Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Sufrió un infarto y vinculan el cuadro al uso de cigarrillos electrónicos

    Parana » El Once Digital

    Fecha: 06/12/2025 14:31

    Un hombre de 33 años fue hospitalizado de urgencia en Londres luego de sufrir un infarto agudo de miocardio que, según los médicos, se originó por un vasoespasmo coronario asociado al uso de cigarrillos electrónicos. El caso, reportado por la prensa británica, volvió a encender las alertas sobre los riesgos del vapeo, una práctica cada vez más extendida entre jóvenes y adultos que no cuentan con antecedentes de tabaquismo. El paciente, Fraser Olender —conocido por su participación en el reality Below Deck— relató que sintió un dolor torácico intenso y una dificultad respiratoria que motivaron su internación inmediata. Los especialistas identificaron que el episodio cardíaco estuvo provocado por una intoxicación por vapeo que redujo el flujo sanguíneo al corazón. “Nunca había experimentado un miedo o dolor así”, expresó tras su recuperación. El crecimiento del vapeo y sus efectos en el sistema cardiovascular El uso de cigarrillos electrónicos aumentó de forma acelerada en los últimos años y estudios recientes señalan que uno de cada diez adultos los utiliza. Lo llamativo es que una porción significativa de los usuarios nunca había fumado antes, mientras que otra combinación creciente alterna entre vapeo y tabaco tradicional. Investigadores como el Dr. Gareth Nye, de la Universidad de Chester, advirtieron que el incremento del vapeo “introduce riesgos de salud que no se habrían presentado de otra manera”. La nicotina presente en la mayoría de los líquidos eleva la frecuencia cardíaca y la presión arterial, lo que representa un riesgo adicional para personas con enfermedades preexistentes. Cardiólogos británicos recomendaron abandonar tanto el tabaco como los cigarrillos electrónicos debido al impacto negativo en el rendimiento físico y al aumento de probabilidades de sufrir episodios cardíacos. Más allá del impacto cardiovascular, especialistas señalaron que los pulmones también sufren efectos graves derivados del vapeo. Casos como el de Kyla Blight, una adolescente de 17 años que debió ser operada tras el colapso de un pulmón por inhalar el equivalente a cientos de cigarrillos semanales en forma de vapor, ilustran el alcance de la problemática. Los profesionales advierten sobre la formación de ampollas de aire, neumonía lipoidea e inflamación por acumulación de células muertas, condiciones vinculadas al glicerol presente en los líquidos. Investigaciones científicas señalan que, cuando se somete a calor, esta sustancia puede transformarse en formaldehído, un compuesto cancerígeno. Estudios publicados en Cancers y en otras revistas especializadas señalaron un riesgo significativo de desarrollar cáncer de pulmón y tumores en cabeza, cuello, mama, sangre, próstata y vejiga. Los investigadores detectaron daños en el ADN y procesos inflamatorios que podrían anticipar la aparición de enfermedades oncológicas. Efectos en la salud bucal, digestiva y neurológica La evidencia médica también revela complicaciones en otros sistemas del cuerpo. En el ámbito bucal, expertos indicaron que la nicotina reduce el flujo sanguíneo en las encías, lo que favorece enfermedades periodontales y pérdida de piezas dentarias. En el sistema digestivo, investigaciones citadas por medios británicos sostienen que los líquidos de vapeo pueden deteriorar la barrera intestinal, generando inflamación crónica que se vincula con patologías como diabetes, artritis y distintos tipos de cáncer. A nivel neurológico, estudios realizados por la Universidad de Rochester describieron mayores dificultades de concentración y memoria entre adultos y niños que vapean, aunque los científicos aclararon que la relación causal continúa en estudio. Recomendaciones sanitarias frente a una práctica en expansión Frente a la evidencia acumulada, organismos internacionales como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos reafirmaron su posición: “Si no vapeas, no empieces”. La entidad destacó que la mayoría de los dispositivos contiene nicotina, altamente adictiva, y que los aerosoles generados pueden incluir sustancias tóxicas y partículas finas que penetran en los pulmones. La American Cancer Society también alertó sobre la falta de estandarización en los productos y la presencia de compuestos nocivos, incluso en niveles inferiores a los del cigarrillo convencional. Tras su internación, Olender afirmó que dejó de usar cigarrillos electrónicos y aseguró notar una mejoría general en su salud, especialmente en el estado de su piel. Su testimonio se convirtió en un nuevo llamado de atención en un contexto donde el vapeo gana terreno, pero también evidencia científica y casos clínicos que advierten sus riesgos.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por