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Concepcion del Uruguay » La Pirámide
Fecha: 03/11/2025 01:23
Es una iniciativa de la Unión de Clubes Parroquiales y de la Confederación Argentina de Básquet. El objetivo principal de esta iniciativa es simple: llegar con el deporte a los pibes y a las pibas de los barrios marginales, antes que el dealer llegue con la droga. El intendente José Lauritto recibió a representantes de la Unión de Clubes Parroquiales y de la Confederación Argentina de Básquet, quienes presentaron la iniciativa que busca incluir a niños y jóvenes de los barrios populares en actividades deportivas y comunitarias, fortaleciendo el trabajo social de las parroquias locales. El Presidente Municipal José Lauritto junto a la Secretaria de Desarrollo Social Marianela Marclay y el Secretario de Cultura, Turismo y Deportes Sergio Richard, recibieron días pasados a Juan Manuel Gauna, Presidente de la Unión de Clubes Parroquiales y al Secretario General de la Confederación Argentina de Básquet, Santiago Losada, quienes presentaron ante autoridades eclesiásticas de la ciudad, la iniciativa de los “clubes parroquiales” y la importancia del deporte social. En el encuentro estuvieron presentes el Padre Gregorio Nadal de la Basílica Inmaculada, el Padre Mario Maio de San Roque, Alberto Gauna, apoderado de Santa María Goretti y Javier Asín del Hogar de Cristo de Gualeguaychú. “Nos pone muy contentos llegar a Entre Ríos queremos presentar nuestro trabajo a las federaciones provinciales de todo el país. Nucleamos a los clubes que están por debajo del sistema, de cuota cero y arraigados en los barrios populares con mayor vulnerabilidad. Creemos que los clubes son herramientas transformadoras y espacios preventivos. Agradecemos mucho esta oportunidad de difundir lo que hacemos”, señaló Juan Manuel Gauna. El vínculo con el básquet La Unión de Clubes Parroquiales, ya desde febrero de este año, pertenece a la Confederación Argentina de Básquetbol como una entidad que adhiere a la Confederación. Como lo hace también la FADE, la Federación Argentina de Deporte Escolar, y FEDUA, la Federación del Deporte Universitario Argentino. “La alianza entre la Confederación Argentina de Básquet y la Unión de Clubes Parroquiales es una apuesta a largo plazo. Una apuesta a que el básquet sea, cada vez más, un derecho garantizado y no un privilegio, un espacio de encuentro y cuidado, una herramienta de inclusión que transforme realidades en cada rincón de la Argentina. Este es un primer paso para acercar esta herramienta a la comunidad de Concepción del Uruguay”, destacó Santiago Losada, Secretario General de la Confederación Argentina de Básquet y presidente del Club Rocamora. Llegar antes… El objetivo principal de esta iniciativa es tan simple como crudo: llegar con el deporte a los pibes y a las pibas de los barrios marginales, antes que el dealer llegue con la droga. Por eso la red de clubes parroquiales busca extenderse al interior del país, porque la situación no escapa a las realidades de nuestras ciudades. “Se busca llegar a cada lugar donde se pueda llegar, junto con las comunidades locales y que se puedan crear estos clubes que complementan la labor social de los clubes tradicionales”, señaló Gauna en la reunión. En concreto, “en Concepción del Uruguay y en Entre Ríos de la mano de la Federación Entrerriana de Básquet, y nosotros como CAB, impulsamos este movimiento para llegar a las ciudades y generar eventos, entrenamientos, en algún momento juntar dos o tres Parroquias y hacer algún torneo o encuentro, gestionar la construcción de playones donde los chicos pueden ir a jugar al básquet”, señaló Losada, y agregó: “Originalmente los clubes parroquiales estuvieron más ligados al fútbol, pero nosotros hace un año y pico que con Juan Manuel (Gauna), empezamos a insertarlo en el básquetbol”. Los clubes parroquiales Bajo la dirección de Juan Manuel Gauna, la Unión de Clubes Parroquiales reúne hoy a más de 88 clubes en todo el país, con la participación de más de 25.000 niños, niñas y jóvenes, y el trabajo cotidiano de más de 800 referentes comunitarios. Los clubes parroquiales nacen en el corazón de los barrios populares, impulsados por la convicción de cuidar lo más valioso: las infancias y juventudes. Son espacios que entienden al deporte social y comunitario como un instrumento transformador, colaborando en la construcción de comunidad y ofreciendo propuestas que llegan antes que otras opciones nocivas que fragmentan el tejido social. Insertos en villas y barrios populares, inspirados por la acción pastoral de los Curas Villeros, estos clubes garantizan acceso y permanencia en la práctica deportiva, aportando a la dignidad humana y al fortalecimiento de los lazos comunitarios.
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