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» Diario Cordoba
Fecha: 17/11/2025 15:36
La bailaora y creadora cordobesa Lidia Reyes estrenará el martes 18 de noviembre en el Teatro Talía de Valencia Inocencia dormida, un espectáculo que reivindica la mirada de la infancia como espacio de resistencia emocional. La pieza forma parte del ciclo Panorama Flamenco y supone la primera producción de su propia compañía artística. Inocencia dormida surge, según explica la directora artística, de una reflexión sobre la identidad y las capas que se construyen con el paso del tiempo. Reyes señala que “la idea del espectáculo es volver a ser quienes fuimos, a nuestra verdadera esencia”, rescatando la mirada libre de prejuicios propia de la niñez. El montaje contrapone esa inocencia al contexto actual de miedo, incertidumbre y deshumanización, donde la infancia se convierte en testigo de la escasez, el exilio y la vulnerabilidad. Regreso a la esencia La obra no pretende solo mostrar una historia, sino despertar en el público la parte íntima que permanece latente bajo la costumbre y el paso del tiempo: la capacidad de asombro, la alegría espontánea y la ternura que aún habitan en la memoria. Ese regreso a la esencia se plantea como un acto poético, pero también como un gesto de resistencia ante un mundo saturado de ruido y urgencias. La bailaora y creadora cordobesa Lidia Reyes estrenará el martes 18 de noviembre en el Teatro Talía de Valencia 'Inocencia dormida'. / CÓRDOBA Desde el lenguaje flamenco, Inocencia dormida recupera el juego como impulso creativo y como forma de entender el movimiento. El proyecto combina danza española —con especial protagonismo del baile flamenco— con música, poesía y visuales que dialogan con elementos teatrales contemporáneos. El resultado construye un espacio escénico poético donde el cuerpo transita entre el adormecimiento y el despertar, explorando la lenta recuperación de la vitalidad. Tres ejes simbólicos La propuesta se articula en torno a tres ejes simbólicos: el cuerpo como memoria, el niño interior como figura escénica y el juego como motor coreográfico. En escena, el flamenco convive con variaciones de escuela bolera, danza urbana y danza contemporánea, en una investigación que busca nuevos modos de habitar el movimiento. La creación colectiva se completa con un proceso de improvisación, escucha y diálogo entre intérpretes, músicos y artistas visuales. El elenco artístico incluye a Helena Feenstra y Ángel de la Santa a la guitarra; Antonio Amador Toneti y Rafael Vargas El Chino al cante; Manuel Quintero en la percusión; y a las bailaoras Lidia Reyes, Irene Gaitán, Lorena Martínez y Sara Izquierdo. La dirección artística corre a cargo de la propia Reyes, cuya trayectoria abarca danza, teatro musical, televisión y creación contemporánea, con formación en Córdoba, Sevilla, Madrid y París. Actualmente residente en Valencia, Reyes desarrolla su labor artística y pedagógica en escuelas, tablaos y teatros de la ciudad, donde continúa investigando sobre los vínculos entre flamenco, memoria y creación escénica.
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