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» Sin Mordaza
Fecha: 04/12/2025 02:07
La dirigencia de Unión atraviesa días de análisis profundo. El balance económico del año expuso un desfasaje mayor al previsto y obligó a revisar operaciones que parecían encaminadas. En ese contexto, las continuidades de Matías Tagliamonte, Mauricio Martínez y Diego Armando Díaz volvieron al centro del debate. El único caso sin margen para dudas es el de DAD: Unión ejecutará la opción de compra y asegurará su permanencia. Pero el panorama cambia al analizar el resto del plantel. Tagliamonte, entre la intención y la realidad El arquero, una de las figuras del último semestre, tenía una opción de compra cercana a los 500 mil dólares, cifra que hoy resulta inalcanzable para el club. Aun así, la puerta no está cerrada. Unión buscará alternativas con Racing, con quien mantiene una relación fluida tras operaciones recientes como las de Pardo, Balboa y el vínculo compartido en la venta de Nardoni. El Tatengue confía en que ese escenario permita renegociar la continuidad del arquero en condiciones más accesibles. Martínez, cada vez más lejos El panorama es distinto con Mauricio Martínez. Para quedarse con la mitad de su pase, Unión debía desembolsar 350 mil dólares, cifra que la dirigencia ya descartó afrontar. A eso se suma un condicionante contractual que complica cualquier negociación: el volante tiene solo un año de vínculo con Rosario Central. Para volver a Unión debería renovar primero con el Canalla y luego salir a préstamo nuevamente, una ingeniería difícil de sostener desde lo deportivo y lo económico. Por ahora, su salida es el escenario más probable. O bien Unión podría retenerlo con un acuerdo sustancialmente menor, o el jugador regresará a Central para cumplir su último año casi sin actividad. Un mercado sin ingresos frescos El trasfondo de estas decisiones está en la falta de recursos nuevos. La venta de Franco Pardo a Racing no dejó un margen positivo: Unión ya había invertido previamente en la compra de Maizon Rodríguez, anticipándose a la salida del defensor. Esa ecuación dejó al club en un escenario económico más ajustado, que ahora obliga a evaluar cada movimiento con precisión. Con un mercado de pases clave por delante, el Tate enfrenta el desafío de sostener su proyecto deportivo sin exceder su presupuesto. Las definiciones de los próximos días marcarán buena parte del rumbo para la temporada 2026.
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