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Parana » InfoParana
Fecha: 06/12/2025 02:47
El sector de los combustibles vuelve a ser noticia por una nueva escalada de precios, la octava desde el inicio de noviembre, que ha generado fuerte preocupación por su impacto directo en la inflación y el consumo. Alejandro Di Palma, referente del sector y titular de estaciones de servicio, dialogó con el equipo periodístico y calificó los incrementos como una «locura» sin variables económicas que los justifiquen. Un Aumento que Supera el 8% sin Motivos Claros Di Palma expuso que, desde el 1 de noviembre hasta la fecha, el combustible ha aumentado en ocho oportunidades. La nafta súper, el producto más representativo, acumuló un incremento del 8,27% en ese período. El empresario puso en tela de juicio la lógica de estos aumentos, señalando que las variables clave se encuentran estables o a la baja: Petróleo Crudo: El precio del barril ha vuelto a bajar en las últimas semanas. Dólar: La divisa se mantiene «planchada» o estable. Costos Operativos: Los insumos, en su mayoría importados y pagados a un dólar estable, y los salarios no han tenido aumentos sustanciales. Impuestos Internos: Solo se registró un aumento mínimo de los impuestos internos el 1 de diciembre, insuficiente para justificar el grueso de los incrementos. “La verdad que no hay muchas explicaciones para esto… Lo que se ve concretamente es que lo que se aumentó es la renta petrolera, es el permiso, es la decisión política del gobierno de permitir a las petroleras, con YPF a la cabeza, que se lleve adelante una adecuación del precio que no responde a ninguna variable, solamente a un discrecional aumento de renta.” Según Di Palma, el aumento representa una «transferencia de renta» desde la sociedad hacia las grandes petroleras, lo que explica también el interés de grandes inversores en adquirir activos energéticos en el país (como el caso de la venta de activos de Raízen). Combustible a Precio de Europa del Norte y el Impacto en el Consumo Di Palma advirtió que, de continuar esta tendencia, Argentina se encamina a alcanzar el valor del combustible del norte de Europa, el más caro del mundo, a pesar de ser un país productor. El análisis de precios en términos relativos revela el golpe al poder adquisitivo: Nivel de Salario: Si bien el precio en Argentina puede compararse con el de países como España (alrededor de €1,13 por litro), los salarios promedio en Europa son significativamente superiores a los $200 a $400 dólares que se manejan en Argentina. Aumento Energético General: Di Palma sostuvo que subir el costo de la energía afecta absolutamente a todos, impactando fuertemente en la economía del usuario y generando una caída desmedida del consumo en general. «Evidentemente la caída de consumo tiene su explicación, y es en estas dos variables… el aumento del precio de manera desmedida y la caída y la pérdida de poder adquisitivo frente a estos precios que son de Europa del Norte», afirmó el entrevistado. Crisis en el Sector Porcino: El Ingreso Histórico de Carne Importada Di Palma, quien también es emprendedor en el sector porcino, se refirió a la crítica situación que atraviesa la producción cárnica nacional debido a la apertura indiscriminada de importaciones. «Estamos asistiendo al ingreso más importante de la historia del país de carne de cerdo,» afirmó. Según el referente, esta decisión es «descabellada» y se está llevando a cabo «sin medir ningún tipo de barrera sanitaria». Cuestionó la lógica de importar productos que el país es capaz de producir, señalando que la manipulación del tipo de cambio termina subsidiando la producción y el trabajo en otros países (como Brasil o Dinamarca), bajo el pretexto de «moderar el precio» local. Desconfianza en las Cifras de Inflación Finalmente, el diálogo abordó la presunta manipulación de las cifras de inflación, ante la expectativa de algunas consultoras privadas de que el índice de precios al consumidor (IPC) de noviembre podría ubicarse en un escueto 2,3%. Di Palma manifestó su desconfianza: «Me parece que hay un montón de cosas que hacen ruido… La verdad el tema, esto hay que decirlo. Yo reconozco en este gobierno que se están encarando dimensiones que pueden resultar interesantes… ahora, hay que decirlo con un modelo absolutamente insustentable.» Concluyó que el relato oficial sobre la baja inflación y la ausencia de un proceso recesivo es difícil de sostener, ya que «la realidad siempre se impone» cuando el usuario no puede «ni prender la luz, ni comer carne, ni andar en auto.»
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