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» La Capital
Fecha: 08/12/2025 10:15
Reuniones menos numerosas, festejos en modo ahorro y compras que se condensarán en los últimos días pintan el panorama de este fin de año 2025 con una caída entre el 8% y el 10% Los supermercados describen un escenario de compras contenidas, cambios de hábito y un clima general de cautela en los hogares en la previa de las fiestas. Diciembre llegó, pero en los supermercados de Rosario todavía no se percibe el clásico salto de consumo previo a las fiestas . Así lo advierten desde la Cámara de Supermercados de Rosario (Casar), donde describen un escenario de compras contenidas, cambios de hábito y un clima general de cautela en los hogares, en el marco de una caída de entre el 8% y el 10% . Reuniones menos numerosas, festejos en modo ahorro y compras que se condensarán en los últimos días pintan el panorama de este fin de año 2025. “ El consumo hasta ahora es el de cualquier mes normal, no arrancó todavía la compra masiva de productos festivos ”, explica Sergio Cassinerio, presidente de Casar. Según señala, la expectativa está puesta en la acreditación del aguinaldo, que podría reactivar las ventas recién sobre la fecha. Sergio López, secretario de Casar y vicepresidente de la Asociación Empresaria de Rosario (AER), coincide en el diagnóstico: “ Viene sostenida la baja. Diciembre va a reactivar, pero recién en las últimas semanas. No creo que haya posibilidades de un repunte fuerte ”, consideró. La estabilización reciente de precios, con una baja de la inflación, lejos de acelerar las compras por adelantado, está generando el efecto contrario. “ Al haber tranquilidad de precios la gente tampoco anticipa. Va a ser una compra moderada, racional ”, resume López. >>Leer más: El arbolito de Navidad de Oroño y Pellegrini se encenderá el próximo lunes 8 de diciembre Cambios de hábito Tanto Cassinerio como López remarcan transformaciones en los patrones de consumo que ya se venía detectando y que este año se profundizan. Las nuevas generaciones no tienen incorporado el consumo tradicional de turrones y confituras navideñas, y además se observan mesas más reducidas, más viajes de vacaciones durante las fiestas y familias reconfiguradas por las separaciones. “Las fiestas ya no son con tanta gente y también está el factor económico. En fin, serán unas fiestas en modo ahorro con menúes normales”, resume Cassinerio. Incluso en las despedidas de año se observa un corrimiento desde la gastronomía hacia las reuniones en casas. “Según nos cuentan los clientes, se ve una tendencia a comprar en súper para juntarse y abaratar costos en lugar de bares”, apunta López. "Eso viene sucediendo y seguramente se vea incrementado ahora con el tema despedidas. El 'yo pongo la carne, vos la bebida y otro el postre' viene desde hace rato", dice el presidente de Casar. Los supermercados de proximidad son los que más sienten ese movimiento, mientras que las grandes superficies siguen enfrentando una caída más marcada. >>Leer más: Diez ideas para armar un arbolito de Navidad económico: libros apilados, plantas de interior y hasta fotos Estrategias de diciembre La industria y el comercio trabajan contrarreloj para evitar sobrantes de mercadería después del 24 y el 31. Cassinerio adelanta que habrá promociones específicas en productos festivos y se esperan también los descuentos bancarios de fin de año. Los supermercados buscan además captar al cliente con descuentos en efectivo, un formato que volvió a ganar espacio. “El descuento directo en efectivo se está imponiendo mucho. Es una forma de mejorar la recaudación y además ser más competitivos”, explica López, quien señala que este esquema también les permite aprovechar oportunidades de compra de mercadería más barata en cash. El balance del sector no deja mucho margen a la sorpresa: la baja del consumo rondará entre el 8 y el 10% interanual. “Eso es lo que vamos a cerrar en facturación y en unidades vendidas”, indica López. >>Leer más: Qué adornos no pueden faltar en el arbolito de Navidad para tener un año próspero Changos más chicos Dentro del sector remarcan que las realidades son distintas: los autoservicios de barrio empiezan a mostrar una leve mejora, mientras que las cadenas grandes se sostienen con más dificultades. “Los negocios de proximidad tienen la posibilidad hoy de empezar a mejorar las ventas, pero las estructuras más grandes están muy complicadas porque dependen de una compra más masiva y del famoso llenado de changuito, que no sucede”, remarcó. Una postal de este cambio: algunas firmas locales redujeron el tamaño de los carritos para que visualmente parezca una compra más abultada. “No es que se compre más. Se achicaron los contenedores”, grafica López. Con compras moderadas, mesas más acotadas y una estrategia comercial que busca no perder terreno, los supermercados rosarinos encaran unas fiestas marcadas por la prudencia. La mirada está puesta en las últimas dos semanas del mes, donde se jugará gran parte del movimiento comercial. Pero, como coinciden los supermercadistas, 2025 será un cierre con austeridad como marca de época.
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