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  • Córdoba: le cortó el pene a su amante con una tijera de jardinería y quedó en libertad

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 21/11/2025 10:42

    La agresora tenía 27 años al momento del ataque. Brenda Micaela Barattini, la mujer que había sido condenada a 13 años de prisión en Córdoba por mutilar los genitales de su amante, quedó en libertad antes de cumplir la pena. Aunque debía permanecer presa hasta 2030, logró obtener la libertad condicional antes de lo previsto. El sangriento episodio por el que fue hallada culpable de tentativa de homicidio ocurrió en 2017, cuando la joven hirió con una tijera de jardín al hombre con el que mantenía relaciones sexuales casuales. Tras el ataque, Barattini quedó bajo arresto y fue condenada dos años más tarde. Ahora, tras casi ocho años en la cárcel de Bouwer, la arquitecta recibió la libertad condicional. Este beneficio estaba previsto para el 25 de noviembre de 2026, pero lo obtuvo un año antes gracias a los cursos de capacitación que realizó. Barattini recibió la libertad condicional antes de lo previsto. La Voz de Córdoba precisó que el juez de Ejecución Facundo Moyano Centeno otorgó el beneficio el pasado martes, aunque con una serie de condiciones: fijar un domicilio, seguir un tratamiento psicológico ambulatorio y reportarse mensualmente a la Agencia de Supervisión de su ciudad, Comodoro Rivadavia (Chubut). También tiene una orden de restricción de contacto y acercamiento a la víctima. En la cárcel, Barattini se dedicó casi por completo a estudiar. Aunque ya era arquitecta al momento de ingresar, aprobó diez materias de la carrera de Derecho y ocho de la Licenciatura en Letras Modernas. Además, cursó talleres de peluquería, panadería, pastelería y “Capacidades Sociolaborales”. También completó cursos de “Derechos Humanos” y “Derecho a pensar en libertad”, seguidos por “Corretaje inmobiliario” y “Gestión de subastas” en la Universidad Blas Pascal, así como formaciones en bibliotecaria, folklore e informática. Recientemente, asistía al curso de “Capacitación de Auxiliar de Jardinería, Viverismo y Horticultura” del Ministerio de Desarrollo Social y Promoción del Empleo. En la cárcel, Barattini se dedicó casi por completo a estudiar. De acuerdo con el informe al que accedió el medio cordobés, Barattini “reconoce su conducta como inadecuada y puede identificar las consecuencias que sus actos produjeron en la víctima y en su entorno”. El documento también señala que cuenta con “reflexiones en torno al registro del impacto de la gravedad de los hechos en la vida de la víctima”. El ataque Brenda y Sergio habían comenzado su relación un año antes del hecho. A las 22.30 de ese 25 de noviembre de 2017, la víctima llegó al departamento donde vivía Brenda, ubicado en la calle Chacabuco al 500, en el barrio Nueva Córdoba. Allí se había mudado algunos años antes, desde su Chubut natal, para estudiar. La mujer lo recibió y subieron al departamento. Comenzaron a tener relaciones. “Era un vínculo del tipo sexual”, se lee en la causa. Barattini durante la audiencia judicial (La Voz / Ramiro Pereyra) Según lo que quedó asentado, Brenda le propuso a su amante vendarle los ojos. Sergio dio su consentimiento y ella tomó un antifaz que habia preparado con anterioridad y que había dejado a mano. Luego de eso, con ambos ya desnudos, ella se sentó sobre el pecho de él y comenzó a hacerle sexo oral. El hecho que cambiaría la vida del hombre estaba a punto de concretarse. En esa posición y con Sergio sin poder ver nada, Brenda realizó un rápido movimiento en el cual estiró su brazo hacia abajo de la cama, donde previamente había escondido una tijera de podar oxidada. Tomó el artefacto de jardinería con sus dos manos y, sin dejar de hacerse sexo oral, le rebanó el pene y uno de sus testículos a su amante. De inmediato, el acto sexual se convirtió en una escena dantesca. El hombre comenzó a gritar del dolor y a perder una impresionante cantidad de sangre, mientras que Brenda pedía ayuda también a los gritos. Aunque parezca increíble, a pesar de su estado, Sergio logró salir del departamento y se arrastró por las escaleras hasta subir un piso. Ya en el 7ª, se tiró contra una pared mientras suplicaba ayuda. Pocos segundos tardaron los vecinos en salir a socorrerlo. La habitación donde se produjo la agresión Cuando los vecinos estaban ayudando a Sergio haciendo presión sobre la herida para detener la hemorragia y, al mismo tiempo, llamando al 911 para que envíen una ambulancia, Brenda se alejó unos metros y sacó su celular. Ella no llamó a emergencias. Buscó el contacto de su novio, Gonzalo Rodriguez y le pidió que fuera al departamento. Al cabo de unos minutos, llegó la ambulancia y Sergio Fernández fue trasladado. Estuvo a punto de perder la vida por la gran cantidad de sangre derramada, pero lograron salvarlo. Por supuesto que, en esas primeras horas, los médicos se encontraron con sus genitales completamente destrozados. Sin embargo, ni el pene ni los testículos fueron amputados del todo. Barattini, a la hora de hablar, no pudo negar el hecho. Pero sí se ocupó de dar sus explicaciones de por qué había actuado así. Fueron, en total, dos versiones. Ni el pene ni los testículos fueron amputados del todo. Primero aseguró que Sergio había intentado violarla. Explicó que lo habia invitado a su departamento pero que, una vez allí, el hombre se había aprovechado de ella. Sin embargo, esta versión no le duró mucho. No pudo justificar que su supuesto violador haya tenido puesto un antifaz, ni mucho menos la presencia de las tijeras de podar debajo de la cama. Luego Brenda Barattini dio paso a una segunda versión, que sería la definitiva para ella y que la acompañaría hasta el juicio oral. Ante la justicia contó que, en realidad, había utilizado las tijeras como una venganza. Según relato, su amante había distribuido un video sexual suyo que se había viralizado y que la había afectado significativamente. Y fue por eso, que le cortó el pene.

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