que la llevó a ser comparada con Nostradamus y a construir una reputación que todavía hoy genera respeto, temor y fascinación. Lo que vuelve a ponerla en el centro de la escena es una predicción atribuida al año 2026, que despertó tensión por su alcance y por el escenario que plantea. Según los relatos que circulan sobre sus vaticinios, Baba Vanga habría advertido que la humanidad atravesará un punto de quiebre a partir de un evento completamente inesperado, vinculado al contacto con una civilización no humana. De acuerdo a esa interpretación, el momento clave se daría en el mes de noviembre, cuando los seres humanos entrarían en contacto con una presencia externa a la Tierra. La versión más difundida habla de la llegada de una “nave espacial masiva”, un hecho que, de concretarse, marcaría un antes y un después en la historia del planeta. La tensión surge porque, según se desprende de esas visiones, el encuentro no estaría exento de riesgos ni tendría un desenlace claro. Más allá de ese escenario extremo, las advertencias de Baba Vanga para 2026 no se limitan al espacio. También habría anticipado un período de fuertes tensiones entre las grandes potencias mundiales, con focos de conflicto que involucrarían a Estados Unidos, China y Rusia. Un marco geopolítico que, lejos de sonar descabellado, dialoga con las guerras activas, los conflictos latentes y la fragilidad del equilibrio internacional actual. Sin embargo, no todo en sus predicciones aparece teñido de oscuridad. En el mismo período, a la vidente se le atribuyen anuncios vinculados a avances científicos que podrían cambiar la vida humana, como nuevos métodos para detectar enfermedades graves y el desarrollo de fuentes de energía innovadoras, incluso fuera del planeta. Un punto clave que siempre rodea a Baba Vanga es el origen de sus profecías. A diferencia de otros videntes históricos, ella no dejó escritos propios. Sus visiones se transmitieron de forma oral, principalmente a través de su sobrina Krasimira Stoyanova y de seguidores cercanos, lo que generó debates, reinterpretaciones y también acusaciones de tergiversación. Aun así, cada vez que el calendario se acerca a una de las fechas que se le adjudican, el interés se reactiva. Y de cara a 2026, la predicción que vuelve a circular no solo asusta por lo que plantea, sino porque obliga a una pregunta incómoda: ¿y si esta vez, otra vez, no estuviera tan lejos de la realidad?
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