13/10/2025 17:47
13/10/2025 17:47
13/10/2025 17:47
13/10/2025 17:46
13/10/2025 17:46
13/10/2025 17:46
13/10/2025 17:46
13/10/2025 17:46
13/10/2025 17:45
13/10/2025 17:45
» Derf
Fecha: 13/10/2025 15:35
Entrenar sin compañía puede ser un desafío: no tenés a alguien que te empuje, que te acompañe en la rutina o que te recuerde que no es momento de aflojar. Sin embargo, con algunas estrategias simples podés mantener el foco y sostener la constancia. Definí objetivos claros Tener una meta concreta (correr 5 km, aumentar la fuerza, mejorar la postura) hace que cada sesión tenga un sentido. Lo importante es que sean alcanzables y que puedas ir ajustándolos con el tiempo. Armá una rutina establecida Si entrenás siempre a la misma hora, tu cuerpo y tu mente se acostumbran. Convertirlo en un hábito ayuda a reducir la tentación de posponerlo. Usá música o podcasts motivadores Armar una playlist con temas que te den energía o escuchar un podcast que te entretenga puede hacer que el entrenamiento pase mucho más rápido y sea más llevadero. Registrá tu progreso Anotar lo que hacés o usar una app para registrar tiempos, repeticiones o sensaciones es una gran forma de ver avances y motivarte a seguir. Variá los ejercicios La monotonía desmotiva. Alternar rutinas, probar nuevas disciplinas o cambiar el entorno donde entrenás mantiene el interés y desafía al cuerpo de distintas maneras. Premiate por el esfuerzo Reconocer tus logros con pequeños premios (un baño relajante, tu comida favorita, una tarde libre) refuerza el hábito y lo asocia a algo positivo.
Ver noticia original